Dr Macaluso, buenos días, le escribo desde Colombia, para dejar planteada una pregunta dirigida al grupo:
¿En pacientes con GGT por encima de 100, debería descartar posible toxicidad por metales pesados? Virus ?? CMV?? Efecto post vacunas??
Mi inquietud es debida a que últimamente me han llegado pacientes que como único hallazgo de laboratorios presentan la GGT muy alta, en algunos transaminasas normales o levemente elevadas
Agradezco me oriente
Dra. Ana María Iriarte
San Agustín (Huila), Colombia
La pregunta que plantea la Dra es interesante dado la alta prevalencia que existe en el contexto de la consulta externa de Clínica Médica del aumento de las enzimas hepáticas como único hallazgo de laboratorio, en pacientes por otro lado asintomáticos. La solicitud cada día más frecuente del llamado “hepatograma” en un análisis de laboratorio solicitado “por rutina”, probablemente explique este hallazgo. La respuesta a la pregunta de la doctora, es muy difícil de responder sin decir que cualquier valor alterado de laboratorio debe ser leído a la luz de una historia clínica completa. Un valor de laboratorio alterado puede ser un dato trivial sin ninguna repercusión en la salud del paciente, o puede ser la “punta del iceberg” de una condición patológica hasta ese momento no detectada y desconocidas para el médico y el paciente. Por otro lado, hay que decir, que las pruebas realizadas en un “hepatograma”, incluyen mediciones de marcadores bioquímicos que no siempre están relacionados con el hígado, caso por ejemplo de la bilirrubina indirecta aumentada en los cuadros hemolíticos, o la fosfatasa alcalina en patología esquelética.
En el caso concreto de la gama glutamil transpeptidasa, hay que decir que es una enzima que no sólo se encuentra en los hepatocitos y en las células epiteliales hepáticas, sino también en riñones, vesículas seminales, páncreas, bazo, corazón y cerebro. El valor normal de la GGT va de 0 a 30 (UI/L), pero puede variar con el método utilizado para medición y con cada laboratorio. En general los clínicos tenemos el concepto de la “alta sensibilidad” de la GGT, en la detección de enfermedad hepatobiliar que otras enzimas. Se puede decir en general que esto es así, ya que puede ser un indicador más precoz que la FAL en la colestasis o que las transaminasas en lesiones hepatocelulares de diferentes causas. Digamos que en general, el aumento de la GGT se correlaciona más con la FAL que con cualquier otro valor hepático de laboratorio, y es un marcador importante y muy usado en la práctica clínica, cuando estamos estudiando un aumento de la FAL sérica y no sabemos si esta es de origen óseo, o hepático. La normalidad de la GGT en ese contexto, prácticamente descarta hepatopatía apuntando más a origen óseo de la FAL, que puede ser posteriormente confirmado por el dosaje de la más específica FAL ósea. Sin embargo, hay que aclarar que el aumento de la GGT no es sinónimo de enfermedad hepática ya que puede aumentar en pacientes que toman medicamentos como fenitoína o barbitúricos entre otras drogas, o en pacientes que beben alcohol, donde es mucho más sensible que cualquier otro marcador humoral. Quizás este último dato, explique muchos de los aumentos aislados de la GGT en la práctica clínica, ya que una elevación aislada de la GGT sérica o una elevación de la GGT fuera de proporción con la de otras enzimas (como la fosfatasa alcalina y la alanina aminotransferasa) puede ser un indicador de abuso de alcohol o enfermedad hepática alcohólica. La GGT es un marcador de alcoholismo y puede orientar a la causa en pacientes que niegan el hábito, especialmente cuando se asocia a otros elementos de laboratorio con los que los clínicos estamos familiarizados como son el aumento desproporcionado de la aspartato amino transferasa (AST), o (TGO), sobre la alanino amino transferasa (ALT), o (TGP), en una relación de 2:1 o mayor, especialmente si el paciente tiene macrocitosis (VCM >100). Esta combinación de hallazgos de laboratorio suele ser las “huellas digitales” del paciente con alcoholismo.
Por último, y, para resumir, volvemos a decir que la GGT es una enzima muy sensible pero que no tiene alta especificidad ya que puede verse elevada en hígados sanos, en pacientes con colestasis, en pacientes son masa ocupante intrahepática, como también en pacientes con hepatopatías graves, hepatitis agudas y crónicas, cirrosis etcétera.
Una GGT elevada EN FORMA AISLADA con el resto de las pruebas bioquímicas hepáticas normales (incluida una fosfatasa alcalina normal) NO DEBE CONDUCIR A UN ESTUDIO EXHAUSTIVO DE ENFERMEDAD HEPÁTICA.