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Channel: EL RINCÓN DE LA MEDICINA INTERNA. juanpedromacaluso@yahoo.com.ar
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RESPIRACIÓN DE KUSSMAUL EN ACIDOSIS DIABÉTICA

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Paciente de 50 años con DBT2 y fracaso secundario que presentó acidosis diabética en el contexto de infección urinaria y poca adherencia a la insulinoterapia y dieta.  

UN CAMBIO DE CORAZÓN...

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En este ejercicio clínico se presenta un caso que es discutido por un médico internista al que se le van proporcionando datos de la historia clínica en forma secuencial, y este analiza el cuadro a la luz de los nuevos elementos, de una manera análoga al proceso diagnóstico en la práctica real de la medicina.


Una maestra de escuela 57 años de edad, con antecedentes de hipertensión consultó a un centro de urgencias por opresión precordial y mareos. La presión en el pecho había comenzado poco después de que llegó al trabajo por la mañana, cuando fue amenazada físicamente por uno de los padres de uno de sus alumnos de quinto grado. Sus síntomas mejoraron con el descanso inmediatamente después de los hechos, pero luego se agravaron hacia el final del día. Cuando regresó a casa, su marido le tomó la presión arterial y observó valores sistólicos entre 80 y 90 mm Hg, con una frecuencia cardíaca de aproximadamente 110 latidos por minuto. Sus síntomas y la presión arterial no mejoraron después de beber líquidos por lo que consultó a un centro de emergencias.


Opresión precordial puede sugerir cualquiera de los diversos procesos de la enfermedad, que van desde condiciones benignas hasta emergencias que amenazan la vida. En presencia de hipotensión, la evaluación inicial debe centrarse en  descartar estas  últimas condiciones que incluyen  síndrome coronario agudo, la disección aórtica, embolia pulmonar, ruptura esofágica, y neumotórax a tensión. Trastornos cardíacos adicionales como la miocarditis o pericarditis también son consistentes con la presentación de este paciente. Trastornos no cardíacos que pueden causar opresión en el pecho incluyen la enfermedad por reflujo gastroesofágico, enfermedad ulcerosa péptica, la costocondritis, infección por herpes zoster, pleuritis, y ataques de pánico; sin embargo, sería de esperar que ninguno de estos últimos pueda causar hipotensión.


La paciente tenía antecedentes de hipertensión arterial bien controlada, pero no había otros problemas médicos. Su única medicación era lisinopril 5 mg al día. No había antecedentes familiares de enfermedad coronaria precoz o muerte cardiaca repentina. Había fumado unos cinco cigarrillos al día durante 30 años, rara vez bebía alcohol, y no informó sobre uso ilícito de drogas.
En la evaluación inicial, la paciente dijo tener  opresión en el pecho leve pero no estar con un cuadro agudo de angustia. Estaba afebril. Su presión arterial era de 83/50 mm Hg, su frecuencia cardíaca fue de 110 latidos por minuto, y la frecuencia respiratoria de 14 respiraciones por minuto. La oximetría de pulso reveló una saturación de oxígeno de 99% mientras respiraba 2 litros de oxígeno a través de una cánula nasal. Su cuello era flexible, y no estaba elevada la presión venosa yugular. La auscultación del tórax reveló un soplo sistólico in crescendo fuerte, que se oía mejor en el borde esternal superior derecho, pero sus pulmones estaban claros. El examen abdominal fue normal. Sus extremidades inferiores tenían temperatura normal, con pulsos distales simétricos, y sin edema. El resto del examen físico fue normal.


La hipotensión y taquicardia de esta paciente son preocupantes. Ellos pueden estar sugiriendo la etapa temprana del shock, lo cual justifica  pruebas  diagnósticas y manejo urgente, en particular en una paciente con opresión en el pecho. Su hipertensión y antecedentes de tabaquismo aumentan la probabilidad de un síndrome coronario agudo o disección aórtica. El fuerte soplo sistólico in crescendo puede estar relacionada con una enfermedad crónica, tal como una válvula aórtica bicúspide con estenosis, miocardiopatía hipertrófica obstructiva, o estenosis de válvula pulmonar. Un soplo nuevo puede anunciar una complicación mecánica del infarto de miocardio, como la ruptura del septum ventricular o rotura papilar-muscular, causando regurgitación mitral aguda.
Uno puede descartar rápidamente algunas de estas condiciones mediante la obtención de un electrocardiograma. Estudios adicionales que deben realizarse son radiografía de tórax, mediciones de biomarcadores cardíacos, y  ecocardiografía transtorácica, aunque esta última opción puede no estar disponible en un centro de atención de urgencia.


Un electrocardiograma de 12 derivaciones, obtenido aproximadamente 12 horas después de la aparición de la opresión en el pecho reveló ritmo sinusal normal; elevación del segmento ST de 1 a 2 mm en las derivaciones V2 a V4, con una onda T bifásica en V3; y profunda, inversión de la onda T simétricas de V4 a V6 (Figura 1). Los estudios de laboratorio, incluyendo la medición de biomarcadores cardíacos fueron solicitados. La radiografía de tórax mostró un mediastino normal, pequeños derrames pleurales bilaterales, y líneas B de Kerley, hallazgos que eran compatibles con edema pulmonar intersticial leve (Figura 2).





Figura 1. Electrocardiograma de Presentación, 12 horas después del inicio del dolor torácico.
Elevaciones del segmento ST que podría indicar  infarto de miocardio o algún otro trastorno menos grave.





Figura 2. Radiografía de tórax al ingreso.
La Rx muestra pequeños derrames bilaterales y líneas B de Kerley.


Los hallazgos electrocardiográficos son consistentes con un infarto agudo de miocardio, pero otras condiciones que se asocian con elevación del segmento ST y pueden por lo tanto imitar a un infarto de miocardio  deben ser consideradas. La hipertrofia ventricular izquierda con una anomalía repolarización, la más común de estas condiciones, no se manifiesta típicamente como inversión de la onda T simétricas en las derivaciones precordiales, y las elevaciones del segmento ST son generalmente de menos de 1 mm en las mujeres y son cóncavas en lugar de convexas. En la pericarditis aguda, las elevaciones del segmento ST son difusas, no localizadas. El síndrome de discinesia apical, una miocardiopatía aguda con disfunción ventricular izquierda reversible, también puede causar elevación del segmento ST e inversión de la onda T en forma difusa. El síndrome es precipitado con frecuencia por un evento estresante, que en este caso es coherente con la presentación de esta paciente.


A la paciente se le administró  aspirina, 325 mg por vía oral, y un bolo de 4,000 unidades de heparina por vía intravenosa, seguida de infusión continua. Se hicieron los preparativos para la transferencia de emergencia a un hospital, donde una intervención coronaria percutánea pudiera ser llevada a cabo.


Dado la hipotensión, taquicardia e insuficiencia cardíaca congestiva, la intervención coronaria percutánea primaria sería preferible a la terapia fibrinolítica. Por lo tanto, la preparación para el traslado a un hospital con esta capacidad sería lo ideal, pero  alguna forma de terapia de reperfusión se necesitan con urgencia. La administración agresiva de líquidos debe evitarse  dada la evidencia de edema pulmonar en la radiografía de tórax. La dopamina podría ser considerada para la hipotensión. Yo no recomendaría betabloqueantes o nitroglicerina en este momento, debido a la hipotensión.


A la llegada del paciente al hospital, su opresión en el pecho había mejorado, pero no estaba completamente resuelta. Su presión arterial era 82/61 mm Hg, con una frecuencia cardíaca de 97 latidos por minuto. Los resultados de laboratorio eran los siguientes:  hemoglobina 11,1 g por decilitro, recuento de plaquetas era de 190.000 por milímetro cúbico,  recuento de glóbulos blancos era de 10.300 por milímetro cúbico, el nivel de creatinina sérica fue de 0,7 mg por decilitro,  nivel de nitrógeno ureico en sangre fue de 17 mg por decilitro, nivel de glucosa en sangre fue de 106 mg por decilitro, nivel de creatina quinasa era 135 UI por litro, el nivel de creatina quinasa isoenzima MB fue de 14,1 ng por mililitro (rango normal, de 0 a 4.9), y la troponina I nivel en suero fue 4,23 ng por ml (normal,  menos de 0,30). Una repetición electrocardiograma mostró elevación del segmento STy persistencia de la inversión de  la onda T.


El ligero aumento de los biomarcadores cardíacos  confirma la lesión miocárdica, pero son incompatibles con 12 horas de la oclusión completa de una arteria coronaria. Estos niveles son algo inesperados y sugieren ya sea reperfusión coronaria espontánea, intermitente a lo largo del día o de otras condiciones cardiovasculares, como la miocarditis, pericarditis, o embolia pulmonar. Aunque es posible que los biomarcadores cardíacos ya hayan tocado techo y ahora estén bajando, la evolución en el tiempo y los hallazgos electrocardiográficos no son consistentes con esta explicación. Un ecocardiograma puede identificar anomalías regionales de la motilidad, enfermedad  valvular, derrame pericárdico, complicaciones mecánicas del infarto agudo de miocardio (como se señaló anteriormente), o incluso la enfermedad de la aorta proximal. Sin embargo, la causa más probable de la elevación del segmento ST y biomarcadores cardíacos elevados en esta configuración sigue siendo un infarto agudo de miocardio. Una cateterización cardíaca izquierda con  angiografía coronaria está indicada  sin más demora.


Cuál es el diagnóstico?

La resolución del caso se publicará el domingo 17/05/2015

ATENEO "HOSPITAL PINTOS" 29/04/2015. VARÓN DE 42 AÑOS CON ENDOCARDITIS POR STREPTOCOCCUS ANGINOSUS (STREPTOCOCCUS MILLERI)

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Paciente masculino de 42 años

Hospital "Dr Ángel Pintos" de Azul
MOTIVO DE INTERNACIÓN:   síndrome febril intermitente de 21 días de duración.

ANTECEDENTES DE ENFERMEDAD ACTUAL:
Comienza con fiebre  hace 21 días que dura según el paciente  dos días , con descenso espontáneo y nuevo pico febril a los 5 días. Presento los días siguientes escalofríos con registros febriles intermitentes, hasta las 72 horas previas al ingreso hospitalario cuando se instala fiebre persistente. Se decide su internación.

ANTECEDENTES PATOLÓGICOS: litiasis renal, cirugía pielocalicial. (2009)

EXAMEN FÍSICO
Al ingreso lucido, con T de 38 ºC, hipotenso 80/60, FC 100 latidos minuto,
Examen respiratorio :buena mecánica respiratoria, sin ruidos agregados
Examen cardiovascular  R1 R2 positivo en 4 focos hipofoneticos, soplo sistólico de intensidad 1/6, sin signos de Insuficiencia cardiaca.
Examen abdominal: abdomen blando, depresible, indoloro.
Sin adenopatías periféricas.
Sin foco neurológico.
Fauces: muy mal estado dentario, piezas faltantes.
Piel : presenta lesiones compatibles con psoriasis en ambas rodillas, y codos.

Placa de psoriasis en remisión.


LABORATORIO DE INGRESO:
Blancos 9100, Hto 41 Hb 14.2 Urea 51Creatinina 1.10 CPK 63 Na 142, K 4.67, cloro 103 Hepatograma normal VSG 30 Sedimento urinario: no patológico
RX DE TORAX. s/p


UROCULTIVOS Y HEMOCULTIVOS SE SOLICITAN
ECOGRAFIA ABDOMINAL: esplenomegalia de 16 cm.
TAC DE ABDOMEN Y PELVIS: lito en silueta renal izquierda. Esplenomegalia.
Se interpreta el cuadro como síndrome febril en estudio

EVOLUCIÓN
Se reciben resultados de  hemocultivos: 2/2 positivos para  cocos gram positivos en cadenas.
Por diagnostico presuntivo de endocarditis infecciosa de valvula nativa se inicia tratamiento empirico con ampicilina 4 gr cada 6 hs ev.
Mientras se espera el resultado del antibiograma se agrega gentamicina al tratamiento.
Ecocardiograma transtoracico: no evidencia signos de endocarditis.
Se solicita ecocardiograma transtorácico (ETE)
Se realiza fondo de ojo: no se observan signos focales, papilas y vasculatura normales.
Se recibe resultado de  antibiograma: estreptococcos grupo anginosus/ constellatum
Aparecen lesiones en las uñas compatibles con hemorragias en astilla

Hemorragias en astilla ("splinters")







Hemorragias en astilla ("splinters")


Hemorragias en astilla ("splinters")

Se realiza CIM a penicilina : 0.10 mcg/ml (germen sensible).
Intercurre con dolor intenso en pantorrilla izquierda, por lo cual se solicita ecodoppler venoso y arterial y ecografia de partes blandas. El Doppler venoso no se pudo realizar y la ecografía de partes blandas fue negativa.

Se realiza ETE:










Informa: “valvula mitral: leve prolapso de valva anterior con insuficiencia leve.
valvula tricuspide: aspecto normal. flujo tricuspideo anterogrado normal con insuficiencia leve.
valvula aortica: tricuspides con vegetacion adherida a la valva posterior no coronaria de 1 cm por 1 cm. se ve el cayado aortico, y aorta descendente, sin placas ni fuentes emboligenas.
con insuficiencia aortica de leve a moderada.
arteria pulmonar y la valvula son normales.
ventriculo izquierdo normal, funcion sistolica normal.
conclusion: vegetacion aortica, insuficiencia aortica de leve a moderada”.

CONCLUSIÓN
Diagnóstico final:   endocarditis de válvulaaórtica por  estreptococcos grupo anginosus.
El paciente continua con tto atb con ampicilina  y gentamicina por 3 semanas con buena evolución.
Se indica alta hospitalaria y se le entrega orden para ete a realizarse en forma ambulatoria.

ENDOCARDITIS INFECCIOSA

DEFINICION Y EPIDEMIOLOGIA

La  lesión prototípica de la EI es la vegetación o verruga, que consiste en una masa de plaquetas, fibrina, pequeñas colonias de microorganismos y escasas células inflamatorias.
 La infección afecta con mayor frecuencia  las válvulas cardiacas.
En los países desarrollados la incidencia de EI fluctúa entre 2.6 y 7 casos por 100.000 habitantes por año.
Aproximadamente 10.000 a 15.000 casos nuevos de EI son diagnosticados en EEUU por año
En un estudio observacional en Francia la incidencia anual fue de 33.8 casos por millón. La incidencia fue mayor en hombres entre los 75 a 79 años, y la mayoría no tenia enfermedad cardiaca previa.
 La EI asociada al cuidado de la salud represento el 27% de los casos.

FACTORES DE RIESGO
Edad >60 años: adultos mayores son mas propensos a desarrollar enfermedad  valvular degenerativa, y a requerir reemplazo valvular.
Sexo masculino
Usuarios de drogas EV
Mala dentición o infección dental

CONDICIONES COMÓRBIDAS:
Enfermedad estructural cardiaca, profilaxis antimicrobiana, enfermedad valvular, enfermedad de válvula mitral y de válvula aortica, enfermedad cardiaca congénita, estenosis pulmonar, válvula cardiaca protésica, historia previa de EI, presencia de dispositivo intravascular, endocarditis nosocomial, hemodiálisis crónica, infección por HIV

MICROBIOLOGIA
StreptococcoS y Staphilococcus son la mayoría de los casos.
Entre 2781 pacientes de una cohorte grande la distribución de los patógenos fue:
S. aureus: 31%
E. grupo viridans: 17%
Enterococo: 11 %
S. coagulasa negativo: 11 %
E. bovis: 7 %
Otros estreptococos: 5 %
Bacterias Gram negativa no HACEK: 2%
Hongos: 2%
HACEK: 2 %

MANIFESTACIONES CLÍNICAS
La EI generalmente se presenta en forma aguda.
Una  cuidadosa historia clínica debe realizarse, incluidos procedimientos quirúrgicos y médicos.
Lesiones cardiacas preexistentes y posibles focos infecciosos o  bacteriemias recientes o usuarios de drogas intravenosas.

EXAMEN FÍSICO 
Examen cardiaco cuidadoso.
Lesiones no específicas como: petequias,  lesiones en la conjuntiva se presentan como hemorragias que se ven con la eversión de los parpados, las  hemorragias en astilla son también inespecíficas.
Lesiones mas especificas de EI: lesiones de Janeway, nódulos de Osler, y manchas de Roth. Estas ocurren en un entorno prolongado de bacteriemia.
Pueden tener afectación de otros órganos debido a infección metastasica, eventos embolicos, reacción inmune sistémica. (glomerulonefritis).
En endocarditis de cavidades derechas la embolia pulmonar séptica puede ser vista.

DIAGNÓSTICO
Se basa en una combinación de factores: historia clínica y examen físico cuidadoso, cultivos de sangre, ecocardiograma , ECG y Rx de tórax.

CRITERIOS DE DUKE
El diagnostico de EI es generalmente directo en el entorno de hemocultivos positivos para un patógeno que puede causar endocarditis, junto con evidencia de afectación del endocardio.
Sin embargo esto es dificultoso, de distinguir entre EI y una fuente alternativa de infección en un paciente con bacteriemia con enfermedad cardiaca subyacente.
Algunos pacientes con EI no tienen cultivos de sangre positivos, y hasta un 25% de los pacientes no tienen lesión cardiaca identificable en la presentación inicial. Las características atípicas retrasan el diagnostico.

CRITERIOS MAYORES
1. HEMOCULTIVO POSITIVO
_microorganismo típico de la EI obtenido en dos HC diferentes. Estreptococo viridans, S. gallalyticus, mo del grupo HACEK, S. aureus, o Enterococos adquiridos en la comunidad en ausencia de un foco primario o
_Hemocultivo positivo persistente, definido como la recuperación de un microorganismo  compatible con una EI a partir de:
_HC extraidos con una separación > 12 horas; o
_3 o mas 4 HC diferentes, con una separación de por lo menos una hora entre la extracción del primero y el ultimo
_UN SOLO RESULTADO POSITIVO DE CULTIVO DE COXIELLA BURNETTI O UN TITULO DE AC IgG de fase I > 1:800.

2. SIGNOS DE AFECCION ENDOCARDICA
_ECOCARDIOGRAMA POSITIVO: tumoración intracardiaca oscilante en una válvula, en las estructuras de apoyo, o en la vía de chorros de insuficiencia mitral o en material implantado, o absceso o nueva dehiscencia parcial de una prótesis valvular o
Nueva insuficiencia valvular.

CRITERIOS MENORES
1. PREDISPOSICION: cardiopatía predisponente o consumo de drogas por via EV.
2. FIEBRE > DE 38 º C.
3. FENOMENOS VASCULARES: embolia arterial relevante, infartos pulmonares sépticos, aneurisma micotico, hemorragia intracraneal, hemorragias conjuntivales, lesiones de Janeway.
4. FENOMENOS INMUNITARIOS: glomerulonefritis, nódulos de Osler, manchas de Roth, Factor reumatoideo.
5. DATOS MICROBIOLOGICOS: HC pero que no cumple con los criterios mayores previamente indicados o signos serológicos de infección activa por un microorganismo compatible con una EI.

ENDOCARDITIS DEFINITIVA: 2 mayores; 1 mayor y 3 menores; o 5 menores.
Se recomienda la ETE para evaluar EI de válvula protésica o EI complicada.
Se excluyen los HC aislados para S. coagulasa positivos y difteroides que son contaminantes, y los gram negativos que no causan con frecuencia EI.

ESTUDIOS DE LABORATORIO
Cultivos de sangre: al menos 3 muestras de cultivos de sangre deben obtenerse durante un periodo de 1 hora antes del inicio de la terapia antimicrobiana empírica.
Cada conjunto de cultivos deben obtenerse de sitios de venopuntura separados.

HEMOCULTIVOS
Microorganismos típicos de EI: S. aureus, Streptococcus viridans y S. bovis, enterococo, grupo HACEK.
El riesgo de EI en pacientes con bacteriemia por S. aureus, es particularmente alto. Como resultado todos los pacientes con recuperación de S. aureus de los HC deben evaluarse para EI.
La probabilidad de EI depende de la especie de bacteria:
_la bacteriemia por Streptococcus sanguis es mas indicativo de EI que la bacteriemia por S. milleri (o anginosus )
_la bacteriemia debido a grupo A o C de estreptococo es raramente asociada con EI; mientras que el grupo G se asocia mas frecuentemente.
_la bacteriemia por Enterococo faecalis se asocia mas con EI que otras especies de enterococos.

ENDOCARDITIS CON CULTIVO NEGATIVO:
Debe considerarse en pacientes  con cultivos negativos y persistencia de la fiebre con uno o mas signos clínicos consistentes con EI (por ej : ACV o otra manifestación de embolia. También ptes con vegetación en el ecocardiograma y no diagnostico claro microbiológico

LABORATORIO /ESTUDIOS CARDIACOS
La utilidad de otros test de laboratorio en el diagnostico es limitada.
Aumento de VSG, anemia normocitica normocromica, la mayoría de los ptes presentan leucocitosis, y algunos tienen trombocitopenia
En algunos ptes: hiperglobulinemia, crioglobulinemia, complejos inmunes circulantes, hipocomplementemia, títulos elevados de factor reumatoideo.
Muchos tienen análisis de orina anormal, como manifestación de hematuria, proteinuria y/o piuria

ECOCARDIOGRAMA: debe realizarse en ptes con sospecha moderada a alta de EI.
Si tienen sospecha baja de EI, el rendimiento diagnostico de EI con ETT Y ETE  es bajo y nunca debe realizarse.
Permite detectar y caracterizar las vegetaciones de las válvulas u otros sitios, evaluar la disfunción valvular, la severidad hemodinámica y anormalidades asociadas como abscesos.
El ETT: es la primera prueba diagnostica para los ptes con sospecha de EI. Tiene baja sensibilidad ( 29 al 63%) aunque la especificidad es del 100%.

INDICACIONES DE ETE:
Alta sospecha de EI: persistencia de HC positivos y múltiples criterios menores para EI.
Bacteriemia debida a un organismo conocido como S. aureus o Stretococcus viridans.
Un estudio de ETT técnicamente malo.

INDICACIONES DE ETE (SIN ETT PREVIO)
_presencia de válvula protésica  (mitral o aortica)
_anormalidad valvular previa (incluye previa endocarditis)
_ventana transtoracica limitada: por obesidad, pared torácica deformada, o ventilación mecánica.

ECG: como parte del estudio inicial , la presencia de bloqueo de rama o retraso en la conducción puede dar una pista de extensión de la infección al anillo valvular o al septum adyacente. La presencia de hallazgos consistentes con isquemia o infarto sugieren la presencia de émbolos en la circulación coronaria.
Rx de tórax: puede demostrar la presencia de embolia pulmonar séptica.
RM: ptes con dolor de espalda deben evaluarse para osteomielitis vertebral y discitis con RM
TAC: ptes con dolor abdominal o del ángulo costo vertebral : para evaluar la presencia de infarto esplénico, infarto renal, absceso del psoas.

DIAGNOSTICOS DIFERENCIALES
Infección de piel y tejidos blandos.
Infección de dispositivo cardiaco
Infección de articulación protésica
Infección de catéter intravascular
Osteomielitis
Meningitis
Neumonía

COMPLICACIONES
Incluye complicaciones cardiacas, neurológicas, renales,  musculoesqueleticas, y las relacionadas con la infección sistémica.
La infección por S. aureus se asocio con mas complicaciones que otros patógenos.
Complicaciones cardiacas: son las mas comunes, ocurren en hasta ¼ de los pacientes.
Falla cardiaca:
 La implicación de la válvula aortica causa mas IC que válvula  mitral.
 El germen involucrado.
Es la causa mas común de cirugía cardiaca.
Se produce por insuficiencia valvular.
Absceso perivalvular:
La válvula aortica es mas susceptible al mismo.
Se asocia con  riesgo de embolizacion  y muerte.
Pericarditis.
Fistula intracardiaca.

INFECCION METASTASICA : incluye la embolizacion, el absceso metastasico, y el aneurisma micotico.
EMBOLIZACION SEPTICA: la sistémica ocurre mas frecuentemente en EI del lado izquierdo; y la pulmonar con EI del lado derecho.

Causa:
ACV, parálisis, ceguera, isquemia en las extremidades, infarto renal o esplénico, embolia de pulmón, infarto agudo de miocardio.
Factores de riesgo : vegetación del lado izquierdo, de gran tamaño, microbiología, presencia de Ac antifosfolipido, edad, DBT, FA.
ABSCESO MTS: como secuela de embolizacion (en cerebro, bazo , riñón, tejidos blandos)

ANEURISMA MICOTICO: en los puntos de bifurcación de los vasos.

COMPLICACIONES NEUROLOGICAS:
ACV, absceso cerebral o cerebritis, meningitis purulenta  o aséptica
Encefalopatía aguda
Meningoencefalitis
Hemorragia cerebral
Convulsiones

COMPLICACIONES RENALES: infarto renal o absceso seguido de embolizacion séptica, Glomerulonefritis,  nefritis intersticial inducida por drogas, falla renal aguda (creatinina > 2 mg/dl) en hasta 1/3 de los pacientes

COMPLICACIONES MUSCULOESQUELETICAS:
Osteomielitis vertebral, y artritis séptica.

COMPLICACIONES RELACIONADAS CON LA TERAPIA:
AMINOGLUCOSIDOS: nefro y ototoxicos.
FIEBRE POR DROGAS
ALERGIA
HEMORRAGIA POR ANTICOAGULANTES

TERAPIA ANTIMICROBIANA
Los agentes bactericidas son necesarios para el tratamiento efectivo de la endocarditis.
La determinación de la concentración inhibitoria mínima debe obtenerse de rutina.
Terapia empírica: debe dirigirse a los microorganismos aislados de los HC, los cultivos son positivos en mas del 90% de los ptes con EI.
Para ptes con sospecha de EI sin síntomas agudos, la terapia empírica puede esperar hasta los resultados de los HC
Para la enfermedad aguda en ptes con signos y síntomas fuertemente sugestivos de EI, la terapia empírica es necesaria , solo después de al menos dos (mejor 3) muestras de HC, y espaciadas con un tiempo de 30 a 60 minutos.
La terapia empírica debe cubrir Estafilococo (meticilino sensible y resistente) estreptococo, y enterococo.
La vancomicina (15-20 mg/kg/dosis cada 8 a 12 hs )es una elección apropiada para la terapia inicial en la mayoría de los pacientes.
Respuesta clínica: la mayoría de los ptes comienzan a estar afebriles del 3 al 5 dia del inicio atb.
 Ptes con Endocarditis por S. aureus responden mas lento, afebriles al dia 5 a 7. Ptes con EI derecha y embolia pulmonar séptica permanecen febriles por mucho tiempo.
A las 48-72 horas de inicio del tto se repiten los HC.

DURACIÓN DE LA TERAPIA: depende del patógeno y del sitio de la infección valvular. En general 6 semanas de tto es apropiado para patógenos virulentos o relativamente resistentes, con complicaciones cardiacas o extracardiacas, y en el contexto de infección prolongada antes del diagnostico.
ESTREPTOCO VIRIDANS Y ESTREPTOCOCO BOVIS: varias especies de estreptoco que conforman el grupo viridans y estreptococo bovis representan alrededor del 40 al 60% de la EI de valvula nativa en la practica comunitaria.
Los miembros del grupo viridans incluyen: S. mitis, S.mutans, S. oralis, s. sanguinis, S. sobrinus, y el grupo S. milleri (S. anginosus, S. constellatus, y S. intermedius)
La mayoría del S. grupo viridans son altamente sensible a la peniclina definida como una CIM <0 .12="" mcg="" ml.="" o:p="">0>
Cepas ocasionales pueden tener susceptibilidad intermedia CIM > 0.12 y < de 0.5 mcg/ml; y raramente cepas resistentes  con una CIM > 0.5 mcg/ml.
Para EI por S. grupo viridans y S. bovis tenemos 4 diferentes regímenes de tto
PARA CIM de < .12 mcg/ml, la AHA (American Heart Association), la BSAC, (British society for antimicrobial chemoteraphy), y la ESC (European society of cardiology) recomiendan:

PENICILINA G ACUOSA CRISTALINA 12 a 24 Millones de U/dia (en forma continua o en 4 a 6 dosis igualmente divididas) por 4 semanas, en ptes con Streptococo altamente sensible a penicilina.
O ceftriaxona 2 gr/dia por 4 semanas
Pacientes  seleccionados con EI de válvula nativa por cepas sensible a la Penicilina que no tienen evidencia de complicaciones intracardiacas o extracardiacas o lesiones oticas ni renales pueden tratarse con cursos cortos de terapia combinada:
AHA: gentamicina mas Peni G o ceftriaxona  por 2 semanas.
ESC: monoterapia con Peni G por dos semanas.
 Los ptes con alergia a la Penicilina  pueden tratarse con ceftriaxona , si la alergia consiste en rash sin otros signos de hipersensibilidad de tipo inmediato.
Ptes con historia de hipersensibilidad de tipo inmediato: vancomicina   por 4 semanas ; o desensibilización a la penicilina y tratados con un régimen standard
Se aconseja  la desensibilización a la Penicilina  en lugar de la sustitución por vancomicina.
TRATAMIENTO DE EI POR S. VIRIDANS  CON SUSCEPTIBILIDAD INTERMEDIA (MIC > 0.12 Y < 0.5).
 La AHA guidelines recomienda Peni G 24 Mill U/dia o ceftriaxona , por 4 semanas. Mas gentamicina las primeras dos semanas
La guía BSAC 2012 recomienda para EI por streptococo  con CIM de > 0.12 a < 0.5 , : bencilpenicilina por 4 a 6 semanas mas un AMG las dos primeras semanas de tto.

Con MIC > de 0.4 mcg/ml tanto la ESC y la BSAC recomiendan vancomicina

OTRAS ESPECIES DE ESTREPTOCOCOS: por ejemplo grupo A, B, C, G, a S. pneumoniae, son ocasionalmente causa de endocarditis. La mayoría son altamente sensibles a la Penicilina.


STREPTOCOCCUS ANGINOSUS (STREPTOCOCCUS MILLERI)
INTRODUCCIÓN 
El grupo  S anginosus (también conocido como el S grupo milleri ) es un subgrupo de estreptococos viridans que consta de tres especies de estreptococos distintas: S. anginosus, S. intermedius, y S. constellatus; A su vez S. constellatus tiene dos subespecies, S. constellatus y S. subsp constellatus pharyngis (1-6). Estos estreptococos viridans no hemolíticos  fueron descritos por primera vez por Guthof en 1956 después de haber sido aislado de abscesos dentales. Llamó a estos organismos "Streptococcus milleri" en honor del microbiólogo WD Miller (1,7).

Los organismos fueron posteriormente reconocidos como flora normal de la cavidad oral humana y el tracto gastrointestinal con la capacidad de causar abscesos e infecciones sistémicas (8-12). La característica especial y única, a diferencia de otros estreptococos patógenos, como S. pyogenes (estreptococos del grupo A) y S. agalactiae (estreptococo del grupo B), es su capacidad para causar abscesos (13). A diferencia de los miembros menos virulentos de los estreptococos viridans, los miembros del S grupo anginosus  deben ser considerados verdaderos patógenos cuando son aislados(14-16).

MICROBIOLOGÍA 
Los miembros de S grupo anginosus son cocos grampositivos catalasa-negativos (al igual que otros miembros del género Streptococcus). Son, anaerobios facultativos no móviles que muestran patrones de hemólisis variables (alfa, beta, o gamma) en agar sangre de carnero (17). Las colonias son típicamente pequeñas (tamaño de la colonia de menos de 0,5 mm) (18). Muchas cepas demuestran un mayor crecimiento en presencia de CO2, mientras que algunas cepas pueden requerir condiciones anaeróbicas.
Casi el 40 por ciento de S. constellatus y el 12 por ciento de S. anginosus son beta-hemolíticos, mientras que el 93 por ciento de las cepas de S. intermedius no son beta-hemolíticos [4].

Los miembros del S grupo anginosus  pueden ser diferenciados de otros estreptococos utilizando una combinación de tres pruebas rápidas [4,17]:

● prueba de Voges-Proskaur para la producción acetoína
● La hidrólisis con arginina.
● No fermentan sorbitol
Un olor a caramelo olor debido a diacetilo es útil para identificar el grupo S. anginosus cuando está presente, pero no es una prueba de detección suficientemente sensibles [19].

Normalmente hay poca necesidad clínica de distinguir entre los tres miembros de  S grupo anginosus (20). Si es necesario, S. anginosus se puede diferenciar por la falta de hialuronidasa. S. intermedius puede diferenciarse por la beta-galactosidasa (ONPG) y las reacciones de beta-N-acetil-glucosaminidasa. S. constellatus es más probable que sea beta-hemolíticos y para reaccionar con el grupo serológico de anticuerpos Lancefield F que las otras dos especies.

Kits de diagnóstico rápido y sistemas automatizados están disponibles para la identificación del grupo viridans a nivel de especie y grupo (21-23). Ensayos de amplificación de ácidos nucleicos se han desarrollado pero no están aún en uso rutinario (22,24)

PATOGÉNESIS
Los miembros de S  grupo anginosus son conocidos por su patogenicidad y la tendencia a la formación de abscesos. Los factores de virulencia precisos responsables de estos aspectos clínicos no se conocen bien. Además, hay diferencias en los factores de virulencia intrínsecas entre las especies que componen el grupo. Factores de adherencias a las superficies celulares son expresadas por todos los miembros del grupo y permiten la unión a fibronectina; algunas cepas también son capaces de unirse a los complejos plaquetas/fibrina [28,29]. Una cápsula de polisacárido asociado con la agrupación Lancefield parece ser un factor de virulencia como se ha demostrado para inhibir la fagocitosis de S. constellatus en un modelo murino de infección pulmonar [30].

S. anginosus a menudo se presenta como parte de una infección polimicrobiana en pacientes con infecciones orales, de cabeza y cuello e infecciones abdominales. Los compañeros de los agentes patógenos en tales infecciones pueden incluir otras bacterias como Eikenella corrodens y Fusobacterium nucleatum.

Los miembros de S grupo anginosus  producen exotoxinas pirogénicas. S. intermedius produce únicamente intermedilysina una toxina citolítica específica para las células humanas que parece ser un factor de virulencia para el hígado y otros abscesos profundos [34]. Los miembros de S  grupo anginosus también producen enzimas hidrolíticas tales como hialuronidasa que pueden desempeñar un papel en la propagación de organismos a través de los tejidos y ayudar en la licuefacción de pus [35].

Interacción entre el grupo de S. anginosus y granulocitos polimorfonucleares puede desempeñar un papel en la formación de abscesos [30,36]. Los miembros de S grupo anginosus son estimuladores pobres de la quimiotaxis. Además, estos organismos parecen capaces de sobrevivir a la fagocitosis.

ENFOQUE CLÍNICO
El S grupo anginosus reside como parte de la flora normal de la cavidad oral y el tracto gastrointestinal en adultos y niños. Estos organismos pueden invadir la circulación, incluso sin un sitio clínicamente evidente de trauma o infección [37,38]. Las infecciones pueden ser polimicrobianas, incluyendo anaerobios y miembros de la familia Enterobacteriaceae [37,39].

Las infecciones que producen van desde infecciones orales menores tales como faringitis o absceso dental a  infección invasiva potencialmente mortal con bacteriemia y  formación de abscesos metastásicos que pueden comprometer pulmones, cerebro, hígado, riñones o partes  blandas. La infección por miembros del grupo anginosus S. se asocia tan frecuentemente con abscesos [37,38] que si no logra visualizarse un  absceso, el aislamiento de este organismo debería generar una mayor evaluación radiográfica en la búsqueda de abscesos tanto en adultos como en niños.
INFECCIONES ORALES Y ENDODONCIA
Los miembros de S  grupo anginosus se han aislado de  caries dentales y la enfermedad periodontal [40,41]. La presencia de estos organismos en la cavidad oral predispone a infecciones endodónticas y maxilofaciales, así como abscesos periamigdalinos [42], que pueden conducir a infecciones con metástasis sépticas a distancia [43,44]. S. anginosus es la especie predominante de S  grupo anginosus asociado con abscesos dentales. S. subsp constellatus tiene predilección por la garganta humana dando faringitis [3].

En los niños, el S grupo anginosus  se han recuperado de cultivos de garganta con frecuencia cada vez mayor [45], y los estreptococos del grupo C beta-hemolítico con faringitis exudativa se ha descrito en los estudiantes universitarios [46,47]. Por otra parte, los aislamientos de S. grupo anginosus betahemolíticos se han identificado erróneamente como S. pyogenes en cultivos de garganta pediátricos [48]. De hecho, S. subespecia constellatus  faríngeo se ha propuesto para las cepas de S. grupo anginosus  que son genéticamente y fenotípicamente distintas y presentan una predilección por la garganta humana y se han aislado a partir de casos clínicos de faringitis [3]. Además, dos cepas adicionales de S grupo anginosus  también aisladas de pacientes con faringitis se han propuesto como nuevas subespecies: S. subespecies anginosus whileyi y S. constellatus subespecies viborgensis [49].

Infecciones orales y endodoncia menores pueden responder a la extracción de un diente infectado y / o drenaje de abscesos, junto con el tratamiento antimicrobiano oral. Infecciones orales y maxilofaciales  profundas requieren hospitalización para el tratamiento antimicrobiano intravenoso y desbridamiento quirúrgico. Estos temas se discuten en detalle por separado.

Siempre debe obtenerse hemocultivos; la bacteriemia con  miembros del S grupo anginosus induce una evaluación para infección metastásica incluyendo absceso cerebral en adultos y niños. [50-54].

INFECCIONES DE CABEZA Y CUELLO
Infecciones orales y endodoncia causadas por miembros del S grupo anginosus  puede extenderse a los espacios exteriores de la cabeza y el cuello a través de extensión local [55-58]. Las complicaciones incluyen la obstrucción de la vía aérea, la tromboflebitis séptica de la vena yugular, el absceso de la vía aérea superior con aspiración o asfixia, absceso pulmonar, mediastinitis, pericarditis y shock séptico [59]. Estas infecciones también pueden complicarse con infección metastásica incluyendo la participación del sistema nervioso central [54,60-64].

Los miembros del S grupo anginosus causan infecciones supurativas de cabeza y cuello [57]. Estas infecciones de cabeza y cuello incluyen abscesos periamigdalino [42], rinosinusitis con complicaciones intracraneales [65,66], celulitis orbitaria [67-69], tumor hinchado de Pott [70-72], absceso cerebral [27,54], y trombosis supurada de la vena yugular (síndrome de Lemierre) [73,74]. Estas entidades pueden implicar la coinfección con otros microorganismos, incluyendo anaerobios como Fusobacterium necrophorum [75,76]. Los abscesos cerebrales en los niños son relativamente raros, pero se asocian con una morbilidad y mortalidad significativas; los microorganismos más frecuentes son el grupo anginosus S. [27,54].

El tratamiento inicial de las infecciones de cabeza y cuello debe incluir la obtención de cultivos de sangre y el inicio de la terapia antimicrobiana intravenosa inmediata que incluya la cobertura para el S grupo anginosus así como anaerobios [64].  Deben  llevarse a cabo imágenes para evaluar la presencia de supuración que requiera drenaje quirúrgico.

INFECCIONES DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL
Los miembros del S grupo anginosus están bien reconocidos como causantes de abscesos  de sistema nervioso central  que pueden involucrar  cerebro, y los espacios epidurales y subdurales [27,54,63,77-82]. También se han descrito otras infecciones del SNC, tales como meningitis y  trombosis del seno cavernoso o trombosis del seno lateral [27,60-62,79,82,83]. La infección puede desarrollarse después de una bacteriemia por un foco oral, dentario, o gastrointestinal o de un absceso en otro sitio. Debe llevarse a cabo la evaluación de endocarditis como fuente potencial de émbolos sépticos.

Infecciones del SNC debido a los miembros del grupo anginosus S. son potencialmente mortales. Imágenes de tomografía computarizada o resonancia magnética (con contraste) se deben realizar para evaluar colecciones que puedan requieren drenaje. Una pronta intervención quirúrgica para drenaje del absceso y el inicio oportuno de la terapia antimicrobiana apropiada son esenciales [84,85].
Los abscesos cerebrales causados por los miembros del S grupo anginosus  pueden ser manejados con una cefalosporina de tercera generación como cefotaxima o ceftriaxona; metronidazol debe añadirse para el tratamiento de la infección por anaerobios concomitante [64,87].
La terapia con antibióticos por vía intravenosa se debe continuar durante cuatro a seis semanas [64,87]. Seguimiento con  tomografía computarizada en intervalos mensuales está indicada durante al menos tres meses para la evaluación de la respuesta terapéutica [84].

INFECCIONES ABDOMINALES
Los miembros del S grupo anginosus  son parte de la flora normal del tracto gastrointestinal en adultos y niños; Como tales, son capaces de causar una variedad de infecciones abdominales. Estos incluyen absceso hepático, colangitis, peritonitis, apendicitis, absceso subfrénico, absceso pélvico, infecciones de heridas e infecciones abdominales postoperatorias después de un traumatismo o cirugía visceral [88-94]. En los niños, la asociación de S grupo anginosus  con apendicitis aguda y sus complicaciones tras apendicectomía ha sido bien descrita [93,95-97]. El papel del S grupo anginosus en abscesos intraabdominales no es causal; más bien, la presencia de S. anginosus parece resultar en la formación de abscesos después de que la inflamación ya ha comenzado. La presencia de otros microorganismos tales como Escherichia coli y Bacteroides fragilis es común [96,97] y puede proporcionar un efecto sinérgico.

Hemocultivos positivos para los miembros del S grupo anginosus deberían llevar a la consideración de infección oculta abdominal, abscesos metastásicos, y endocarditis infecciosa [37,53].

En general, el tratamiento de las infecciones abdominales causados por los miembros del S grupo anginosus requiere drenaje del absceso y terapia antimicrobiana [98]. Imágenes con  tomografía computarizada se debe realizar para evaluar la presencia de colecciones que requieran drenaje.

La terapia antimicrobiana debe constar de una cefalosporina de tercera generación como cefotaxima o ceftriaxona; metronidazol debe añadirse para el tratamiento de la infección por anaerobios concomitante. Alternativamente, la monoterapia con un inhibidor de beta-lactámicos / beta-lactamasa o un carbapenem son también opciones razonables para el tratamiento antimicrobiano. La duración del tratamiento depende de la respuesta clínica; una a dos semanas es generalmente adecuado. Dos semanas de terapia deben administrarse en el contexto de la bacteriemia.

INFECCIONES TORÁCICAS
Los miembros del S grupo anginosus S son parte de la flora normal de la orofaringe; como tales, pueden ser aspiradas y pueden causar una variedad de infecciones torácicas [4-6,99-102]. Estos incluyen neumonía, absceso pulmonar, empiema y mediastinitis [102-104]. La mediastinitis pued ocurrir ya sea como una infección primaria o secundaria a la disección de una infección del cuello hacia el mediastino. Cada vez que hubiesen hemocultivos positivos deberían llevar a evaluación de abscesos metastásicos.

La colonización de las vías respiratorias superiores por S. grupo anginosus puede dar lugar a infecciones pulmonares en niños similares a los reportados en adultos. Estas infecciones a menudo son difíciles de tratar y pueden requerir procedimientos de intervención si el espacio pleural está comprometido. El S grupo anginosus  también se han aislado en los cultivos de esputo de pacientes con enfermedad pulmonar crónica tal como enfermedad pulmonar obstructiva crónica, bronquiectasias, y fibrosis quística [105]. Los pacientes con fibrosis quística se han demostrado para albergar S grupo anginosus [106-108].

Las infecciones torácicas tienen  morbilidad y  mortalidad [37,100-102] significativas. Los factores de riesgo son el sexo masculino, el alcoholismo, el cáncer y la fibrosis quística [100-102,112].

En general, el tratamiento de las infecciones torácicas causadas por los miembros del grupo S. anginosus requiere drenaje del absceso y  terapia antimicrobiana [37100101113]. Drenaje torácico percutáneo o drenaje quirúrgico del absceso pulmonar pueden ser requeridos [114]. La terapia antimicrobiana debe constar de una cefalosporina de tercera generación como cefotaxima o ceftriaxona. Alternativamente, la monoterapia con un   beta-lactámicos / inhibidor de beta-lactamasa o un carbapenem son también opciones razonables para el tratamiento antimicrobiano. La duración del tratamiento depende de la respuesta clínica; cuatro semanas de tratamiento antibiótico por vía intravenosa es generalmente adecuado.

ENDOCARDITIS
Los miembros del S grupo anginosus  son capaces de causar endocarditis, por lo general en el marco de una válvula cardiaca anormal [115,116]. Entre los aislamientos de estreptococos de pacientes con endocarditis, el grupo S. anginosus representa el 3 al 15 por ciento de los casos [4].
Cuándo se produce la endocarditis, es más común en pacientes con válvulas dañadas o prótesis cardiacas que en los pacientes con válvulas nativas normales.

Las complicaciones de la endocarditis pueden incluir absceso perianular, absceso de miocardio y / o infección metastásica [37,50,117]. En una revisión de 29 pacientes con EI causada por S del grupo anginosus, la cirugía cardiaca fue necesaria en el 62 por ciento de los casos; los predictores incluyen disfunción valvular aguda y absceso intracardíaco [115]. Además, se observaron complicaciones supurativas metastásicas distantes que requieren drenaje quirúrgico en el 25 por ciento de los casos [115].
Los pacientes con infecciones metastásicas en el hígado, órganos abdominales, o columna vertebral debido a S. anginosus pueden o no pueden tener endocarditis. En tales casos, la ecocardiografía puede estar justificada para determinar si la infección metastásica es secundaria a una fuente endovascular.





BACTERIEMIA
La bacteriemia causada por miembros del grupo anginosus S. es con frecuencia el resultado de un enfoque de identificación de la infección. Hemocultivos positivos deberían llevar a la evaluación de la infección metastásica como se describe en las secciones anteriores, incluyendo absceso intraabdominal, infecciones  profundas de cabeza y cuello, absceso cerebral, y / o endocarditis [13,37,50-53].

En ausencia de endocarditis o complicaciones supurativas metastásicas, la bacteriemia tiene buen pronóstico. La terapia antimicrobiana debe consistir en una cefalosporina de tercera generación, tales como cefotaxima o ceftriaxona durante al menos dos semanas.

OTRAS INFECCIONES
Otras infecciones causadas por grupo anginosus S. aislados incluir la sinusitis, infecciones de piel y tejidos blandos, osteomielitis, artritis séptica, y piomiositis [118-121]. El tratamiento consiste en una terapia antimicrobiana y drenaje si es necesario. La duración del tratamiento depende del sitio de la infección.

La terapia antimicrobiana - Tratamiento de las infecciones causadas por los miembros del grupo anginosus S. debe incluir terapia antimicrobiana y evaluación con respecto a la cirugía para el desbridamiento / drenaje.

El tratamiento de la infección por los miembros del grupo anginosus S. debe guiarse por los estudios de susceptibilidad en la literatura médica; muchos laboratorios clínicos no realizan rutinariamente pruebas de susceptibilidad antimicrobiana de estos organismos.

Los miembros del grupo anginosus S. son en gran medida susceptibles a los agentes beta-lactámicos. La concentración mínima inhibitoria (CIM) a la penicilina G son generalmente ≤0.125 mcg / ml [122123]. / Ml se han reportado algunas cepas con CIM de penicilina G entre 0,25 y 2 mcg; cepas raras tienen MIC penicilina ≥4 mcg / mL. La penicilina-intermedio o cepas resistentes han alterado las proteínas de unión a penicilina; estos son más propensos a ser S. anginosus o S. intermedius de S. constellatus. En caso de alergia o la resistencia o sensibilidad impide el uso de agentes beta-lactámicos, la vancomicina es un agente alternativo adecuado. La duración del tratamiento depende de la naturaleza de la infección como se discute en las siguientes secciones.

Análisis retrospectivo de la terapia para los abscesos cerebrales y bacteriemia por miembros del grupo anginosus S. sugiere que se prefiere una cefalosporina de tercera generación como ceftriaxona o cefotaxima.

La CIM  de fluoroquinolona entre los miembros del grupo S. anginosus son altos, pero en el rango susceptible (0,5 a 1,0 mcg / ml); resistencia tiende a desarrollar fácilmente y por lo tanto no fluoroquinolonas son agentes antimicrobianos primera línea apropiados [124125]. La resistencia a macrólidos parece estar surgiendo entre el grupo anginosus S. [122,126-128]. La mayoría de las cepas del grupo anginosus S. son resistentes a los aminoglucósidos [99115]. Las sulfonamidas no tienen actividad contra el grupo anginosus S. aislamientos.

Si se sospecha y / o confirmada por tinción de Gram y cultivo de resultados infección mixta, otros microorganismos tales como bacterias anaerobias deben ser tratados con un régimen antimicrobiano apropiado mediante la adición de metronidazol o clindamicina a uno de los agentes anteriores, el tratamiento, ya sea con un betalactámico / beta combinación de inhibidores de lactamasa, o tratar con un carbapenem.







Presentó                                                                              
Dra Verónica Covatti
Médica Residente
Servicio de Clínica Médica
Hospital Municipal “Dr Ángel Pintos” de Azul

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Topic 3178 Version 8.0




ATENEO HOSPITAL PINTOS 13/05/2015. ENFERMEDADES PULMONARES QUISTICAS DIFUSAS EN TOMOGRAFÍA AXIAL COMPUTADA DE ALTA RESOLUCIÓN (TACAR)

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Hospital Municipal "Dr Ángel Pintos" de Azul

Definición de Quiste:  Espacio que contiene aire de bordes bien definidos y pared fina (menor a 3 mm) de tamaño variable.

Fleischner Society: Glossary of
Terms for Thoracic Imaging
 Radiology 2008;246:697-722







Figura 1. Quiste pulmonar


CAUSAS DE QUISTES PULMONARES BILATERALES:
  • Histiocitosis X
  • Linfangioleiomiomatosis ( LAM)
  • Neumonía Intersticial Linfocitica (LIP)
  • Neumonía Intersticial Descamativa (DIP)
  • Neumonitis por hipersensibilidad subaguda o crónica (NHS)
  • Amilodosis
  • Bronquiolitis folicular
  • Enfermedad de cadenas livianas
  •  Síndrome de Birt Hogg Dubé.


ENFERMEDADES QUE SIMULAN ENFERMEDAD QUISTICA:
  • Enfisema
  • Bronquiectasias
  • Pulmón en Panal


HISTIOCITOSIS DE CELULAS DE LANGERGHANS
Enfermedad granulomatosa caracterizada por infiltración y proliferación de células dendríticas llamadas de Langerghans.
  • Edad 20- 40 años
  • Tabaquistas
  • Asintomáticos- disnea- dolor de pecho-fiebre-tos seca

TACAR: -estadios tempranos: Nódulos ( granulomas células dendríticas)- Nódulos cavitados- estadios finales: Quistes característicos. (Figuras 2,3,4,5)



Figura 2: imágenes de nódulos en estadio temprano de la enfermedad correspondientes a granulomas de células de Langerhans. (izquierda) 
Figura 3: estadio quístico (derecha).




Figura 4: en A hasta D se observan nódulos y quistes de paredes finas en una TACAR. Nótese los quistes de paredes finas y nódulos predominantemente en lóbulos superiores. En D es notable el respeto por los ángulos costofrénicos, dato de importancia para diferenciar de la linfangioleiomiomatosis.



Figura 5: Más imágenes quísticas en pacientes con histiocitosis X.

CÓMO Y POR QUÉ SE FORMARÍAN LOS QUISTES?
Dilatación focal bronquial causada por destrucción de las paredes de la pequeña vía aérea por las células  de Langerghans
Quistes de diferentes tamaños, distribuidos a predominio de LLSS en estadios tempranos.

COMPLICACIONES:
  • Neumotórax 15%- 
  • Fibrosis
  • HTP

Diagnóstico: TACAR, BTB, BAL con CD1+ mayor al 5%- Biopsia a cielo abierto

LINFANGIOLEIOMIOMATOSIS (LAM)
Enfermedad rara de etiología desconocida, caracterizada por proliferación del musculo liso, de aspecto benigno y con predominio peribroncovascular, que conduce a la obstrucción de linfáticos, vasos sanguíneos y bronquiolos, llevando a la formación de quistes.

Epidemiología
Incidencia: 5-10 por millón de población general (esporádico)

Mujeres en edad fértil, 30- 35 años. Casos raros en post – menopáusicas

TACAR: quistes de paredes finas rodeadas por parénquima pulmonar normal, con distribución uniforme en todo el pulmón Figura 6



Figura 6: Mujer de 35 años con LAM. Se observan múltiples quistes de paredes finas, de diferentes tamaños y que no tienen predominioo especial por sectores pulmonares afectando tanto lóbulos superiores (A) como lóbulos medios e inferiores (B ).

COMPLICACIONES:
  • Neumotórax recidivante(69%) (Figura 7) 
  • Quilotorax (23%)
  • Hemoptisis (20%). 
  • Angiolipoma renal presente en el 50% de los casos (Figura 8)



Figura 7: TACAR neumotórax en LAM.



Figura 8: angiomiolipoma renal en LAM




Figura 9: imágenes de LAM

NEUMONIA INTERSTICIAL LINFOCITICA ( LIP)
Conforma el grupo de las Neumonías Intersticiales Idiopáticas
Se caracteriza por proliferación inflamatoria linfoide policlonal originada de la hiperplasia BALT ( tejido linfoide asociado al bronquio), en la cual se acumulan linfocitos en el intersticio peribroncovascular en respuesta a diferentes estímulos.

Se asocia a :
  • Síndrome de Sjogren
  • HIV
  • hipogamaglobulinemias
  • Anemias hemolíticas
  • Enfermedad Celíaca
  • ETC ( LES, AR, SS)
  • Tiroiditis de Hashimoto 
  • Miastenia Gravis
  • Anemia perniciosa
  • Drogas.
Predominio en mujeres
Edad promedio, quinta década de la vida
Síntomas: inespecíficos. Tos, disnea, fiebre, artralgias, perdida de peso
BAL: linfocitos aumentados

TACAR:  Área en vidrio esmerilado con nódulos centrolobulillares , engrosamiento peribroncovascular, adenomegalias, y quistes de paredes finas.
La combinación :Nódulos, quistes y vidrio esmerilado es muy sugestiva de NIL (Figura 10)


Figura 10: NIL.  A la izquierda  asterisco: vidrio esmerilado, flechas: quistes) A la derecha: nódulos

Dx: Se debe realizar Biopsia a cielo abierto para descartar Linfoma
TTO: Prednisona 0,75 a 1 mg /kg/día durante 8 a 12 semanas o hasta estabilización, luego descenso progresivo con 025 mg/kg/día durante 6 a 12 semanas.  Una minoría progresa a Fibrosis.

NEUMONIA INTERSTICIAL DESCAMATIVA ( DIP)
Corresponde al grupo de las Neumonías Intersticiales Idiopáticas
Tabaquistas
Prevalencia en sexo masculino
Edad promedio 40-50 años
TACAR: VIDRIO ESMERILADO A PREDOMINIO PERIFERICO Y EN LLII. OPACIDADES LINEALES- RETICULARES Y QUISTES PEQUEÑOS (Figura 11)



Figura 11: NID

Bal: Macrófagos alveolares pigmentados
AP: acumulación de macrófagos cargados de pigmento diseminados asociado a septos alveolares engrosados por infiltrado inflamatorio con aumento de neumonocitos tipo II. Se puede observar panalización

TRATAMIENTO
Cesación Tabáquica
Esteroides si no la patología progresa o persiste mas allá de haber abandonado el hábito tabáquico
Muy buen Pronóstico salvo en los pacientes con fibrosis avanzada

NEUMONITIS POR HIPERSENSIBILIDAD SUBAGUDA- CRONICA.(ALVEOLITIS ALÉRGICA EXTRÍNSECA)
Enfermedad pulmonar intersticial difusa (EPID) de tipo inmunológico, provocadas por la inhalación de determinadas sustancias, en su mayoría orgánicas
Las más frecuentes son el pulmón del cuidador de aves y el pulmón del granjero. Otros : espartosis, pulmón del nácar, alveolitis por acondicionador de aire, pulmón del humidificador ultrasónico, pulmón de los limpiadores de embutidos, suberosis, pulmón de isocianato, pulmón de la soja y pulmón de la cándida.

La forma subaguda ocurre tras inhalaciones continuadas, pero no masivas del agente causal.

Cuadro clínico : síntomas respiratorios + astenia, pérdida de peso, mal estado general y febrícula.
TACAR :  opacidades en vidrio esmerilado parcheadas o difusas,  con nódulos mal definidos, centrilobulares con atrapamiento aéreo. (Figura 12)



Figura 12: Neumonitis por hipersensibilidad aguda

 La forma crónica : cuadro clínico  similar al de la fibrosis pulmonar idiopática (FPI) o bien consiste en tos y expectoración (clínica similar a la de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica).
TACAR: similar a la forma subaguda asociado a infiltrados reticulares y/o panalización (Figura 13)



Figura 13:Neumonía por hipersensibilidad crónica.


TRATAMIENTO.

  • Evitar el contacto con el antígeno.
  • Cuando persisten las manifestaciones clínicas y las alteraciones radiológicas o funcionales respiratorias, se suelen administrar glucocorticoides , aunque no existe evidencia de que su administración modifique el pronóstico a largo plazo de la enfermedad

SÍNDROME DE BIRT HOGG DUBÉ
Desorden autosomico dominante, raro,  caracterizado por la mutacíon de foliculina que conlleva al desarrollo anormal del mesodermo. La foliculina es una proteina supresora tumoral expresada en las celulas estromales y en neumonocitos tipo I en pulmón , en riñón  y en piel.
Asintomaticos
Sintomas en 3er- 4ta década
El 80% presenta quistes pulmonares visibles en TACAR a predominio de bases y perifericos (Figura 14)


Figura 14: síndrome de birt hogg dubé

AMILOIDOSIS
Depósito extracelular de Amiloide (Proteína fibrilar insoluble) en diferentes tejidos y órganos. Puede ser sistémica o localizada.
Primaria: Depósito de proteínas secretadas por linfocitos y células plasmáticas.
Secundaria: Asociada a enfermedad inflamatorio crónica (artritis reumatoidea, Crhön, fibrosis quística)

TACAR: (Fugura 15)

  • Quistes pulmonares paredes finas
  • Predominio periférico
  • Ausencia de gradiente ápico-basal
  • Nódulos pulmonares múltiples con o sin calcificación
  • Engrosamiento traqueal circunferencial
  • Engrosamiento septales
  • Panalización
  • Opacidad vidrio esmerilado
  • Linfadenopatías

Figura 15: amiloidosis pulmonar


ENFERMEDAD DE CADENAS LIVIANAS
La enfermedad por cadenas livianas se caracteriza por ser una enfermedad sistémica con depósito de cadenas livianas de inmunoglobulinas monoclonales en varios órganos producidos por un clon anormal de células B. Los órganos frecuentemente comprometidos son corazón, hígado ,cerebro ,sistema nervioso periférico ,pulmón, riñón y músculo entre otros.
El 65% se asocia a mieloma y macroglobulinema. Las cadenas livianas se depositan en las paredes alveolares, pequeña vía aérea y venas.

TACAR:  (Figura 16)

  • Nódulos
  • Linfadenopatias
  • Quistes

Figura 16: enfermedad de cadenas livianas

BRONQUIOLITIS FOLICULAR
Desorden poco frecuente de la vía aérea pequeña caracterizado por un infiltrado inflamatorio celular denso a nivel de la pared bronquial asociado a estrechamiento de la luz de la vía aérea. Conforma el grupo de Procesos Lifoproliferativos como la Hiperplasia linfoide y LIP.
Secundaria a Inmunodeficiencias, enfermedades del colageno y reacciones de hipersensibilidad.
Lo mas frecuente en TACAR: nódulos centrolobulillares o nódulos peribronquiales. Quistes raros. (Figura 17,18ABC)



Figura 17: bronquiolitis folicular TACAR





Figura 18 A a C: TACAR que muestra quistes de paredes finas de 3 a 12 mm. Nótese la gran cantidad de parénquima pulmonar normal a diferecnia de la neumonía intersticial linfocitaria donde  se ve compromiso intersticial más amplio.


PULMON EN PANAL
Múltiples quistes en empalizada o  clusters en región subpleural predominantentemente en LLII.  Los quistes pueden variar de tamaño, forma y de grosor de la pared pero típicamente son menores a 1 cm de diámetro. Opacidades reticulares, distorsión de la arquitectura y bronquiectasias por tracción.
( no entra dentro de la clasificación de enf, quística del parénquima pulmonar por presentar distribución subpleural de los quistes y no intraparenquimatoso) (Figura 19)



Figura 19: imágenes de panalización



Presentó
Dra. Mercedes Irigoyen
Médica Neumonológa


Hospital Municipal Dr. Angel Pintos

ANGINA DE LUDWIG EN UN VARÓN DE 42 AÑOS

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Hospital Municipal Dr "Ángel Pintos" de Azul

Este paciente de 42 años comenzó su enfermedad 48 horas antes de su internación  con fiebre escalofríos, malestar general dolor en la boca disfagia, sialorrea y estridor respiratorio. Presentaba voz gangosa y dificultad para hablar.



Tumefacción y abombamiento del piso de la boca.








En el examen físico el paciente impresionaba al ingreso en mal estado general, frecuencia cardiaca 110 por minuto, febril (39,5°C), presentaba induración leñosa del piso de la boca, abombamiento del mismo (imagen), y un área edematosa ligeramente eritematosa de no más de 10 cm de diámetro en la región supraesternal.  El abombamiento descrito era evidente además de visible en el examen externo de la región submaxilar como en la palpación intraoral de la región sublingual en elpiso de la boca. Estas maniobras de palpación de dicha zona despertaban dolor no de gran intensidad.  No se palpaban adenomegalias. En la boca había numerosos focos sépticos dentarios aunque difícil de explorar por trismus. Las fauces parecían libres.


El paciente fue tratado con Ampicilina/sulbactam 3 gr/8 hs, clindamicina 600 mg/6 hs y dexametasona 8mg/12 hs con mejoría espectacular del dolor, de la induración del piso de la boca, trismus y del estado tóxico. Esta mañana estaba afebril, frecuencia cardiaca 80 por minuto y muy buen estado general.
Se solicitó una TAC de región facial, cuello, y tórax.





Se informó la TAC como refuerzo en espacio sublingual  especialmente derecho con refuerzo periférico de contraste compatible con absceso/flemón de piso de la boca.  Los espacios masticatorios pre y post estiloideos, prefaríngeos y retrofaríngeos no muestran imágenes agregadas.
Imágenes ganglionares de aspecto reactivo  y en rango no adenomegálico en localización yúgulo-carotídeo bilaterales.
Evaluado por servicio de odontología quien atribuyó el cuadro a focos dentarios mandibulares derechos con infección y programaron extracción una vez mejorado el cuadro.
Se hizo diagnóstico de angina de Ludwig. El paciente presentó una mejoría inicial después de lo cual reapareció fiebre en agujas, dificultad deglutoria, disfonía y sialorrea. El cuello y el piso de la boca volvieron a su estado inicial con tumefacción tensa a expensas predominantemente del lado derecho.

Se realizó extracción de dos piezas dentaria de maxilar inferior en mal estado y con absceso profundo en el contexto de la cobertura antibiótica con lo cual el paciente volvió a mejorar ostensiblemente y se fue de alta curado al cabo de siete días de internación.





VARÓN DE 35 AÑOS CON DOLOR EN EL CUELLO, RONQUERA Y DISFAGIA.

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PRESENTACIÓN DEL CASO
Un hombre de 35 años de edad, fue visto en el servicio de urgencias debido a dolor  unilateral derecho en el cuello, ronquera y disfagia.
El paciente había estado bien hasta 7 días antes, cuando, mientras estaba realizando un trabajo manual al aire libre, desarrolló dolor repentinamente en su mandíbula y dientes del lado derecho, irradiado al oído. Minutos más tarde, presentó visión borrosa bilateral e inestabilidad, con resolución en 10 a 15 minutos. El dolor en la mandíbula se resolvió espontáneamente en 3 horas. Varias horas después, presentó dolor en la región posterior del cuello y cabeza con una intensidad de 8 en 10, sin náuseas, vómitos o fotofobia. Tomó medicamentos antiinflamatorios no esteroideos; el dolor de cabeza mejoró  gradualmente, pero el dolor de cuello persistió. Dos días más tarde, vio a su médico. En el examen, la presión arterial sistólica fue de 150 a 159 mm Hg. La tomografía computarizada (TC) de la cabeza se informó como normal. Se lo medicó con u na combinación de acetaminofeno y oxicodona  para el dolor, y atenolol (25 mg diarios) para la hipertensión. Durante los siguientes  2 días, su voz se volvió ronca y presentó  sensación de hinchazón y debilidad de la lengua (con  dificultad para mover la lengua hacia la derecha), junto a disfagia para alimentos sólidos. Vio a su dentista, que no identificó una causa dental para el dolor, por lo que  regresó a su médico. El paracetamol con oxicodona se suspendió, y se lo medicó con metilprednisolona (5 días a dosis baja) y amoxicilina. Un día antes de la evaluación actual, el paciente fue a la sala de urgencias de otro hospital donde se realizó tomografía computarizada de cuello  después de la administración de contraste la cual fue informada como normal. Se le prescribió diazepam. En el día de la presentación, su médico lo derivó a un servicio de urgencias
El dolor de cabeza se había resuelto, pero el dolor de cuello y la ronquera se mantuvieron sin cambios. El paciente no presentaba cambios visuales, vértigo, alteraciones de la sensibilidad, debilidad (aparte de la lengua), o síntomas generales. No refirió ningún trauma en el cuello. Era diestro. Tenía hipertensión border line y había tenido 35 fracturas en el pasado atribuidas  a osteogénesis imperfecta para lo cual tomó siempre paracetamol oxicodona para manejo del dolor. Tenía reacciones alérgicas a la codeína (prurito) y presentaba mialgias por estatinas. Trabajó en la construcción, donde levantaba objetos pesados frecuentemente. Estaba casado y vivía con su esposa y su hijo, que estaban sanos. Bebía alcohol con moderación y no fumaba ni usaba drogas ilícitas. Su padre tenía hipertensión e hiperlipidemia y había tenido numerosas fracturas, su madre estaba sana, y su abuela y su tía abuela también habían tenido fracturas.
En el examen, la presión arterial era de 161/101 mm Hg, el pulso de 71 latidos por minuto, la temperatura de 36,3 ° C, la frecuencia respiratoria de 16 respiraciones por minuto, y la saturación de oxígeno al 100% mientras el paciente respiraba aire ambiente. El lado derecho de la cara estaba seco en comparación con el lado izquierdo. El párpado inferior derecho estaba ligeramente elevado en comparación con el párpado inferior izquierdo; la pupila derecha fue de 2,5 mm de diámetro, la pupila izquierda 3 mm de diámetro (se contraían 2 mm a la luz), ambas pupilas eran redondas, y los discos ópticos tenían bordes netos. La voz era ligeramente ronca. El paladar ligeramente elevado más en el lado izquierdo que en el lado derecho; la úvula se desviaba un poco hacia la izquierda. El reflejo nauseoso estaba disminuido  ligeramente en el lado derecho. La lengua se desviaba  a la derecha de la línea media cuando se protruía  y la  debilidad era evidente cuando el paciente trataba de desviar la lengua hacia la derecha. El lado derecho de la lengua parecía hinchado, con surcos disminuido. El lado derecho del cuello era sensible a la palpación. No había soplo carotídeo. El resto del examen físico neurológico y general era normal. Un hemograma completo y los resultados de las pruebas de funciones renales y hepáticas eran normales al igual que los niveles plasmáticos de electrólitos, glucosa, calcio, magnesio y fósforo. Un electrocardiograma mostró un ritmo sinusal normal y un ritmo de 66 latidos por minuto, con un bloqueo incompleto derecho de rama.


Se llevó a cabo un procedimiento diagnóstico.

La resolución estará disponible el domingo 14 de junio de 2015

ATENEO HOSPITAL PINTOS 17/06/2015.VARÓN DE 70 AÑOS CON DISECCIÓN CAROTÍDEA DERECHA POST TRAUMÁTICA

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Paciente masculino de 70 años

Hospital "Dr Ángel Pintos" de Azul
MOTIVO DE  CONSULTA:
alteraciones de la visión y estabilidad en posición de pié.

ENFERMEDAD ACTUAL:
Comenzó hace mas de 1 mes luego de un violento accidente de transito donde el automóvil que conducía y que estaba detenido en una esquina a la espera de cambio de luces  en un semáforo, fue violentamente impactado por detrás, por una camioneta. De resultas del mismo sufrió pérdida de conocimiento de breve duración sin recordar nada de lo ocurrido.
Fue estudiado en forma inmediata con imágenes incluyendo cerebrales y columna cervical sin hallarse lesiones. Evaluado clínica y neurológicamente sin alteraciones en ese momento se le permitió que se retirara a su domicilio. 
A partir de entonces nota en forma creciente inestabilidad en la posición de pié,  asociado a alteración en la visión en el campo inferior y externo del ojo derecho, (el izq. padece severo defecto crónico), lo que desaparece al adoptar el decúbito dorsal.

ANTECEDENTES:
 Hipertrofia protática benigna tratada con Tamsulosina 0,4 mg/d.
 Hipertensión arterial tratada con Enalapril 10 mg /d.
Gota

EXAMEN FÍSICO
Peso 98 kg altura 1.80 m. pulso regular, igual, 76 /m. TA en decúbito supino: 150/90 mm Hg, sentado 120/80 mm Hg de pié: 110/70 mm Hg.
Se palpan ambos pulsos carotideos.
Se ausculta soplo sistólico 3/6 irradiado a cuello.
No se objetivan alteraciones motores ni sensitivas, pares craneanos sin alteraciones. No hay dismetrías, ni nistagmus. Romberg negativo.

LABORATORIO
GR: 5.140.000 Hb 16.2 g. Leucocitos: 6400 Ncy 2. Nseg 61 E0 7 L 27 M 3. Eritrosedimenaión 4 mm Plaquetas 201.00. Uremia 35 mg Glucemia 112 mg Ac. Urico 8.7 mg.TGO 32 TGP 34. FAL 213 Colesterol 164. Proteinas totales 7 grs. PSA 4,17 ng.  Orina completa: Ph 6 densidad 1020 sedimento normal.
 Coagulograma:  T. de sangría 4 min. T. coagulación 8 min. T. de protrombina 12 seg. Concentración 100%. R.I.N. 1,00. KPTT: 36 seg. Ionograma plasmático:
Na 134  K 3.86 Cl 107
Repetición de Glucemia  102 mg. Hb glicosilada 5,4%

RMN DE CEREBRO : SIN ALTERACIONES SIGNIFICATIVAS
RMN DE COLUMNA CERVICAL Y LUMBAR  SIN ALTERACIONES SIGNIFICATIVAS.


DIAGNOSTICO ?
PLAN DE ESTUDIOS?
Se sospecha trastorno hemodinámico con hipoflujo vascular cerebral, asociado al traumtismo.
Hipotensión ortostática.
Se solicita campimetría, y eco doppler  de vasos cervicales.

Eco doppler vasos cervicales compatible con disección de carótida interna.

Campimetría:  visión en tubo en ojo derecho. Ojo izquierdo ambliope previo.

Ecocardiograma: Hipertrofia concéntrica de VI
Dilatación leve de Aurícula izq. Calcificación valvular aórtica. Disfunción diastólica del V.I con patrón rígido. Estenosis valvular aórtica leve.  Gradiente  máximo 30.1 mm Hg
Angiografía vasos cerebrales: estenosis carotidea derecha(disección)









Señalado por la flecha se observa un trayecto estenótico de la carótida interna a pocos centímetros de su nacimiento en el glomus originado por disección carotídea subintimal. 









Informe Neurológico: se considera que el cuadro clínico descrito es debido a la disección de carótida interna. Solicita RMI con difusión
RMI con difusión: normal.
Coagulograma normal.
Hb glic: 5.1 glucemia 102 mg%.  

NUEVA CONSULTA:  Embotamiento cefálico. Gota , flogosis en art. Metacarpofalangica, medicado con colchicina.
TA decúbito: 170/80 sentado 170/190 , y de pié 170/105 mm hg.  Trat. enalapril 10 1/d.
Pendiente angioplastia con colocación de stent

CONCLUSIONES DEL CASO
Paciente de 70 años que presentó un violento accidente automovilístico en el cual fue embestido por la parte trasera de su vehículo detenido en un semáforo por un vehículo de gran porte y a gran velocidad. Si bien inicialmente el paciente no presentó secuelas aparentes del episodio, a los pocos días comenzó a notar alteraciones de la estabilidad y de la visión en ojo derecho (el izquierdo presentaba un defecto crónico visual) pero solamente en el ortostatismo. Examinado en el consultorio el paciente demostró tener hipotensión ortostática la cual reproducía los síntomas referidos por el paciente. Estudiado en forma dirigida sus vasos del cuello se demostró una disección carotídea interna derecha apenas por encima de su nacimiento en la carótida común en el glomus carotídeo. Esta disección producía un pasaje filiforme del contraste.
La interpretación del cuadro fue que probablemente el paciente presentara hipotensión ortostática previa a la disección (tamsulosina + enalapril?), pero la misma no era sintomática. Cuando se agrega la estrechez ocasionada por la disección ahí se hacen presentes los síntomas clínicos en la circulación retiniana ipsilateral a la disección, así como algunas alteraciones del equilibrio seguramente ocasionados por hipoperfusión cerebral.  Al suspenderse la medicación hipotensora el paciente mejora su sintomatología desapareciendo las alteraciones visuales y del equilibrio.
Se decidió no anticoagular al paciente, y en su lugar administrar antiagregantes plaquetarios y colocar un stent en la carótida interna derecha.


DISECCIONES DE LA ARTERIA CARÓTIDA
El diagnóstico de disección carotídea se realiza hoy día cada vez con mayor frecuencia y esto es en parte debido a la utilización de técnicas de imágenes cada vez más sensibles y de disponibilidad creciente ( ultrasonografía, angiorresonancia magnética, angiografía convencional, TC  helicoidal etc).
Los signos de disección carotídea suelen ser dolor sobre un lado (cabeza, cara o cuello) acompañado de un síndrome de Horner parcial y seguido horas o días después por isquemia cerebral o retiniana. Esta triada se da en menos de un tercio de los pacientes aunque la presencia de sólo dos elementos de esta triada es muy sugestivo de disección.

La evolución de esta entidad suele ser buena aunque la mortalidad ronda el 5%. Las estenosis se resuelven en el 90%.
Como puede verse la disección espontánea de arterias carótidas es una entidad cada día más frecuente y en la que hay que pensar ante cualquier déficit neurológico, sobre todo en pacientes jóvenes y de mediana edad, ya que puede confundirse fácilmente con un AIT o un ictus isquémico con los que habría que hacer el diagnóstico diferencial.
Las disecciones arteriales se pueden dividir en dos grupos, dependiendo de la ubicación en la pared arterial. El primer grupo es principalmente subintimal, y en la cual las disecciones comprometen la luz arterial y promueven la formación de un trombo en la luz arterial. El segundo grupo es subadventicial, y las disecciones pueden causar o bien compresión de las estructuras vecinas a la arteria o bien sangrado en los tejidos adyacentes. En este último grupo, el principal plano de disección se encuentra entre la media  y la adventicia, provocando evaginación  aneurismática de la pared arterial. La ruptura de la adventicia conduce a un pseudoaneurisma de sangre amurallada dentro de la vaina carotídea y el músculo adyacente. Las disecciones de la arteria carótida cervical subadventiciales pueden afectar o comprimir  las fibras simpáticas localizadas a lo largo de la arteria dilatada, causando síndrome de Horner, y podrían comprimir o causar isquemia a los nervios craneales inferiores (noveno a duodécimo) que emergen cerca de la base del cráneo si es que la disección se produjera en esa localización.
Las disecciones subintimales causan síntomas principalmente por compromiso luminal y la presencia de un trombo en la luz del vaso. Los síntomas de isquemia cerebral son causados ya sea por embolias o  sea por reducción de la perfusión  en el territorio del cerebro que es irrigado por la arteria. Los síntomas neurológicos relacionados con hipoperfusión son generalmente ataques isquémicos transitorios únicos o múltiples durante un período de varias horas a unos pocos días. La inestabilidad transitoria y disminución de la visión en este paciente  más probablemente sea manifestación de hipoperfusión, compensada  por el rápido desarrollo de flujo sanguíneo colateral. Las embolias del trombo luminal cuadros de stroke súbitos. La hipoperfusión disminuye el “lavado” (washout) de émbolos y contribuye al desarrollo de infarto cerebral.
Este paciente tuvo sintomatología de disección subintimal ya que tanto las alteraciones de la visión en ojo derecho como la inestabilidad asociada a hipotensión ortostática impresionan ser secundarios a hipoflujo cerebral y teritorio de la arteria central de la retina terminal d la carótida interna. La ausencia de síndrome de Horner en este paciente así como la ausencia de pseudoaneurisma en las imágenes de RMN y TC de cuello hacen poco probable que haya tenido disección subadventicial ya que la misma casi siempre se acompaña de compromiso de la vía simpática, que transcurre en la vaina de la carótida interna.
Los primeros tratamientos sugeridos para la disección carotídea incluyen enfoques quirúrgicos o intervencionistas. Ligadura arterial, oclusión con balón,  bypass,  resección del aneurisma, o una variedad de enfoques endovasculares (por ejemplo, stent, coils, stent + coils, o un stent cubierto con politetrafluoroetileno). Los abordajes quirúrgicos directos han sido esencialmente abandonados. Una revisión sistemática de 31 estudios publicados de pacientes que se sometieron a colocación de stent por disección carotídea reportó una alta tasa de éxito técnico, pero una tasa de complicaciones del 1,3%; eventos neurológicos desarrollados en el 1,4% de los pacientes, y reestenosis intra-stent o de oclusión en un 2% dentro de los 18 meses.
A falta de datos de ensayos aleatorios, la decisión de tratar la disección de la arteria carótida extracraneal se basa en consideraciones tales como el riesgo de tromboembolismo temprano. Una estrategia utilizada consiste en una terapia de anticoagulación precoz, seguido por  agentes antiplaquetarios (por 3 meses o más). Los pacientes con una indicación de tratamiento de la isquemia cerebral pueden ser considerados para terapia trombolítica.
Aunque los agentes anticoagulantes y antiplaquetarios parecen ser igualmente eficaces en la prevención de la recurrencia después de la mayoría de los accidentes cerebrovasculares arteriales, no está claro si este es el caso después de las disecciones de la arteria carótida. Un estudio aleatorizado, prospectivo comparando la eficacia de los agentes anticoagulantes y antiplaquetarios en 116 pacientes con disección de la arteria carótida o vertebral arteria extracraneal mostró una tasa de eventos inferior pero no significativas entre los que tomaban anticoagulantes sobre los que tomaron aspirina.
El diagnóstico de disección arterial rara vez se hace por un médico no neurólogo, y por lo tanto el diagnóstico a menudo se retrasa. El tratamiento es objeto de acalorados debates. Aunque se ha argumentado que se deben utilizar los agentes antiplaquetarios, la patogénesis del infarto cerebral en pacientes con disección arterial cervical es la embolia arterio arterial a partir de trombos rojos de fibrina  que se forman en el sitio de la disección arterial. Si se considera que el diagnóstico se hace en etapa  temprana, la mayoría de los neurólogos prescribirían agentes antitrombóticos. La duración de la administración y de los criterios para la rotación a  agentes antiplaquetarios todavía se discute. También se debate  el tratamiento de los pacientes con disección arterial que no tienen síntomas o signos de isquemia cerebral. Por último, se debe proporcionar consejos sobre actividad después de una disección cervical. Hay pacientes que quedan discapacitados psicológicamente porque se les aconsejó que “eviten mover el cuello”. La incidencia de recurrencia es muy baja, por lo que aconseja a sus pacientes tranquilidad y que no tienen que ser excesivamente cuidadosos acerca de la realización de actividades físicas. Algunos médicos opinan que no debe prescribirse anticoagulantes  a pacientes con disecciones intradurales, debido al riesgo de sangrado.



 





Presentó
Rodolfo H Álvarez Prat.
Ex Jefe de Departamento de Clínica Médica
Hospital Municipal de Azul “Dr Ángel Pintos”


EOSINOFILIAS PULMONARES

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 Las eosinofilias pulmonares son un grupo heterogéneo de trastornos que comparten los hallazgos de un anormalmente alto nivel de eosinófilos dentro de la vía aérea y del parénquima pulmonar.  Las características   que definen las eosinofilias pulmonares incluyen:
·         Eosinofilias en sangre periférica con alteración en las imágenes pulmonares.
·         Eosinofilias tisulares pulmonares demostradas en biopsias transbronquiales o biopsias de pulmón a cielo abierto.
·         Aumento de los eosinófilos en el lavado broncoalveolar (BAL).
Las causas de eosinofilias pulmonares se pueen resumir en :

DROGAS Y TOXINAS.
  • AINES
  • ANTIMICROBIANOS (nitrofurantoína, minociclina, sulfas, ampicilina, daptomicina).
  • FENITOÍNA
  • L TRIPTÓFANO


INFECCIONES POR HELMINTOS
  • PASAJE TRANSPULMONAR DE LARVAS (Síndome de Loeffler) (ascaris lumbricoides, ancylostoma duodenale, necator americanus, Strongyloides stercoralis
  • INVASIÓN PARENQUIMATOSA PULMONAR (principalmente helmintos como paragonimiasis)
  • SIEMBRA HEMATÓGENA MASIVA DE HELMINTOS (triquinosis, estrongiloidiasis diseminada, larva migrans cutánea o visceral, esquistosomiasis).
  • EOSINOFILIA PULMONAR TROPICAL (Wuchereria bancrofti, Brugia malayi)
  • ASPERGILOSIS BRONCOPULMONAR ALÉRGICA


NEUMONÍA EOSINOFÍLICA AGUDA.

NEUMONÍA EOSINOFÍLICA CRÓNICA

GRANULOMATOSIS EOSINOFÍLICA CON POLIANGEÍTIS (CHURG-STRAUSS)

OTROS
  • SÍNDROME HIPEREOSINOFÍLICO PRIMARIO
  • ENFERMEDAD PULMONAR IDIOPÁTICA
  • NEOPLASIAS
  • INFECCIONES NO HELMÍNTICAS (coccidioidomicosis, Mycobacterium tuberculosis)A su vez estos cuadros mencionados arriba son clasificados de acuerdo a la severidad de la eosinofilia que son capaces de causar en dos grupos:

LAS QUE TIENEN UN RECUENTO DE EOSINÓFILOS DE  más de  25%
  • NEUMONÍA EOSINOFÍLICA CRÓNICA (más de 40 %)
  • CHURG-STRAUSS CON NEUMONITIS ACTIVA
  • NEUMONÍA EOSINOFÍLICA AGUDA IDIOPÁTICA (menos de 25%)
  • EOSINOFILIA PULMONAR TROPICAL (40 A 70%)

LAS QUE CONTIENEN RECUENTOS DE EOSINÓFILOS DE menos 25%
  • ENFERMEDADES DEL TEJIDO CONECTIVO
  • NEUMONITIS INDUCIDA POR DROGAS
  • NEUMONÍA FÚNGICA
  • FIBROSIS PULMONAR IDIOPÁTICA (menos de 10%)
  • HISTIOCITOSIS DE CÉLULAS DE LANGERHANS
  • SARCOIDOSIS


INFECCIONES POR HELMINTOS
Probablemente la MIGRACIÓN PULMONAR DE LAS LARVAS DE ALGUNOS HELMINTOS (áscaris, Ancylostoma duodenale, Necator americanus, y Strongyloides stercoralis), sea la causa más frecuente de infiltrados pulmonares con eosinofilia  y en tal caso se lo llama al cuadro síndrome de Löefler. Estos parásitos presentan en sus ciclos vitales una etapa en la que las larvas alcanzan los pulmones vía sanguínea, penetran en los alvéolos, maduran y ascienden por la vía aérea antes de descender hasta el intestino delgado. Los áscaris son los que más frecuentemente producen estos infiltrados. Los pacientes a menudo se quejan de tos seca y malestar quemante subesternal que se agrava con la tos o la respiración profunda. Puede haber disnea, sibilancias, fiebre y esputo con estrías de sangre que puede contener cristales de Charcot-Leyden derivados de los eosinófilos (Figura 1a).






Figura 1a Cristales de Charcot-Leyden en el esputo de un paciente con ascaridiasis. Estos cristales que son encontrados en todas las infecciones parasitarias eosinofílicas consisten en lisofosfolipasa, una enzima derivada de los eosinófilos.



La radiografía de tórax puede mostrar opacidades que van desde algunos milímetros hasta varios centímetros en ambos campos pulmonares, migratorias y pueden hacerse confluentes en áreas perihiliares. Figura 2.


 
2a




3a



4a


5a




Figura 2 a 3 a,4 a y 5 a. Síndrome de Löffler en un paciente coreano de 29 años que había emigrado a los EE UU. Tenía eosinofilia en el frotis de sangre periférica. Las radiografías seriadas (ordenadas de A a D), en un período de 12 días muestran un patrón bien definido, transitorio, asimétrico con áreas de infiltrado o consolidación con reacción pleural asociada. Nótese la fugacidad de los infiltrados que son característicos del síndrome de Löffler




Este paciente de 54 años presentó síndrome de Loeffler por migración de larvas de ascaris. Existe una secuencia radiológica que muestra infiltrados sutiles que aparecen y desaparecen apareciendo nuevos en distinta topografía pulmonar.







Figura 2(1)a Rx inicial de un hombre de 54 años que muestra opacidad sutil (flechas en la zona media del pulmón derecho





Figura 2(1)b Rx de control que muestra opacidad migratriz en el lóbulo inferior izquierdo 20 días después de la primera .






Figura 2(1)c TAC de alta resolución  con cortes de 1 mm obtenidas del mismo paciente  de 54 años que muestra consolidación con opacidad en vidrio esmerilado rodeando el lóbulo inferior izquierdo. Vía aérea dilatada se observa dentro de la lesión. Esta TAC fue obtenida entre ambas radiografías previas.



Curan espontáneamente en varias semanas Generalmente la eosinofilia supera el 10%. El diagnóstico definitivo de ascaridiasis requiere detección de larvas de áscaris en las secreciones respiratorias. El examen de materia fecal es generalmente negativo en el momento de los síntomas pulmonares y no es útil en el diagnóstico de síndrome de Löeffler. No se requiere tratamiento específico aunque por supuesto se deberá dar terapia antihelmíntica para la infección intestinal después de la resolución de los síntomas pulmonares


Otra forma de eosinofilia pulmonar relacionada a helmintos es la INVASIÓN PARENQUIMATOSA  PULMONAR. Existen helmintos que pueden invadir directamente el parénquima pulmonar y producir manifestaciones prolongadas en vez de las fugaces manifestaciones del síndrome de  Löeffler de los parásitos que pasan brevemente por los pulmones en su ruta hacia el intestino. Estos parásitos son las duelas pulmonares del Paragonimus (trematodos), y los cestodos Echinococcus, y Tenia solium.
Como ejemplo de este tipo de infección, Paragonimus puede invadir los pulmones y producir derrame pleural o infiltrados pulmonares ricos en eosinófilos. Pueden ocasionar hemoptisis recurrente o producción de esputo de color chocolate producto de la mezcla de sangre, células inflamatorias y huevos de Paragonimus. Hay importante eosinofilia periférica en los estadios iniciales de la infección pero se hace mínima con la enfermedad ya establecida. La investigación por ELISA o inmunoblot de anticuerpos contra Paragonimus es más útil cuanto más tardía en la enfermedad  es la solicitud de estos análisis. Las lesiones de Paragonimiasis son típicamente nodulares con áreas adyacentes de vidrio esmerilado (Figura 6a).






Fig 6a. Paragonimiasis
A y B Rx de tórax y TC al ingreso. A múltiples opacidades en pulmón derecho (flecha).
B Múltiples nódulos con áreas adyacentes de densidades en vidrio esmerilado sugestivos de causas hemorrágicas o metastásicas que se observan en ambos pulmones(flechas).
C. PTE-FDG que muestra hipercaptación de FDG (Flechas).




Las lesiones son periféricas y más comunes en los campos pulmonares medios e inferiores, mientras que la tuberculosis que es un diagnóstico diferencial más probablemente causa cavitaciones apicales. El diagnóstico de paragonimiasis  es típicamente hecho por el hallazgo de huevos en el esputo o del lavado broncoalveolar (BAL) (Figura 7a), o por un ELISA positivo,





Figura 7 a. (A, B) Huevos de P. westermani en una muestra húmeda sin tinción.
En la figura 7 b se aprecia el ciclo de Paragonimus westermani






Figura 7b: Ilustración del ciclo de Paragonimus westermani, uno de los causales de paragonimiasis. CDC.



La ruptura de un quiste hidatídico (equinococosis) o cisticercosis puede también causar eosinofilia pulmonar. Los anticuerpos contra equinococcus pueden ser detectados por ELISA, y para cisticercosis.


Otra forma en que los parásitos pueden afectar al pulmón en el contexto de eosinofilia es la SIEMBRA HEMATÓGENA MASIVA. La siembra hematógena masiva de larvas o huevos puede conducir a depósitos pulmonares de parásitos y a respuesta pulmonar eosinofílica. Este tipo de diseminación no es esencial para el ciclo de vida del parásito. Un tratamiento previo con corticosteroides puede ser un factor de riesgo. Los síntomas pulmonares que pueden ocasionar son: tos, sibilancias, y disnea asociado a eosinofilia. Este cuadro puede verse en áscaris, toxocara canis, toxocara catis, que típicamente causan larva migrans visceral y otros gusanos que causan larva cutánea migrans, pueden también diseminarse por vía hematógena a los pulmones cuando un gran número de huevos o larvas son liberados a la sangre Figura 7 C y D).




Figura 7 (C) Rx de una niña de 3 años con toxocariasis







Figura 7(D)TC de la misma niña de 3 años con toxocariasis mostrada en 7 C. 


También pasa esto con Trichinella cuando sus larvas se diseminan a la sangre. La trichinelosis debe ser considerada en pacientes con edema periorbitario, miositis y eosinofilia. 
La esquistosomiasis  puede asociarse a eosinofilia pulmonar en dos contextos. Los esquistosomas adultos pueden diseminarse al pulmón vía vasos colaterales siguiendo a la terapia antihelmíntica particularmente en pacientes con hipertensión portal. Además, la neumonía eosinofílica puede ocurrir en la fase temprana, tres a seis semanas después de la infección por esquistosomas; los pacientes suelen experimentar tos y dificultad respiratoria, y la TC de tórax puede detectar múltiples pequeños nódulos y menos comúnmente opacidades en vidrio esmerilado. 
El síndrome de hiperinfección y diseminación de huevos y larvas de strongyloides pueden producir invasión de un número de órganos (incluyendo los pulmones), aparte de la migración transpulmonar requerido para el ciclo de todo helminto (Figuras 7 E, F, G). La hiperinfección se asocia típicamente con inmunosupresión aunque puede ocurrir en ausencia de inmunosupresión demostrable. Típicamente los pacientes están disneicos, con sibilancias tos y fiebre. La radiografía de tórax usualmente muestra opacidades en vidrio esmerilado. El diagnóstico se hace por la demostración de huevos en el BAL, aunque los tests serológicos son también positivos (ELISA), y la materia fecal es negativa.




Figura 7 E.  Estrongiloidiasis diseminada.Radiografía que muestra un patrón retículonodular difuso disperso por ambos campos pulmonares en una paciente con  estrongiloidiasis diseminada







Figura 7F. Estrongiloidiasis diseminada imagen amplificada que muestra micronodularidad extensa (flechas) y engrosamiento de la trama intersticial.







Figura 7G. Estrongiloidiasis diseminada. TC que muestra múltiples nódulos periféricos  (flechas).




Finalmente la última forma de eosinofilia pulmonar relacionada con parásitos es la EOSINOFILIA TROPICAL, que es el resultado de una respuesta inmune diferenciada a los estadios vasculares de la filaria linfática Wuchereria bancrofti, y menos comúnmente Brugia malayi. Los síntomas típicos son tos, disnea, sibilancias, fatiga y fiebre. Las pruebas funcionales respiratorias pueden mostrar trastornos mixtos obstructivos y restrictivos. La Rx de tórax generalmente muestra opacidades difusas (Figura 8 a), aunque el 20% tienen Rx de tórax normal.




Figura 8 a. Eosinofilia tropical.
(A) Rx de tórax de una joven de India que se presentó con síntomas sugestivos de asma.
(B) En el seguimiento en la Rx de tórax dos semanas después de una terapia con dietilcarbazina por eosinofilia pulmonar sospechada se muestra el mejoramiento de las sutiles imágenes.


La TC  es más sensible que la Rx de tórax y puede mostrar opacidades reticulares, y pequeños nódulos, bronquiectasias, atrapamiento de aire, calcificación y adenopatías mediastinales.
El diagnóstico se hace por los síntomas respiratorios y radiográficos típicos en un paciente con historia de residencia o viajes a regiones endémicas de filaria con eosinofilia periférica de más de 30000/mm3, IgE marcadamente elevados o más de 1000 unidades/ml, y serología marcadamente elevada y anticuerpos IgG antifilaria.


INFECCIONES NO HELMÍNTICAS
La infección por coccidioides puede causar neumonía eosinofílica. La diferenciación de la neumonía eosinofílica idiopática puede ser difcultosa. Si hay sospecha de coccidioidomicosis se pueden solicitar tests serológicos aunque estos pueden ser negativos al comienzo de la enfermedad; el ELISA para IgG e IgM son los tests más sensibles.
La tuberculosis pulmonar complicada puede ser causa de eosinofilia.




Figura 8c:
Radiografía de tórax con infiltrados interticiales micronodulares por Coccidiodes immitis


MEDICAMENTOS Y TOXINAS
Han sido reportadas eosinofilias pulmonares en la ingestión e inhalación de una variedad de medicamentos y toxinas. La presentación clínica puede ser diversa desde infiltrados pulmonares asintomáticos con eosinofilia, tos crónicay síntomas sistémicos como se ve en el DRESS
Los AINES y antimicrobianos (por ej nitrofurantoína, minociclina, sulfonamidas, ampicilina, daptomicina) son las clases de drogas más comunes asociadas a eosinofilias pulmonares pero existen otros como anticonvulsivantes, antidepresivos, inhibidores de la enzima convertidora,  betabloqueantes, hidroclorotiazida, y otras sulfodrogas, medios de contraste radiológicos, L-triptófano, metotrexato, amiodarona, bleomicina.
Las exposiciones a toxinas como silicato de aluminio, sulfitos, picaduras de escorpiones, inhalación de heroína, cocaína, marihuana, manufactura del caucho, , inhalación de polvos,o humo, exposición a humos como bomberos, abuso de tricloroetano etc han sido descritos como causantes de eosinofilias pulmonares.





Figura 8d. Toxicidad pulmonar por nitrofurantoína
A: tomografía computarizada de alta resolución (TACAR) donde se observan la distorsión de la arquitectura bronquial, la presencia de bandas de fibrosis y un patrón en panal de abeja incipiente en ambas bases pulmonares. B: TACAR de control en la que puede verse la resolución completa de las lesiones pulmonares.

NEUMONÍA EOSINOFÍLICA AGUDA IDIOPÁTICA.
La neumonía eosinofílica aguda idiopática es un tipo de neumonía eosinofílica asociada con rápido desarrollo de fallo respiratorio agudo en un paciente previamente sano. La mayoría de los pacientes se presentan como una enfermedad febril aguda,  de menos de 7 días de duración caracterizada por tos no productiva, disnea, y una variedad de cambios radiográficos inespecíficos (Figura 9 a y 10 a)





Figura 9 a. Neumonía eosinofílica aguda idiopática. Se observa opacidades bilaterales mixtas alveolares y reticulares.







Figura 10 a. Neumonía eosinofílica aguda idiopática. TC que muestra opacidades bilaterales en vidrio esmerilado.




Al comienzo de la enfermedad la eosinofilia periférica es rara pero desarrolla en el curso de la enfermedad. La insuficiencia respiratoria hipoxémica es frecuentemente identificada desde la presentación del cuadro y a menudo requiere ventilación mecánica.
El diagnóstico se hace por la presentación clínica, las imágenes, , la broncoscopía flexible con lavado broncoalveolar que muestra más de 25 por ciento de eosinófilos y ausencia de infección u otra causa precipitante (Tabla). La biopsia de pulmón se reserva para situaciones de diagnóstico incierto. Los hallazgos histopatológicos incluyen daño alveolar difuso, membranas hialinas, y marcado número de eosinófilos alveolares.





Tabla. Causa de eosinofilias pulmonares.



NEUMONÍA EOSINOFÍLICA CRÓNICA.
La neumonía eosinofílica crónica es un trastorno idiopático  caracterizado por una anormal acumulación de eosinófilos en los pulmones. Ocurre predominantemente en mujeres y en no fumadores; se han reportado casos siguiendo a la radioterapia de mama. En general se presenta como cuadro subagudo con una constelación de síntomas que incluyen tos, fiebre, dificultad respiratoria progresiva, pérdida de peso, sibilancias, sudoración nocturna; el asma acompaña o precede a la enfermedad en 50% de los casos. La eosinofilia periférica es común pero hay un 10% a 20% de los pacientes que no tienen eosinofilia.
La Rx de tórax muestra infiltrados periféricos periféricos, de base pleural descriptos como imagen negativa del edema agudo de pulmón que son virtualmente patognomónicos de la enfermedad (Figura 9 a y 10 a), pero estos hallazgos sólo se ven en un tercio o menos de los casos.







Figura 9 a. Neumonía eosinofílica crónica.
Hallazgos clásicos de la neumonía eosinofílica crónica como se ve en una Rx de tórax. El hallazgo incluye compromiso bilateral, predominantemente de lóbulo superior, y opacidades de consolidación y de vidrio esmerilado. En la neumonía eosinofílica crónica el compromiso pulmonar es bilateral en el 75% de los casos y confinado al lóbulo superior en el 50% de los casos. Hay que tener en cuenta que si bien los hallazgos de esta Rx son “clásicos”, la mayoría de los casos no son clásicos y esto se ve sólo en un tercio de los casos.






Figura 10 a. Neumonía eosinofílica crónica.
TC axial (A), y coronal (B) de alta resolución de un paciente con neumonía eosinofílica crónica. Los hallazgos incluyen infiltrados de  aspecto de  consolidación junto a vidrio esmerilado bilaterales y predominantemente en lóbulos superiores en 50%.



Los derrames pleurales se han descripto en pocos casos y la cavitación es excepcional. En el BAL la eosinofilia mayor de 25% es sugestiva de neumonía eosinofílica crónica. Se han descripto lesiones mucosas necrotizantes asociadas a neumonía eosinofílica crónica. La histopatología de la biopsia pulmonar muestra eosinófilos e histiocitos intersticiales y alveolares incluyendo células gigantes multinucleadas (Figura 11 a)






Figura 11 a. Neumonía eosinofílica crónica.
Biopsia a mediano aumento que muestra la combinación de ocupación del espacio aéreo y engrosamiento intersticial, en una paciente con neumonía eosinofílica crónica. El infiltrado del espacio aéreo muestra una combinación de histiocitos y eosinófilos. Un infiltrado inflamatorio similar es responsable del engrosamiento alveolar y  septal asociado



La fibrosis es mínima y la neumonía organizativa (antes llamada BOOP) es un hallazgo comúnmente asociado.
El diagnóstico de neumonía eosinofílica crónica se basa en la combinación de presentación sugaguda, hallazgos radiológicos característicos, eosinofilia periférica, eosinofilia en el BAL en ausencia de infección o drogas inductoras de eosinofilia. El diagnóstico diferencial incluye la neumonía organizativa criptogenética y la granulomatosis eosinofílica con poliangeítis (Churg-Strauss).

GRANULOMATOSIS EOSINOFÍLICA CON POLIANGEÍTIS.
La granulomatosis eosinofílica con poliangeítis (GEPA) o enfermedad de Churg-Strauss es un trastorno vasculítico a menudo caracterizado por sinusitis, asma y eosinofilia. Es la única forma de vasculitis que asocia eosinofilia con compromiso pulmonar. Además de los pulmones, la piel, el aparato cardiovascular, renal y neurológico pueden estar afectados.
La eosinofilia periférica de más de 1500 eosinófilos/dl, o más de 10% del recuento total de leucocitos son parte de los criterios diagnósticos de  la GEPA aunque son frecuentes valores de más de 5000 eosinófilos/dl. Los anticuerpos anti citoplasma de los neutrófilos (ANCA), están presentes en 40 a 60% de los pacientes y cuando son positivos el patrón es generalmente de patrón perinuclear por anti mieloperoxidasa.
La Rx de tórax de la GEPA es muy variable pero frecuentemente suele mostrar opacidades en parches sin distribución segmentaria ni lobar, es decir no respeta segmentos ni lóbulos (Figuras 12 a, 13 a, y 14 a.)




Figura 12 a. Granulomatosis Eosinofílica con Poliangeítis (Churg-Strauss)
Rx de tórax frente de un paciente con GEPA.







Figura 13 a. Granulomatosis Eosinofílica con Poliangeítis (Churg-Strauss). Rx de perfil.
Rx de tórax perfil en un paciente con GEPA  mostrando consolidaciones prominentes.







Figura 14 a. Granulomatosis Eosinofílica con Poliangeítis (Churg-Strauss)
TC de alta resolución de lóbulo inferior y medio derechos en un paciente con GEPA  que muestra engrosamiento de la cisura mayor y engrosamiento de los septos en el parénquima subpleural. Agrandamiento de las arterias pulmonares están presentes en esta área. Los bronquios adyacentes son de tamaño normal con algo de engrosamiento peribronquiolar. Pequeñas opacidades en parches están presentes en el parénquima pulmonar y se considera que se correlaciona con la neumonitis eosinofílica presente.



Los infiltrados patognomónicos en la biopsia pulmonar incluyen infiltrados eosinofílicos y vasculitis eosinofílica especialmente de pequeñas arterias y venas, granulomas necrotizantes perivasculares e intersticiales y áreas de necrosis (Figuras 15 a, 16 a y 17 a). Sin embargo, los tejidos de los pacientes que se presentan con GEPA de reciente comienzo pueden no exhibir los hallazgos clásicos anatomopatológicos sino más bien recordar la infiltración eosinofílica sin vasculitis típica de la neumonía eosinofílica crónica o del síndrome hipereosinofílico. En algunos pacientes la neumonía eosinofílica crónica precede al diagnóstico de GEPA.







Figura 15 a. Granuloma en una granulomatosis eosinofílica con poliangeítis (Churg-Strauss).
Micrografía a bajo aumento que muestra granulomas en palizada de un paciente con GEPA caracterizado por un área de necrobiosis (flecha) permeado por neutrófilos desintegrados y rodeados por infiltrado histiocitario.  Puede o no estar acompañado de vasculitis.






Figura 16 a. Histopatología de una granulomatosis eosinofílica con poliangeítis.
Pequeña arteria en un paciente con GEPA (Churg Strauss), que muestra necrosis fibrinoide de la íntima e infiltración mural por histiocitos consistentes con vasculitis granulomatosa necrotizante. Hay marcada eosinofilia extravascular.








Figura 17 a.
Micrografía a bajo aumento de una biopsia pulmonar de un paciente con GEPA que muestra una lesión arterial oclusiva necrotizante bien establecida con obliteración de la luz arterial. La dilatación de los canales linfáticos en la adventicia arterial contribuye significativamente a la marcada diferencia de tamaño entre la arteria y el bronquiolo adyacente. Otras regiones del pulmón revelan infiltración eosinofílica del parénquima.



El diagnóstico de GEPA es típicamente sospechado por los hallazgos clínicos, eosinofilia de más de 1500 eosinófilos por dl, asma, y enfermedad de senos paranasales. El hallazgo de ANCAp es un fuerte elemento a favor del diagnóstico. Pero la confirmación diagnóstica requiere típicamente biopsia tisular del sitio más accesible antes de iniciar terapia con corticosteroides

ASPERGILOSIS BRONCOPULMONAR ALÉRGICA (ABPA).
La ABPA es una reacción de hipersensibilidad compleja  que ocurre cuando la vía aérea se coloniza por Aspergillus. Repetidos episodios de obstrucción bronquial, inflamación e impactación de moco pueden conducir a bronquiectasias, fibrosis y compromiso respiratorio. La respuesta inmune disparada por Aspergillus fumigatus es la responsable de este síndrome.
El cuadro clínico del ABPA es dominado por episodios recurrentes de obstrucción bronquial, fiebre, malestar, expectoración de tapones mucosos amarronados, eosinofilia periférica y hemoptisis. Las sibilancias no son siempre evidentes y algunos pacientes se presentan con consolidaciones pulmonares asintomáticas. La TC de alta resolución (TACAR) de tórax puede mostrar amplias bronquiectasias cilíndricas proximales con predominancia por el lóbulo superior y engrosamiento de la pared bronquial. Mientras que las bronquiecatsias centrales con adelgazamiento bronquial a medida que se hacen periféricos es considerada la manifestación clásica de la ABPA, este dato no se considera ni sensible ni específico de este trastorno (Figura 18 a).





Figura 18 a. Bronquiectasias Centrales en Aspergilosis Broncopulmonar Alérgica.
Bronquiecatsias centrales en un paciente con aspergilosis broncopulmonar alérgica (ABPA). Múltiples bronquios de tercera y cuarta generación son visualizados. Los pequeños bronquios periféricos llenos de moco explican las opacidades lineales ramificadas en el parénquima pulmonar distal.



Los hallazgos histológicos en uun paciente con ABPA incluyen bronquiolitis asmática, neumonía eosinofílica, granulomatosis broncocéntrica e impactación mucoide bronquial. En ocasiones la granulomatosis broncocéntrica en ausencia de hongos endobronquiales  ocurre con eosinofilia pulmonar.

MISCELÁNEAS.
Otras entidades pueden dar eosinofilias pulmonares pero con menor frecuencia



SÍNDROME HIPEREOSINOFÍLICO
El síndrome hipereosinofílico (SHE), puede tener compromiso de diversos órganos tales como corazón, tracto gastrointestinal, pulmones, cerebro y riñones. Cuando compromete pulmón suele dar tos y dificultad respiratoria
Otras enfermedades pulmonares idiopáticas que pueden cursar con eosinofilia en el BAL  son la fibrosis pulmonar idiopática, sarcoidosis, neumonitis por hipersensibilidad, enfermedades reumáticas sistémicas, y menos frecuentemente en neumonía organizativa criptogenética, artritis reumatoidea,   síndrome de Sjögren, síndrome post radiación, y enfermedad de injerto versus huésped. Algunas neoplasias como carcinomas de pulmón, tumores cervicales metastásicos, carcinomas escamosos de vagina, pene, piel o nasofaringe, adenocarcinoma de estómago, colon o útero y carcinoma transicional de vejiga. También algunos linfomas, leucemia eosinofílica, síndrome de Sézary con compromiso pulmonar.

Finalmente digamos que cuando nos enfrentamos a un paciente con infiltrado pulmonar eosinofílico debemos comenzar nuestra aproximación de diagnóstico diferencial con un exhaustivo interrogatorio y examen físico. Esta sistemática debe considerar antecedentes de medicamentos que esté tomando, incluyendo aspirina, AINES,    anticomiciales, antibióticos así como exposiciones ocupacionales, humo, polvo (bomberos, fumadores), o químicos. Viajes recientes o remotos, incluyendo residencia en zona endémica de coccidioidomicosis y una variedad de parásitos, ingesta de carne porcina mal cocida o jabalí u otras carnes animales sobre todo en quien se queja de dolores musculares, inflamción, hinchazón, y debilidad muscular. Antecedentes de asma, compromiso orgánico extrapulmonar.
Muchas veces estos procesos suelen confundirse con neumonías, sin embargo hay que recordar siempre que toda neumonía bacteriana induce respuestas eosinopénicas, y la presencia de eosinofilia en este contexto debe sugerir alguno de los trastornos citados arriba. Además hay que recordar que algunas de estas condiciones de eosinofilia pulmonar no tienen eosinofilia periférica tal como es el caso de la neumonía eosinofílica aguda y a veces la neumonía eosinofílica crónica.
Recordar siempre el aporte de las imágenes sobre todo de la TACAR que da imágenes clásicas en la neumonía eosinofílica crónica  aspergilosis broncopulmonar alérgica.
Completar con tests serológicos de acuerdo al caso como por ejemplo ELISA para Strongiloides, folarias, paragonimus, equinococcus, cisticercosis, coccidioidomicosis, ANCA, y dosaje de IgE total e IgG para Aspergillus.
A veces hay que recurrir a estudios invasivos como la fibrobroncoscopía con BAL en busca de larvas o huevos, o una biopsia pulmonar en casos de sospecha de Churg-Strauss que fue el diagnóstico final en esta paciente.


Fuente
From the Department of Pulmonary and Critical Care Medicine (C.C.T., A.M.T.) and the Center for Immunology and Inflammatory Diseases, Division of Rheumatology, Allergy, and Immunology (A.M.T.), Massachusetts General Hospital; the Channing Laboratory, Brigham and Women's Hospital (C.C.T.); Harvard Medical School (C.C.T., A.M.T., P.F.W.); and the Divisions of Allergy and Inflammation and Infectious Diseases, Department of Medicine, Beth Israel Deaconess Medical Center (P.F.W.) — all in Boston.
Address reprint requests to Dr. Thomson at the Pulmonary and Critical Care Unit, Bulfinch 148, Massachusetts General Hospital, 55 Fruit St., Boston, MA 02114, or at cthomson{at}partners.org .
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ATENEO HOSPITAL PINTOS 10/06/2015. MUJER DE 55 AÑOS CON SÍNDROME DE CHURG-STRAUSS

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Paciente femenina
55 años

Hospital "Dr Ángel Pintos" de Azul
MOTIVO DE CONSULTA (12 de marzo 2015): dolor y parestesias en miembros inferiores

ENFERMEDAD ACTUAL: comienza hace 30 días con parestesias, disestesias y dolor en ambos pies desde el tobillo hacia distal especialmente en cara lateral externa de pies.
Simultáneamente nota la aparición en cuero cabelludo en región frontal bilateral la aparición de nódulos duros de aproximadamente 1 cm de diametro bastante fijos a los planos óseos. También nota uno o dos en región occipital. Aparecen asimismo en dorso de manos especialmenteen región de nudillos lesiones ligeramente sobreelevadas eritematosas.
Evoluciona a dolor de tipo polineurítico con crisis lancinantes especialmente nocturnas por lo que decide consultar a neurología quien interpreta el cuadro como polineurítico y la medica con gabapentin y amitriptilina con mala respuesta sintomática.
Desde entonces y hasta la actualidad el dolor ha empeorado y le impide caminar ya que el apoyo del peso del cuerpo le desencadena dolor.
Ha tenido en ocasiones cambio de color en región distal de pies de aspecto livedoide.
Hace una semana aparece dolor en región carpiana izquierda que impresiona como sinovitis de carpo y hace tres días aparece púrpura palpable distal en ambos miembros inferiores.
Ha notado alteraciones de la sensibilidad profunda de pie izquierdo y alteraciones de la sensibilidad superficial en cara lateral externa de pie izquierdo.Debilidad en la dorsiflexión de pie izquierdo.
La Rx de tórax del comienzo de la enfermedad actual  (imagen) impresiona normal. 
La paciente impresiona adelgazada pero sin demasiada repercusión de su estado general.
Afebril.

ANTECEDENTES PERSONALES Y PATOLÓGICOS:
Asma desde la primera infancia (regular control). Espirometría (2012): moderado defecto obstructivo con escasa respuesta broncodilatadora.
Rinosinusitis crónica alérgica. Cirugía de tabique y cornetes nasales. Otitis media serosa crónica bilateral.
Neumonía adquirida en la comunidad a los 25 años de edad.
No presentaba antecedentes heredofamiliares de relevancia.

MEDICACIÓN HABITUAL
Fluticasona/salmeterol 50/500 mcg una inhalación cada 12 horas
Salbutamol/ipratropio puff a demanda.
Meprednisona 20 mg cada 15 días.
Ciclos de tratamiento con montelukast.

EXAMEN FÍSICO
Temperatura axilar: 36,5º C    TA: 130/80   Fc: 80 lpm
Buen estado general. Eupneica, buena entrada de aire bilateral, sibilancias espiratorias aisladas en ambos campos pulmonares. No presentaba edema periférico. Ruidos cardíacos R1 y R2 de intensidad conservada, silencios libres a la auscultación de precordio. Abdomen no doloroso a la palpación, no se constató hepatomegalia ni esplenomegalia. No se palparon ganglios linfáticos patológicos. No presentaba dolor a la movilización activa ni pasiva de las articulaciones.

EXAMEN NEUROLÓGICO:
Paciente vigil, totalmente orientada.  Los pares craneales eran normales.  Fuerza muscular normal. El tono muscular y el trofismo estaban conservados.  Sensibilidad superficial: hipoestesia táctil e hipoalgesia  en las caras laterales y plantas de ambos pies y caras laterales de la parte inferior de ambas piernas.  Sensibilidad profunda: compromiso de la batiestesia del hallux izquierdo, y disminución de la palestesia del pie izquierdo.  Hiporreflexia aquiliana bilateral. Babinski con respuesta flexora bilateral. Maniobra de Romberg negativa.

LABORATORIO:
Hematocrito 40%, Hb 13,1 g/dl. Leucocitos 12.900/dl. PMN neutrófilos 71%, linfocitos 17%, eosinófilos 4% (516). VCM 94 u3. Plaquetas 388.000/dl. VSG 51 mm/h. Glucemia 72mg/dl. Urea 29 mg/dl. Creatinina 0,79 mg/dl. Transaminasas y bilirubina normales. FAL 369 UI/L.  GGT  94. CPK 306 UI/L. TSH 2,01. Proteinograma normal. Vitamina B12 normal. 
Orina: proteínas (++) hemoglobina (++), leucocitos 5, hematíes (6, sin GR dismórficos). Proteinuria de 24 hs 0,8 grs.


Rx de tórax de laprimera consulta.

SEGUNDA CONSULTA (10/04/2015)
Intensificación del dolor en ambos pies que le impedían la deambulación. Dolor en mano derecha. Lesiones cutáneas en miembros inferiores.
Temperatura: 37,7º C   TA: 120/80    Fc: 80 lpm
Facies de dolor, decúbito dorsal preferencial.
Sinovitis de primeras dos articulaciones metacarpofalángicas derechas.
Debilidad en la dorsiflexión de pie izquierdo (foot drop).
Marcha en steppage.
Nódulos subcutáneos en cuero cabelludo (Imágenes 2,3,4)
Púrpura palpable en miembros inferiores (Imágenes 5,6)



Nódulos subcutáneos en cuero cabelludo





Nódulos subcutáneos en cuero cabelludo



Nódulos subcutáneos en cuero cabelludo




Púrpura palpable en miembros inferiores




Lesiones rojizas de 2 a 3 mm de diámetro que no se blanquean con la presión, sobreelevadas, en piernas y dorso de pies. Púrpura palpable.



Púrpura palpable en miembros inferiores



Púrpura palpable en miembros inferiores



Púrpura palpable en miembros inferiores



Imagen 7: Lesiones nodulares de consistencia blanda sobre articulaciones interfalángicas proximales

Se interpretó como un cuadro de neuropatía periférica en el contexto de enfermedad sistémica probablemente  vasculítica basados en un síndrome de mononeuritis múltiple/polineuritis, púrpura palpable, sinovitis. En ese sentido nos pareció apropiado revisar las causas hereditarias y adquiridas de neuropatías periféricas y ver en cual de ellas podría encajar nuestra paciente.







Tabla1 y 2 Causas de neuropatías periféricas


Y nos pareció apropiado considerar un algoritmo diagnóstico frente a un paciente con neuropatía periférica.




Tabla 3
Algoritmo diagnóstico frente a una neuropatía periférica.


ESTUDIO DE LA NEUROPATÍA PERIFÉRICA
Tempo de la evolución:
Agudo, Subagudo o Crónico

Tipo de síntomas:
Sensitivo, Motor o Mixto

Patrón de distribución:
Focal, Multifocal o Difuso
Simétrico o Asimétrico

Nuestra paciente tenía un tiempo de evolución agudo, los síntomas eran mixtos (motores y sensitivos), y elpatrón de distribución era asimétrico.
A partir de la categorización clínica podemos considerar al síndrome de nuestra paciente como mononeuritis múltiple.

MONONEURITIS MÚLTIPLE. CAUSAS
Neuropatías hereditarias con propensión a la parálisis por presión
Neuropatía diabética
Vasculitis
Sarcoidosis
Lepra
Enfermedad de Lyme
HIV
Amiloidosis
Infiltración neoplásica

Nuestra paciente tenía: mononeuritis múltiple, púrpura palpable, marcadores de inflamación y artralgias lo que nos hizo sospechar VASCULITIS  SISTÉMICA.

Una de las maneras clásicas de clasificar a las vasculitis es de acuerdo al tamaño de los vasos afectados en la entidad. El siguiente esquema, propuesto por Jennette. JC, y Falk RJ (New England Journal of Medicine 1997),  es ya un clásico en el estudio de las vasculitis.






Tabla 4 Causas de vasculitis de acuerdo al tamaño de los vasos afectados.

Ahora bien, un cuadro clínico humoral caracterizado por mononeuritis múltiple, púrpura palpable, marcadores de inflamación y artralgias corresponde generalmente a vasculitis de vasos pequeños o mediano calibre
Los trastornos clínicos que combinan vasculitis con neuropatía periférica (neuropatía vasculítica) están bien detallados en el siguiente cuadro de Vallat J et al publicado en  The New England Journal of Medicine de 2007








Tabla 5


NEUROPATÍA VASCULÍTICA
La neuropatía vasculítica generalmente es una manifestación dentro de un cuadro sistémico.
Puede ser una enfermedad devastadora, llevando a discapacidad funcional severa.
Los dos mecanismos que llevan al daño vasculítico del nervio periférico son el depósito de inmunocomplejos y la inmunidad mediada por células.

MANIFESTACIONES CLÍNICAS DE LA NEUROPATÍA VASCULÍTICA
Dolor, parestesias, entumecimiento y debilidad.
Comienzo abrupto o insidioso.
Existen tres patrones de afectación nerviosa:
Mononeuritis múltiple
Polineuropatía simétrica y distal
Radiculopatía y/o plexopatía






Imagen 8.  Progresión de la neuropatía vasculítica.







Imagen 9. Caída de muñeca en neuropatía vasculítica.


EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA DE LA NEUROPATÍA VASCULÍTICA
Anamnesis
Examen físico
Estudios de laboratorio:
Hemograma.
Creatinina sérica, clearance de creatinina.
Orina completa, con examen microscópico  del sedimento urinario.
Anticuerpos antinucleares.
ANCA.
Anticuerpos anti ADN doble cadena.
Anticuerpos anti antígenos nucleares extraíbles (anti-Sm, Anti-Ro, anti-La, y anti-RNP).
Factor reumatoideo.
Crioglobulinas.
Tests para infecciones por virus de la hepatitis B y C.
Estudios para enfermedad de Lyme.
Complemento (C3 y C4).

ESTUDIOS ELECTRODIAGNÓSTICOS EN NUESTRA PACIENTE:
“Daño axonal comprometiendo múltiples nervios individuales en forma asimétrica.
Los estudios de conducción nerviosa muestran potenciales de acción de nervio sensitivo de baja amplitud, potenciales de acción del componente muscular de baja amplitud, y velocidades de conducción nerviosa normales o ligeramente lentas.
La electromiografía del músculo afectado puede mostrar signos difusos de denervación con fibrilaciones y ondas positivas agudas.”

Para completar el estudio clínico de una neuropatía vasculítica está indicado muchas veces la biopsia de nervio periférico.

El diagnóstico presuntivo en nuestra paciente en este punto de la evolución fue: Neuropatía vasculítica posiblemente vinculada a  Granulomatosis eosinofílica con poliangeítis (Enfermedad de Churg-Strauss).
A continuación se informan los datos de laboratorio solicitados, los cuales arrojaron los siguientes resultados:
Serología para hepatitis B y C negativos. HIV negativo, VDRL negativa, FR (+)  1/64. Fan (+) 1/80 patrón punteado nuclear. Crioglobulinas negativas. Complemento normal.Anticuerpo anti péptido citrulinado negativo. ANCA-C negativo. ANCA-P positivo 1/160. ANTI-PR3 negativo. ANTI-MPO (mieloperoxidasa) positivo 19,4 U/ml.
PPD negativa.  

Se realizó TAC de tórax (Figura 10)




Imagen 10 TAC de tóraxTC de torax sin alteraciones patológicas





Imagen 11. TC de senos paransales: engrosamientos mucosos de los senos maxilares y celdillas etmoidales. Complejos ostiomeatales muestran material de densidad de partes blandas.







Imagen 12 TC de senos paransales: engrosamientos mucosos de los senos maxilares y celdillas etmoidales. Complejos ostiomeatales muestran material de densidad de partes blandas.

Finalmente se llevó a cabo una biopsia de uno de los nódulos que presentaba en cuero cabelludo (Figuras 13,14, 15)




Imagen 13: Infiltrados granulomatosos compuestos por linfocitos, histiocitos, escasas células gigantes mal delimitadas, eosinófilos y centro degenerativo fibrinoide





Imagen 14: Granuloma con centro degenerativo fibrinoide





Imagen 15: Célula gigante multinucleada





Imagen: 16 Vasos capilares con pared edematosa e infiltrados linfoides a su alrededor.



DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL DE LAS VASCULITIS DE PEQUEÑOS VASOS




Imagen 17

¿Sigue siendo necesario realizar una biopsia tisular para el diagnóstico de vasculitis asociada a ANCA cuando tenemos un resultado de ANCA positivo?

ANCA
Anticuerpos contra antígenos del citoplasma de neutrófilos. Rol esencial en el diagnóstico y clasificación de  las vasculitis.

TÉCNICAS:
INMUNOFLUORESCENCIA INDIRECTA: sensible, se utiliza para screening.   ANCA-C. ANCA-P                                                                                       
ELISA: específica, se utiliza como prueba confirmatoria. ANTI-PR3. ANTI-MPO (mieloperoxidasa)





Imagen 18. ANCA-C
Patrón citoplasmático por IFI. Casi siempre PR3-ANCA (proteinasa 3) por ELISA, aunque a veces es MPO-ANCA (mieloperoxidasa).





Imagen 19. ANCA-P
Patrón perinuclear de ANCA-p, correspondiente a MPO-ANCA por ELISA, dirigido a la mieloperoxidasa. Sin embargo, algunos ANCA-p pueden ser dirigidos a otros antígenos como elastasa y lactoferrina (esto último en varios trastornos no vasculíticos).

ANCA-P
El 70% de los pacientes con poliangeítis microscópica son ANCA+, la mayoría de los cuales son ANCA-p (anti-MPO).
La mayoría de las glomerulonefritis pauciinmunes son ANCA+, de las cuales el 80% son ANCA-p (anti-MPO).
El 50% de los pacientes con Churg-Strauss son ANCA+, con una predilección por los ANCA-p (anti-MPO).




Imagen 20


RESULTADOS DEL ESTUDIO EUROPEO:
La combinación de IFI y ELISA resultó en un leve descenso de la sensibilidad, pero un aumento significativo de la especificidad.
La sensibilidad de tanto ANCA-C combinado con anti-PR3 o ANCA-P combinado con anti-MPO, fue de 73% para enfermedad de Wegener, 67% para poliangeítis microscópica, y 82% para glomerulonefritis con semilunas pauci-inmune.
La especificidad fue de 99% para ambas combinaciones.

¿Sigue siendo necesario realizar una biopsia tisular para el diagnóstico de vasculitis asociada a ANCA cuando tenemos un resultado de ANCA positivo?

Valor predictivo positivo
Sensibilidad
Especificidad
Prevalencia de la enfermedad (probabilidad previa)

El valor diagnóstico de los ANCA dependen en gran parte de la presentación clínica del paciente en el que se realiza el test.

La pregunta de si el tratamiento puede realizarse sin biopsia de tejido es controversial. Algunos clínicos inician el tratamiento sin realizar biopsia en casos seleccionados en los que la presentación clínica es altamente consistente con vasculitis pauci-inmune y los resultados de los ANCA son inequívocos (por ejemplo, tanto ANCA-C y anti-PR3 positivos).

Sin embargo, en general es aceptado que debe llevarse a cabo todo intento razonable para confirmar la sospecha clínica con pruebas histopatológicas antes de someter a los pacientes a tratamientos a largo plazo con medicaciones potencialmente tóxicas, principalmente debido a que la habilidad para establecer la probabilidad previa de la enfermedad varía ampliamente con la experiencia del médico.

Imagen 22



DIAGNÓSTICO FINAL
ENFERMEDAD POR  ANCA-MPO ) CHURG-STRAUSS)









Presentó
Mariano Macaluso
Médico de Planta Servicio de Clínica Médica
Hospital Pintos de Azul


Ex Jefe de Residentes de Clínica Médica del Hospital Italiano de Buenos Aires

ATENEO HOSPITAL PINTOS 27 DE MAYO 2015. MUJER DE 59 AÑOS CON FIBROSIS ANGIOCÉNTRICA EOSINOFÍLICA

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Hospital "Dr Ángel Pintos" de Azul

Paciente de sexo femenino, 59 años

MOTIVO DE CONSULTA (OCTUBRE DE 2014) :   disnea

ANTECEDENTES DE ENFERMEDAD ACTUAL:
DESDE JULIO 2008 episodios de rinitis y sinusitis, anosmia,tos cronica, que lo llevaron a consultar con diferentes otorrinolaringólogos. En una oportunidad  se realizó biopsia de mucosa nasal: Diagnóstico:  Hiperplasia epitelial reactiva inespecifica en junio de 2008.



SETIEMBRE 2009:  se realiza nueva biopsia de mucosa sinusonasal que se informa: fragmentos de mucosa sin alteracion importantes, otras con densos infiltrados linfoplasmocitarios en el estroma, y otras con fibrosis perivascular concéntrica asociada a infiltrados inflamatorios cronicos con eosinófilos. Lesion compatible histopatologicamente con fibrosis angiocentrica eosinofílica, enf granulomatosa.




Rx senos paranasales normal


Rx de senos paranasales normal.

Rx de senos paranasales normal


NOVIEMBRE DE 2009 TAC SPN: Senos maxilares, celdillas etmoidales, seno esfenoidal y los senos frontales están correctamente neumatizados, complejo osteomeatales libres, cornetes normales, hipertrofia polilobulada de la mucosa de septun y fosa nasal con erosión del mismo en su porción anterior, resto normal.
TAC de TX normal.



JULIO 2012: Dolor en puente nasal.

TAC de SPN informada como normal con TAC de TX normal.
Sinusitis costrosa


Rx de senos paranasales normal

Realiza tratamiento reiterados con antialergicos y corticoides nasales, en forma intermitente.
Presenta examen fisico normal. Buena entrada de aire pulmonar bilateral, con respiración estertorosa en inspiración y espiración, con disnea CF III-IV.

LABORATORIO: ERS 47, FAN negativo, ANCA C y P negativos, PCR 7, Scl 70 negativos, Ac anti centrómero negativos, anti Ro-La-RNP-y Sm negativos.
IgG subclases: G 1,2,3 y 4 dentro de valores normales.
PR3 normal.

SETIEMBRE 2014 es estudiada por disnea
Vista por otorrino que le realizo fibrolaringoscopia y le informa verbalmente que presenta cuerdas vocales con leve disminución de la motilidad, resto normal.
Esofagoscopia y seriada con hernia hiatal, resto normal.
Espirometria con obstrucción de VA leve a moderada pero con curva en cajón.


Espirometria con obstrucción de VA leve a moderada pero con curva en cajón.





OCTUBRE 2014: TAC SPN con cornetes y fosas nasales con engrosamiento irregular de sus mucosas, rastros quirurgicos en pared medial de antro derecho, complejos osteomeatales izq ocupados por secreciones. Resto normal. Luz del cavum libre.
Se deriva nuevamente a otorrinolaringologia, se repite videofibroscopia que informa: perforación septal anterior con rinitis atrófica costrosa, huellas quirúrgicas de antrostomia maxilar derecha, cavum libre, laringe con cuerdas vocales móviles, se destaca estenosis subglótica que compromete 70% de la luz aérea de aspecto membranoso sin compromiso traqueal aparente


Se realiza TAC de cuello donde se identifica en region subglótica un area de marcada reducción del calibre de la luz traqueal. Presenta una extensión de aprox 4.9 mm y genera obstrucción casi completa de la fia aerea a ese nivel. Severo estridor inspiratorio y dificultad respiratoria




En este corte se puede ver la reducción extrema de la luz de la vía aérea






Reconstrucción coronal de la vía aérea. Estenosis subglótica.




Perfil de la vía aérea.Reconstrucción.

A pesar del laboratorio se interpreta como una enfermedad IgG
Es derivada para tratamiento a La Plata, donde se le realizó traqueostomía y se comenzó tratamiento con corticosteroides a dosis de 0,6 mg/kg de peso.
Al cabo de 15 días cuando se retira la traqueostomía la paciente presentaba calibre normal de la tráquea

Se realizó una espirometría de control la cual es normal






Sigue actualmente en tratamiento de mantenimiento con Meprednisona, Metrotexate, Acido Folico.



ENFERMEDADES RELACIONADAS CON IgG4
Se caracteriza por fibrosis inflamatoria acompañada o no, de concentraciones séricas de IgG4 elevadas.
Se puede manifestar con afectación de un solo o de múltiples órganos.
La patogénesis no se ha podido determinar, se cree que se involucran mecanismos inmunológicos y alérgicos.
Es secundaria a la interacción entre células Th2 y células B, que resulta en concentración elevada de IgG4 y de mediadores inflamatorios, eventos que se expresan a nivel tisular como infiltrados linfoplasmocitarios y fibrosis, sin embargo, aparentemente no es el único mecanismo involucrado en la fisiopatología de la infermedad.


ESPECTRO CLÍNICO.

Pancreatitis autoinmunitaria: aprox un 2% de las pancreatitis crónica. Con ictericia obstructiva, intolerancia a carbohidratos.

Nefritis intersticial: se puede expresar con masas inflamatorias, daño renal agudo o crónico, proteinuria asociada con enfermedad glomerular u obstrucción relacionada con enfermedad glomerular u obstrucción relacionada con fibrosis retroperitoneal

Fibrosis idiopática cervical: se refiere a los tejidos blandos del cuello, principalmente en la región paraespinal.

Fibrosis angiocéntrica eosinofilica:formación de masas o lesiones localizadas en la órbita o en las vias respiratorias superiores. Hay infiltrado rico en eosinofilos y capas concéntricas de fibrosis que rodean a las arteriolas.

Mesenteritis esclerosante: prominente lipodistrofia, inflamación crónica y fibrosis, afecta principalmente intestino delgado.

Inflamación de la órbita idiopática (pseudotumor orbitario):localizada en órbita, músculos extraoculares, sistema lagrimal, nervio óptico o esclera.

Afección del oído medio

Enfermedad pulmonar intersticial: como intersticiopatia, pseudotumor inflamatorio pulmonar y la granulomatosis linfomatoide. Acompaña con histologia de infiltrado intersticial de linfocitos mononucleares y celulas plasmáticas IgG4.

Sialoadenitis

Enfermedad de la piel: psudolinfoma subcutáneo

Hepatopatía por EgG4: hepatitis autoinmunitaria

Mastitis esclerosante

Fibrosis retroperitoneal: como masa fibrótica retroperitoneal.

Prostatitis

Colangitis esclerosante

Linfadenopatía

Alteracíones de tiroides: tiroiditis de Reidel y de Hashimoto en su variante fibrosa.


El diagnóstico combina elementos clínicos, serológicos, histopatológicos e inmunohistoquímicos.
Los criterios mayores son: infiltrado linfoplasmocitario denso, fibrosis dispuesta al menos focalmente en un patrón estoriforme, flebitis obliterativa. Estos asociados a flebitis sin obliteración del lumen, incremento en el numero de eosinofilos.
Okazadi propone los siguientes criterios:
Agrandamiento o lesiones en masa focales o difusas en uno o más órganos
Concentraciones séricas elevadas de IgG 4 mayores de 135mg/dl
Hallazgos histopatológicos como infiltrado linfocitario y plasmocÍtico con fibrosis, sin infiltrado neutrófilo, infiltrado de plasmocitos IgG4 positivos,fibrosis esteriforme-remolino, flebitis obliterativa
En general se ha observado buena respuesta al tratamiento con glucocorticoides, sin embargo, se están probando terapias alternativas para casos de resistencia al tratamiento de primera línea. Entre estas se encuentran azatioprina, micofenolato de mofetil, rituximab.

Fuente: 
The New England Journal of Medicine.
UpToDate







Presentó:

Dra Andrea Añorga
Médica Neumonóloga
Hospital Municipal Ángel Pintos de Azul

















VARÓN DE 74 AÑOS CON MIELOMA MÚLTIPLE E HIPERCALCEMIA

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Hospital "Dr Ángel Pintos" de Azul

Paciente masculino de 74 años de edad, jubilado de tareas rurales, 

MOTIVO DE CONSULTA:  lumbalgia, somnolencia, síndrome de repercusión general 

ENFERMEDAD ACTUAL: el paciente refiere que desde hace 2 meses presenta lumbalgia decaimiento e hiporexia. En los últimos 10 días agrega somnolencia y debilidad generalizada lo que impide la deambulación . El dolor no cede con analgésicos varios, y persiste en reposo. 

ANTECEDENTES PERSONALES Y FAMILIARES:
HTA, Artrosis, Diverticulosis colónica.
No refiere otros antecedentes médicos personales ni familiares de importancia.  
Es jubilado actualmente y siempre se desempeñó en tareas rurales. Niega traumas 

EXAMEN FÍSICO: 
Al examen se encuentra adelgazado, con disminución generalizada de masas musculares, bradipsiquico, afebril, pulso reg. 76/m, TA 130/80 mmhg, con dolor difuso en raquis lumbar. Sin signos de déficit neurológico ni central ni periférico, con sensibilidad y reflejos osteotendinosos normales.  
Tiene Rx de columna lumbar y pelvis con leves cambios artrósicos. 

Rx de pelvis cambios degenerativos



Signos de osteoartrosis en columna lumbar


LABORATORIO
 GR: 4.140.000 Hto 36%, Hb: 11.9 grs. L. 6800 N64, L29, M7. Eritrosedimentación: 7 mm. Urea 76. Creatinina 1,68. Proteínas totales: 10,4 grs. resto normal.

Con diferencia de un mes y dado que el paciente deteriora su estado general agregándose somnolencia se solicitan nuevos análisis que muestran:

Urea: 133 mg%, Creatinina: 1.91 mg, Calcemia: 13.20 mg, Proteínas totales 9.20 grs. FAL: 246 TGO:13 TGP 16. Ionograma normal. 
Con estos nuevos datos se decide internación


INTERNACIÓN
Se interna; se  trata con hidratación parenteral, furosemida, corticoides y alendronato con buena evolución.
Lesiones osteolíticas sin reacción osteoblástica a lo largo del húmero izuqierdo



Lesiones osteolóticas húmero derecho.



Dudosas lesiones osteolíticas en cráneo




Aspecto de "apolillado" de los arcos costales posteriores

Se comprueban lesiones líticas en húmeros, costillas, y columna dorsal. 

Proteinograma con banda monoclonal en zona gamma (5 grs).





Evaluación hematológica con Punción de médula ósea 16% de células plasmáticas.
Bence Jones negativas

Se comenzó tratamiento oncológico por oncohematología con excelente respuesta clínica y de laboratorio.
En este momento se encuentra asintomáticos y con parámetros de laboratorio normales.

CONCLUSIONES DEL CASO
Se presentó un paciente de 74 años, jubilado de tareas rurales cuya enfermedad actual se manifestó 2 meses antes del diagnóstico con lumbalgia cuya característica importante era su intensidad progresiva a pesar de la ingesta autoprescripta de analgésicos y la ausencia de mejoría con el reposo en cama lo cual descartaba en principio una causa mecánica. Posteriormente se hizo presente una estado de repercusión general con alteraciones cognitivas referidas por el paciente como hipersomnia, adinamia y dificultad para la marcha. Posteriormente se vio que existía concomitancia de sus síntomas de la esfera cognitiva con la aparición de hipercalcemia y fracaso renal progresivo.
La aparicón de lesiones radiológicas osteolíticas, la presencia de un componente M en el proteinograma electroforético y la presencia de 16% de células plasmáticas en MO confirmaron el diagnóstico de Mieloma Múltiple.







Presentó
Rodolfo H Álvarez Prat.
Ex Jefe de Departamento de Clínica Médica
Hospital Municipal de Azul “Dr Ángel Pintos”

UN EQULIBRIO FRÁGIL.

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Un hombre de 31 años de edad se presentó al servicio de urgencias con dolor en el hombro izquierdo. Había tropezado con la correa de hombro de la mochila ese día más temprano  y tomó nota de dolor severo inmediata alrededor de su hombro izquierdo, sin parestesias o dolor en el cuello. El examen físico reveló un punto de sensibilidad ósea sobre la cabeza del húmero y el rango limitado de movimiento debido al dolor; crepitación estaba presente. Radiografías de hombro revelaron una fractura impactada del húmero izquierdo y signos de osteopenia (Figura 1).




Figura 1 Radiografía del hombro izquierdo.
La fractura impactada humeral (flecha grande) y osteopenia (flecha pequeña) se muestran.


Este hombre tenía una fractura traumática de su húmero izquierdo y se observó evidencia radiográfica de osteopenia. Las radiografías simples no son sensibles para la detección de pérdida de masa ósea; por lo tanto el hecho de que la osteopenia se detecte en tales imágenes sugiere una considerable pérdida de masa ósea, y una evaluación formal de la densidad mineral ósea (por ejemplo, por medio de absorciometría dual de rayos X) se justifica. Cuando se sospecha  osteopenia en un paciente de sexo masculino  menor de 50 años, una historia clínica cuidadosa es esencial. Los componentes clave deben incluir preguntas sobre  fracturas y las circunstancias en que ocurrieron, sobre el crecimiento y desarrollo puberal en la infancia, uso de medicamentos, una revisión exhaustiva de enfermedades sistémicas (especialmente endocrinológicas, gastrointestinal, hematológica, renal y  enfermedades genéticas que podrían alterar la homeostasis del hueso o la formación), y antecedentes familiares de fracturas o enfermedades sistémicas.


El paciente informó de desarrollo puberal normal, pero que era un niño delgado, con dificultad para ganar peso. Había permanecido delgado hasta dos años antes momento en que engordó 9 kg sin motivo aparente y así se había mantenido. No hubo cambios en su patrón de dieta o ejercicio. Informó sobre fatiga crónica, debilidad general, disminución de la libido, y la fácil aparición de moretones. No tenía diarrea, úlceras orales, artralgias o erupciones. No había participado de deportes de contacto y tampoco había tenido trastornos de la alimentación. Su historia clínica era notable por múltiples fracturas del fémur,  codo y  muñeca, sin que nunca se le hubiese realizado ninguna evaluación previa. En sus antecedentes figuraban una  pericarditis, disfunción eréctil, tímpanos perforados, hipertensión, desgarros retinianos con desprendimientos parciales tempranos,  miopía, cifoescoliosis, rasgo-β talasemia, y reflujo esofágico. El paciente era un estudiante graduado de la universidad. Él no tomaba  ninguna medicación. Fumaba 10 cigarrillos por día y no tomaba alcohol ni usaba drogas ilícitas. No había antecedentes de fracturas en su madre, padre, o un hermano de 36 años de edad. Su madre tenía hipotiroidismo y  fibromialgia, y su padre tenían melanoma e hipertrofia prostática benigna.



Los antecedentes de fracturas debería incitar a una evaluación detallada de causas conocidas u ocultas de trauma como el abuso, así como iniciar una evaluación metabólica y genética. Si el diagnóstico de osteopenia u osteoporosis severa se confirmara por medio de absorciometría dual de rayos X, debieran evaluarse causas secundarias de pérdida ósea.
En el examen físico, se debe buscar signos de enfermedades sistémicas. Las escleróticas azules son sugestivas, pero no patognomónicas de osteogénesis imperfecta. Cara de luna llena, obesidad central, y amplia estrías púrpura son sugestivos de hipercortisolismo.



En la exploración física, el paciente parecía estar en una leve molestia por su fractura. Su altura era de 175 cm, peso 76 kg, y el índice de masa corporal (el peso en kilogramos dividido por el cuadrado de la altura en metros) 24.9. Su presión arterial era de 134/98 mm Hg, y el pulso de 86 latidos por minuto y regular. No tenía cara de luna llena o  escleróticas azules. Las pupilas eran iguales y reactivas a la luz. La orofaringe y los dientes parecían normales. No había adenopatías en el cuello, axilares o inguinales. La tiroides era normal en tamaño y sin nódulos. Los campos pulmonares eran claros a la auscultación. No había ginecomastia. El examen cardíaco reveló el choque de la punta, el ritmo y la frecuencia cardíacas normales, sin soplos, roces, o galopes. El examen mostró cifosis y escoliosis de la columna torácica. Múltiples áreas dolorosas se palpaban sobre las costillas posteriores izquierdas. El abdomen era blando y no doloroso, con ruidos intestinales normales y sin hepatoesplenomegalia o masas. El volumen testicular bilateral era normal. La piel estaba pálida, con múltiples nevos, y había equimosis sobre el hombro izquierdo. No se observaron estrías o erupciones cutáneas. El examen del hombro estaba limitado por el dolor del paciente, pero los nervios y estructuras vasculares del brazo izquierdo parecían estar intactos. Los reflejos eran normales, y no había debilidad proximal del músculo o laxitud articular o  hipermovilidad.



El examen físico no muestra signos evidentes de trastornos endocrinológicos o genéticos. Sin embargo, el paciente tiene evidencia de cifoescoliosis, lo que sugiere posibles fracturas vertebrales por compresión en el pasado. Por otra parte, el dolor en sus costillas torácicas podría indicar fracturas adicionales de su reciente trauma o fracturas de costillas del pasado que se han curado de forma incompleta. La evaluación inicial de laboratorio debe incluir una evaluación de las causas secundarias de pérdida ósea en hombres jóvenes,  pruebas de tiroides, paratiroides, función renal y función gonadal, así como los niveles de vitamina D.



El recuento de glóbulos blancos era 7710 por milímetro cúbico, hematocrito fue del 41,5%, con un volumen corpuscular medio de 60 um3, y el recuento de plaquetas fue de 233.000 por milímetro cúbico. El nivel de nitrógeno ureico en sangre fue de 15 mg por decilitro (5,4 mmol por litro), creatinina 1,1 mg por decilitro (97 mol por litro), calcio 8,8 mg por decilitro (2,2 mmol por litro), la albúmina de 4,5 g por decilitro, y fosfato 3,6 mg por decilitro (1,2 mmol por litro). Los electrolitos y los resultados de función hepática fueron normales excepto por una ligera elevación en el nivel de aspartato aminotransferasa, a 53 U por litro (rango normal, de 7 a 52). Total de los niveles de proteína y tirotropina fueron normales. El nivel de 25-hidroxivitamina D fue de 35 ng por mililitro (rango normal, de 25 a 80 ng por mililitro), y el nivel de la hormona paratiroidea fue de 56 pg por mililitro (rango normal , de 11 a 80). El nivel de cortisol por la mañana fue de 11,7 microgramos por decilitro. Un análisis de orina fue normal. Un nivel de testosterona total mañana fue 1569 pg por mililitro (rango normal, 2220 a 6650 pg por mililitro. El nivel de la hormona luteinizante fue de 3,2 mU por mililitro (rango normal, 1.7 a 8.6), y el nivel de la hormona estimulante del folículo fue de 1,7 mUI por mililitro (rango normal, 03.01 a 12.02).
El paciente tuvo una reducción abierta y fijación interna sin complicaciones de la cabeza del húmero izquierdo. Morfina y oxicodona fueron prescritos para el control del dolor. Fragmentos de hueso resecados durante la cirugía fueron evaluados para  enfermedad ósea metabólica con el uso de histomorfometría estática. La médula ósea contenía necrosis grasa, células fusiformes reactivas, y el tejido de granulación, resultados que fueron consistentes con cambios reactivos. No pudo establecerse un diagnóstico claro sobre la base de estos hallazgos. La densitometría realizada después de la cirugía, mostró puntuaciones T de -4,4 en la columna vertebral, -2,7 en la cadera, y -3,1 en el cuello del fémur.




La absorciometría de energía dual de rayos X de este paciente muestra osteoporosis (es decir, un T score> 2,5 DS por debajo de la media para un adulto joven sano). La gravedad de la osteoporosis del paciente, la edad temprana en el diagnóstico y el extenso historial de fracturas apuntan a una causa secundaria.
Una anomalía de laboratorio notable es el bajo nivel de testosterona total, con  nivel normal de hormona luteinizante y nivel inferior a normal de la hormona estimulante del folículo, que no son esperables para ese bajo nivel de testosterona. Estos hallazgos son indicativos de hipogonadismo central, lo que podría explicar la osteoporosis, así como síntomas de disfunción eréctil del paciente, disminución de la libido, y  fatiga. Sin embargo, este valor testosterona sola no ha sido confirmado, y los niveles se puede suprimir temporalmente debido a estrés agudo, el uso de fármacos analgésicos narcóticos, o la hora del día en que se extrajo la muestra (ya que los niveles de testosterona tienen variación  diurna y el pico es en la mañana ). Además, la mayor parte de la testosterona se unen a la albúmina y globulina fijadora de hormonas; por lo tanto, las condiciones que afectan los niveles de albúmina o globulina fijadora de hormonas también pueden influir en los niveles de testosterona. Repetir la medición de un nivel total de testosterona por la mañana se justifica y es necesario antes de concluir que el paciente tiene hipogonadismo.
Además de los diagnósticos mencionados anteriormente, otras condiciones sistémicas subyacentes deben ser considerados como posibles causas de pérdida de hueso del paciente. La enfermedad celíaca es posible, dado su historial de tener bajo peso, aunque no tenía diarrea o erupciones cutáneas, y sus niveles de vitamina D fueron normales. El alcoholismo es otra posible causa, pero se informó que no consumía etanol, y es raro que el uso excesivo de etanol pueda causar una pérdida ósea tan severa a su corta edad. El síndrome de Cushing es poco probable debido a la fuerza proximal muscular normal y la ausencia de otros signos de exceso de cortisol. El mieloma múltiple es extremadamente raro en la edad de la paciente y sobre todo con  proteínas totales normales en suero. Otras afecciones raras que deben ser consideradas incluyen la mastocitosis e hipercalciuria. Evaluación radiográfica para la mineralización ósea anormal, fracturas patológicas (o inminentes fracturas), y las lesiones óseas líticas deben realizarse también.




Una repetición de la medición ambulatoria de la mañana, el nivel de testosterona era normal,  3356 pg por mililitro (11.635 pmol por litro). Una prueba de supresión con dexametasona durante la noche y las 24 horas los niveles de 1,25-dihidroxivitamina D urinaria de calcio y fueron normales. Los resultados de la electroforesis de proteínas  en suero y en orina y nivel del factor de crecimiento insulínico tipo 1 (somatomedina C) eran normales. Las pruebas de anticuerpos antitransglutaminasa y antiendomisiales  fueron negativos. El nivel de triptasa fue normal. Un estudio óseo mostró múltiples fracturas por compresión de la columna dorsal sin lesiones líticas (Figura 2). El paciente fue tratado con risedronato en una dosis de 35 mg semanales, carbonato de calcio en una dosis de 600 mg dos veces al día, y la vitamina D2 a una dosis de 50.000 UI por semana durante 6 semanas, seguido de una combinación de calcio (500 mg) y vitamina D3 (200 UI) dos veces al día.




Figura 2. Radiografía de la espina torácica.
Las flechas apuntan a las fracturas por compresión.



El nivel normal de testosterona descarta hipogonadismo como la causa de la osteoporosis del paciente. Los hallazgos de laboratorio restantes también son reveladoras. El estudio del esqueleto apoya la presencia de osteoporosis severa, pero no muestra lesiones sugestivas de una enfermedad maligna como causa.
Se necesitan más datos de la historia, especialmente lo que hace a las circunstancias de sus fracturas previas y al relevamiento de enfermedades óseas metabólicas o genéticas en su familia. Un tratamiento con un bisfosfonato, calcio y vitamina D es razonable para intentar detener la pérdida de hueso mientras  se sigue estudiando al paciente.   Se debe insistir en dejar el hábito tabáquico al paciente, dada la conexión entre el consumo de tabaco y la pérdida ósea. Habría que comenzar con vitamina D 800 UI  al día.




En respuesta a las preguntas más específicas planteadas por el endocrinólogo, el paciente recordó que había tenido múltiples pequeñas fracturas de los dedos, mientras que tocaba un instrumento musical durante su adolescencia. Informó que 10 años antes,  había sufrido una fractura de costilla con un mínimo trauma mientras rodaba por el suelo. También declaró que un dentista le había dicho una vez que no tenía "el esmalte dental delgado."


Cuàl es el diagnòstico?

La resolución e domingo  16/08/2015

MALFORMACIÓN DE CHIARI TIPO I EN VARÓN DE 55 AÑOS.

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Hospital "Ángel Pintos" de Azul

Paciente de 55 años con alteraciones de la marcha.

ANTECEDENTES

JUNIO 2008:  Internado en shock room de nuestro hospital por presentar un cuadro  fibrilación auricular paroxística sintomática. Se realiza en esa oportunidad cardioversión farmacológica.  
En esa internación se lleva a cabo ecocardiograma el cual se informa como normal. Rutina de laboratorio con función tiroidea normales. Holter s/p
Se va de alta medicado con atenolol 50 mg y amiodarona 200 mg, clonacepan 0,5 mg.


JULIO 2008:  Consulta a un neurólogo por trastornos en la marcha que venía presentando y advertido por familiares aunque él consideraba que su marcha era normal. En dicha consulta se objetiva  piramidalismo en los cuatro miembros con marcha espástica. Nistagmo multidireccional. Disartria. Con diagnóstico clínico de probable enfermedad desmielinizante se solicita RMN que muestra lesiones hiperintensas en T2  y FLAIR  inespecíficas en centros semiovales y paraatriales bilaterales (isquémicas versus desmielinizantes). Descenso patológico de las amígdalas cerebelosas que impresionan como Chiari tipo I.
El paciente se perdió en el seguimiento 
Lamentablemente las imágenes de el año 2008 no están disponibles así que subimos las imágenes de control que se realizaron en octubre de 2013 (cervical) y setiembre de 2014 (cerebro),  que tienen cambios poco significativos respecto al estudio de 2008.



































Se realizó en esta Eco Doppler de vasos de cuello que se informó como normal sin focos embolígenos. 
VIH negativo. FAN negativos.


ENERO 2009: es visto en consulta por un neumonólogo debido a disnea de esfuerzo. Después   de realizarce estudios (espirometría, test de marcha, Rx de tórax), se interpreta como desacondicionamiento aeróbico por obesidad. IMC(31). 
Se diagnostica hipotiroidismo en esa oportunidad por un nivel sérico de  TSH 6,13 y se lo medica con T4 25ug
Se le realiza ecografía abdominal que muestra litiasis vesicular.
Desde 2009 se perdió en el seguimiento pero siguió tomando la medicación.

Consulta en la actualidad por empeoramiento de la marcha la cual es espástica, con alguna alteración del equilibrio y empeoramiento de los trastornos del habla (palabra escandida?)
En el examen neurológicoactual es evidente un piramidalismo generalizado con espasticidad, hiperreflexia osteotendinosa generalizada, Babinski bilateral. Nistagmo horizntal en lamirada extrema. No hay signo de Romberg.
Se interpreta el cuadro como secundario a malformación de Chiari tipo I. 



Marcha espástica




Hiperreflexia por liberación piramidal.

MALFORMACIÓN DE CHIARI.
La malformación de Chiari comprende un grupo heterogéneo de trastornos que se definen como alteraciones anatómicas del cerebelo, tronco encefálico y de la unión cráneo-cervical con descenso del cerebelo sea solo o asociado a la médula espinal en el canal.
Las malformaciones de Chiari fueron primeramente descritas por Cleland en 1883 y posteriormente por Hans Chiari en cuatro grupos:

  • Chiari I: forma anormal de las amígdalas cerebelosas que son desplazadas debajo del nivel del agujero magno. (Fig 1)



Figura 1: RMN de cerebro vista sagital en T1 de  que muestra amígdalas cerebelosas elongadas (flecha)desplazadas debajo del agujero magno.


  • Chiari II: también conocida como malformación de Arnold-Chiari se caracteriza por descenso de las amígdalas y del vermis cerebeloso, malformación tectal del tronco cerebral en forma de pico  y mielomeningocele espinal  (Figuras 2, 3 y 4).





Figura 2: El diagnóstico de la malformación de Chiari II puede ser hecha in útero por RMN fetal que demuestra mielomeningocele lumbar (flechas blancas), y malformación de Chiari II (flecha amarilla)





Figura 3: RMN sagital en T1 de un paciente en edad pediátrica que muestra los característicos hallazgos de la malformación de Chiari II que incluyen descenso de tejido cerebeloso en el agujero magno (flecha blanca), un pequeño cuarto ventrículo (flecha amarilla), y una alteración tectal en forma de pico (flecha rosa).




Figura 4: Malformaciones asociadas a Chiari II.




  • Chiari III: es rara y combina una pequeña fosa posterior con encefalocele occipital alto que usualmente desplazan estructuras cerebelosas en el encefalocele  y a menudo con desplazamiento inferior del tronco en el canal espinal (Figura 5).




Figura 5:  Chiari III:  malformación de Chiari III con encefalocele. Una RMN sagital muestra el defecto óseo en laparte inferior del occipucio, foramen magno y la porción posterior de C1 y C2 con hernia del cerebelo (flecha negra), parte posterior del IV ventrículo dilatado (flecha blanca), tronco, médula cervical superior (flechas rojas) y meninges (flecha amarilla), en el saco posterior.



  • Chiari IV: es hoy en día un término considerado obsoleto que describe la hipoplasia cerebelosa no relacionada con la malformación de Chiari.


MANIFESTACIONES CLÍNICAS DE LA MALFORMACIÓN DE CHIARI TIPO I.
La malformación de Chiari I generalmente no se hace sintomática hasta la adolescencia o la vida adulta. El inicio de los  síntomas es insidioso y los síntomas y signos suelen ser los siguientes:
  • Presión intracraneal elevada.
  • Neuropatías  craneales.
  • Compresión del tronco.
  • Mielopatía
  • Disfunción cerebelosa.
  • Dolor, especialmente cervical y cefalea.
  • Siringomielia (Figura 6), a menudo acompañada de escoliosis y presiringomielia.



Figura 6: Una RMN sagital en T1 que muestra siringomielia (flechas) afectando la médula a nivel cervical en un paciente con malformación de  Chiari tipo I.


Las neuropatías craneales pueden manifestarse con ronquera, parálisis de cuerdas vocales, disartria, debilidad palatina, acalasia faríngea, broncoaspiración recurrente, atrofia lingual, nistagmo. Menos comunes son la oscilopsia, hipoacusia sensorial, bradicardia sinusal, síncope e hipo. Otras manifestaciones de compresión del tronco incluyen apnea central del sueño, debilidad por compromiso de tractos motores largos, espasticidad. Hiperreflexia y Babinski. Los síntomas cerebelosos incluyen nistagmo, palabra escandida, ataxia de tronco. 
La escoliosises usualmente debida a siringomielia espinal espástica. La siringomielia puede extenderse hasta elbulbo (siringobulbia). Los estados presiringomiélicos son condiciones potencialmente reversibles caracterizado por edema debidoa obstrucción del flujo del LCR. Esto ocurre más a menudo en laregión cervical y es detectado por RMN apareciendo como similares a los quistes siringomiélicos en T2 pero sin cavitación en T1.
La cefalea o el dolor por irritación meníngea es la forma de presentación más común en pacientes con malformación de Chiari tipo I. Eldolor es usualmente occipital o nucal.El dolor es típicamente paroxístico  pero puede ser sordo y persistente. Tanto el dolor como la sensación de mareo son exacerbados por la actividad física o por la maniobra de Valsalva (tos, risa o estornudo).  Así, los pacientes con Chiari I pueden presentarse por cefalea tusígena  y la entidad debe ser considerada como etiología potencial. Se cree que lamaniobra de Valsalva exacerba el dolor por impactación de las amígdalas cerebelosas en elagujero magno.

DIAGNÓSTICO.
En general el diagnóstico de la malformación de Chiari descansa en la neuroanatomía y las imágenes. La RMN es el gold standard  con cortes sagitales,coronales y axiales en secuencias T1 y T2.  Si no hay disponibilidad se puede hacer TC.
Hay acuerdo general que el diagnóstico de malformación de Chiari I en adolescentes y adultos se hace ciando en la RMN una o ambas amígdalas cerebelosas se desplazan  5 mm o más por debajo del agujero magno. Entre 3 y 5 mm también se considera malformación de Chiari I si se asocia a otros hallazgos como alteraciones de la charnela occípito cervical o siringomielia. 


TRATAMIENTO
El manejo de lamalformación de Chiari I que están asintomáticos y que no tienen siringomielia puede ser el manejo conservador con vigilancia periódica con RMN (cada 6 meses al principio y cada año después). Sin embargo hay quienes apoyan la cirugía profiláctica para evitar la complicación con siringomielia.
Para los pacientes sintomáticos, para los que tienen neuropatía craneal siringomielia, mielopatía, síntomas cerebelosos, severo dolor cervical u occipital está indicada la cirugía descompresiva. 
La RMN de contraste de fase buscando la alteración de la circulación del LCR a través del agujero magno que brinda información para seleccionar pacientes para la descompresión quirúrgica. En la actualidad se han desarrollado nuevas secuencias de RMN como esta que se llama  secuencia en contraste de fase, que son estudios dinámicos, que anulan el tejido estático a la vez que realzan las estructuras en movimiento como son la sangre y el LCR. La secuencia de RMN en contraste de fase aporta dos herramientas muy útiles para el estudio del LCR: el estudio cualitativo y el estudio cuantitativo. El estudio cualitativo permite evaluar el movimiento del LCR mediante técnica de Cine RMN. La secuencia en contraste de fase adquiere varias imágenes del LCR durante el ciclo cardiaco. Si estas imágenes se visualizan secuencialmente, permitirán observar el paso del LCR a través de los distintos estrechos y agujeros de los ventrículos y en el espacio subaracnoideo. Por su parte, el estudio cuantitativo permite estudiar diferentes parámetros del movimiento del LCR en un lugar determinado. Así se puede calcular la velocidad, el flujo y el volumen de líquido que circula, por ejemplo, en el acueducto.
Algunos indican RMN con contraste de fase en todos los pacientes con Chiari I, y de acuerdo al resultado, a aquellos pacientes sin obstrucción al flujo del LCR podrían ser sometidos a una estrategia de observación solamente y aquellos con obstrucción, estén o no sintomáticos son pasibles de cirugía. 
En algunos pacientes con Chiari I y apnea de sueño está indicad la polisomnografía para discriminar entre causas centrales o periféricas de la misma. La apnea central de sueño en estos pacientes es sugestivas de disfunción del tronco cerebral  y es una indicación de cirugía descompresiva urgente.
La cirugía de la malformación de Chiari consiste en la descompresión de la unión cráneo cervical y restauración del flujo del LCR en la región del agujero magno. El procedimiento más utilizado  es la descompresión posterior vía craniectomía suboccipital con o sin duraplastia. Otros procedimientos incluyen la descompresión del agujero magno por odontiectomía y shunt.

PRONÓSTICO

El curso clínico del Chiari I es impredecible. Algunos pacientes permanecen asintomáticos  e incluso algunos presentan  resolución espontánea  del desplazamiento de las amígdalas cerebelosas y de la siringomielia. Otros tienen aumento progresivo de los quistes siringomiélicos. La enfermedad de larga data puede evolucionar a la cicatrización fibrótica con limitación de los beneficios especialmente de los quistes de más de tres años. 


CONCLUSIONES DEL CASO.
Presentamos un paciente con malformación de Chiari tipo I que se manifestó desde hace no menos de 10 años con alteraciones de la marcha los cuales han sido progresivos. Ellos consisten en una marcha espástica con algunas alteraciones del equilibrio. Asimismo el paciente presenta algunos elementos de disfunción cerebelosa  como son la disartria y el nistagmo. Actualmente se le aconsejó cirugía descompresiva del agujero magno previo estudio de RMN de contraste de fase para ver determinar lapresencia o no de obstrcción a la circulación del líquido cefalorraquídeo a nivel del agujero magno.
  

MUJER DE 22 AÑOS CON QUISTE HIDATÍDICO PULMONAR.

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Hospital "Ángel Pintos" de Azul
Paciente femenina de 22 años que hace una semana comenzó con odinofagia y fiebre. Consulta medicándosela con amoxicilina e ibuprofeno. Desde entonces ha tenido fiebre (no se ha registrado la temperatura pero se ha sentido con sensación febrl). Ayer presentó dolor de tipo puntada en región anterior de hemitórax izquierdo acompañado de disnea  por lo que consulta a la guardia del hospital donde le sacan una Rx de tórax y la dejan internada
Antecedentes:
Salpingectomía hace varios años por anexitis.
Tabaquismo importante desde los 13 años

GR:  3840.000 GB: 15300. Hto 33%. 70% NEUTRÓFILOS.
TGO: 26. TGP:  52.FAL: 356.
Resto del hepatograma normal.








Se solicita ecografía de tórax:












Ecografía de tórax: imagen anecoica en campo pulmonar medio y superior de bordes lisos con algunas imágenes en su interior y esfacelación de su cápsula. Se observa nivel que corresponderíaa sedimento.

Conclusión: estudio compatible con quiste hidatídico Gharbi I.


Se solicita TC.

































































Informe de la TC 









Se decide cirugía
Se constata quiste hidatídico pulmón izquierdo intercisural+ LSI. Se realiza parto del quiste , resección de periquística (resección parcial). Hemostasia, prueba neumática. Cierre de toracotomía. 


















































MUJER DE 88 AÑOS CON ÍLEO BILIAR.

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Hospital"Ángel Pintos" de Azul

Paciente femenina de 88 años que se interna por dolor abdominal periumbilical y vómitos.

MOTIVO DE INTERNACIÓN: dolor abdominal, vómitos.
Enfermedad actual: hace 48 horas comenzó con dolor en región periumbilical de gran intensidad acompañado de vómitos alimenticios inicialmente y posteriormente biliosos. El dolor es continuo pero con exacerbaciones cólicas. Se interna, se suspende toda ingesta por boca y se coloca hidratación parenteral. Se solicitan análisis y Rx de abdomen y tórax.


ANTECEDENTES PERSONALES, FAMILIARES  Y PATOLÓGICOS:  HTA,  colico renal, artrosis generlizada, osteoporosis, mielopatia cervicoartrosica,  angiomiolipoma hepatico en RMN, fibroma calcificado. Litiasis vesicular asintomática. CPRE con papilotomía endoscópica año 2008 por litiasis coledociana. Se extrajo litiasis de 1 cm de la vía biliar.  No presenta cirugías abdominales previas.
Padre fallecido de IAM a los 62 años. Hijos 2 v y s. Tios paternos fallecidos a los 56 años de IAM. Hermanos 3. Uno con by pass coronario, una hermana cardiopatia isquemica.

EXAMEN FÍSICO:
Paciente en buen estado general, menos dolorida TA 145/90 mm Hg, frecuencia cardíaca 100 por minuto. Frecuencia respiratoria 20 por minuto.
Diuresis conservada.
Abdomen sin cicatrices,no se observan hernias ni eventraciones,  distendido en forma generalizada, simétrico, doloroso a la palpación profunda en forma generalizada, no impresiona reacción peritoneal. Ruidos hidroaéreos conservados a disminuidos. Catarsis positiva.
Cardiovascular:soplo de esclerosis valvular aórtica irradiado al cuello, segundo ruido aumentado de intensidad. No hay galope, no tercero ni cuarto ruidos.
Aparato respiratorio: buena entrada de aire en ambos campos pulmonares, escasos rales secos en ambas bases.
Laboratorio: 13300 GB 80% neutrófilos.Transaminasas x 2. FAL x 2. Función hepática y renal normales.
Rx distensión de delgado que impresiona como íleo sub obstructivo.
Se colocó sónda nasogástrica.
Al día siguiente paciente mejorada sintomáticamente. Abdomen signológicamente mejor. Radiología igual. No se pudo realizar TC por problemas técnicos delequipo.


Laboratorio: GB 14.500. Se decide laparotomía exploratoria.











Hallazgo operatorio, subobstrucción intestinal a la altura de íleon por litiasis biliar.
Se realiza enterolitotomías con extracción de un cálculo de 3 cm de diámetro y  enterorrafia con buena evolución post operatoria






Diagnóstico definitivo: íleobiliar.



ÍLEO BILIAR


 Uno a 2% de las obstrucciones de delgado son causadas por íleo biliar. Afecta generalmente a pacientes añosos, resultando de una erosión y fistulización entre el tracto biliar y digestivo. La mayoría de las veces la comunicación entre el árbol biliar y el tubo digestivo es a través de una fístula colecistoduodenal. Otros posibles sitios de entrada incluyen el estómago, el yeyuno, el íleon y el colon. A veces los cálculos pueden fistulizar al duodeno a través de un conducto biliar distal común.

Los signos radiográficos incluyen cálculos en sitios alejados del árbol biliar, neumobilia y obstrucción intestinal. Sólo en  la mitad de los pacientes se arriba al diagnóstico antes de la cirugía. El sitio más común de obstrucción es el íleon terminal, y los cálculos generalmente tienen 2,5 cm o más de diámetro.

La tasa de mortalidad en estos pacientes es de 12 a 27% según las series.

El tratamiento quirúrgico consiste en enterolitotomía sola (abierta o laparoscópica) durante el episodio agudo. La colecistectomía y la resolución de la fístula debe posponerse para más adelante, cuando el paciente se recupere del episodio agudo de obstrucción intestinal aunque en pacientes jóvenes de bajo riesgo puede hacerse todo en un tiempo.



La tríada de Rigler (pneumobilia, obstrucción del intestino delgado, y un cálculo que generalmente se observa en la fosa iliaca derecha), se considera altamente sugestiva de íleo biliar.

La evidencia actual indica que la  tríada de Rigler se puede ver en la radiografía de abdomen en el 15% de los pacientes, el 11% en la ecografía, y con la tomografía computarizada (TC) se demuestra la tríada en el 78% de los casos.

Otros estudios apoyan el papel de la TC en la evaluación de los pacientes con íleo biliar, poniendo de relieve su capacidad para detectar el tamaño, la ubicación y el número exacto de los cálculos ectópicos.

Sin embargo, es importante señalar que las imágenes avanzadas (como las de la TC) no deben retrasar el tratamiento quirúrgico de urgencia de los pacientes con evidencia de perforación intestinal y peritonitis.

SIGNO DE KUSSMAUL EN TAPONAMIENTO CARDÍACO

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Aumento paradojal de laingurgitación yugular en la inspiración en una paciente con derrame pericárdico severo con signos de taponamiento y parálisis del recurrente (disfonía asociada). La paciente presenta además pulso paradojal. 

TAILANDIA ALL INCLUSIVE...

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En este ejercicio clínico se presenta un caso que es discutido por un médico internista al que se le van proporcionando datos de la historia clínica en forma secuencial, y este analiza el cuadro a la luz de los nuevos elementos, de una manera análoga al proceso diagnóstico en la práctica real de la medicina.


Un hombre de 27 años de edad fue hospitalizado a fines de septiembre de 1998 por un cuadro de  tres días de evolución de febrícula y malestar general acompañada de tos no productiva, sin disnea, escalofríos, disuria, o diarrea. También presentaba una erupción pruriginosa que cubría  la región glútea. La erupción y el prurito habían comenzado alrededor de dos semanas antes, durante la última semana de un mes de vacaciones en una playa de Tailandia, y había aumentado en intensidad a pesar del tratamiento tópico con ácido fusídico en crema y loción de calamina. Dos días antes de la internación el paciente consultó a un dermatólogo en Israel quien le diagnosticó foliculitis y le prescribió 2 g de cefalexina por día. Un día antes de su ingreso, una Rx de tórax obtenida debido a la tos mostró un infiltrado reticulonodular en ambos campos pulmonares inferiores y sobre el lóbulo medio derecho, con leve agrandamiento de ambas regiones hiliares. Se inició tratamiento con 300 mg de roxitromicina diaria.
Antes de su viaje a Tailandia, el paciente se había aplicado todas las vacunas recomendadas, pero no había recibido la profilaxis recomendada contra la malaria. Mientras estuvo  allí, tuvo relaciones sexuales con varias parejas. Una novia que estaba con él en Tailandia refirió que tenía una erupción cutánea pruriginosa similar pero sin fiebre ni tos. La historia médica del paciente incluía  reflujo vesicoureteral leve, sin episodios de infección del tracto urinario, y  cirugía de varicocele izquierdo así como una cirugía por desviación del tabique nasal.
El paciente se encontraba en buen estado general, sin disnea. Su temperatura oral fue de 37,6 ° C, la presión arterial era 120/80 mmHg, y el pulso de 80 latidos por minuto  regular. No había sensibilidad en los senos paranasales, y no se observaron anormalidades en la garganta, nariz o los oídos. Los ruidos cardíacos eran normales, sin soplos, y los pulmones estaban claros. Ni el hígado ni del bazo eran palpables, y no había linfadenopatía. Un erupción papular roja y difusa se observó en toda la región de los glúteos (Figura 1).






Figura . Rash en region glútea del paciente.



A primera vista, la fiebre leve y  la tos, dada su corta duración, se podría pensar que son debidas a una infección del tracto respiratorio superior. Dado los hallazgos anormales en la radiografía de tórax, me gustaría obtener un recuento de glóbulos blancos y repetir la radiografía de tórax para detectar si existe neumonía. Además, la historia de reflujo vesicoureteral y cirugía nasal septum, a pesar de la ausencia de síntomas indicativos de las vías urinarias o infección en los senos, hay que considerar estos trastornos como una posible causa de la fiebre.
También me pregunto si la erupción de los glúteos y las vacaciones en Tailandia de alguna forma puede estar relacionados con la fiebre y la enfermedad pulmonar. El hecho de que una erupción similar observada  en la novia del paciente sugiere una causa infecciosa. Aunque la foliculitis pueden causar fiebre, no explica los síntomas pulmonares. Por otra parte, la duración de dos semanas de la erupción antes de la aparición de la fiebre es evidencia en contra de una asociación causal con la enfermedad pulmonar. Sería importante  un dermatólogo para hacer un diagnóstico definitivo de la erupción.


La eritrosedimentación era de 28 mm por hora. El nivel de hemoglobina de 17 g por decilitro, con un hematocrito del 52,8 por ciento; el recuento de glóbulos blancos era 13.200 por milímetro cúbico, con formas 72 por ciento segmentados, el 15 por ciento linfocitos, monocitos, un 9 por ciento y 4 por ciento de los eosinófilos; y el recuento de plaquetas fue de 267.000 por milímetro cúbico. Los resultados de las pruebas de función hepática y renal, la medición de calcio en el suero, y el análisis de orina fueron normales. Cultivos de orina, sangre y esputo fueron negativos. La saturación de oxígeno era de 96 por ciento, mientras el paciente respiraba aire ambiente. Una radiografía de tórax mostró infiltrados intersticiales en la base de ambos pulmones y linfadenopatía hiliar leve (Figura 2). La ecografía abdominal no reveló anormalidades.

El consultor dermatólogo pensó que la erupción era consistente con la presencia de dermatitis papular, foliculitis, y posiblemente dermatitis de contacto. Se realizó una biopsia de una lesión glútea. Un consultor en enfermedades infecciosas estuvo de acuerdo con la evaluación del dermatólogo y planteó la posibilidad de erupción de seabather (una erupción que se produce en las zonas del cuerpo cubiertas por un traje de baño) 1 como una entidad separada de la enfermedad pulmonar.





Figura 2. Rx de tórax obtenida el día de la internación que muestra infiltrados intersticiales bilaterales y linfadenopatía hiliar leve.




Parece en este punto que los síntomas del paciente son principalmente pulmonares. Con respecto a la leucocitosis y los infiltrados intersticiales, ni un diagnóstico de infección del tracto respiratorio superior ni una neumonía neumocóccica parecen encajar. Sin embargo, otras causas infecciosas se deben investigar. Dada la discrepancia entre los resultados de la auscultación pulmonar normales y los hallazgos radiológicos prominentes,  neumonía atípica es una posibilidad. Me gustaría realizar pruebas serológicas para clamidia y micoplasma. Con respecto a la estadía  del paciente en Tailandia, la posibilidad de infección con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) complicado por una infección oportunista con Pneumocystis carinii o la tuberculosis deben ser consideradas.
Neumonía eosinofílica puede descartarse sobre la base de los hallazgos radiológicos y el hecho de que los síntomas pulmonares ocurrieron antes de comenzar  la terapia con cefalexina (que podría causar eosinofilia). También, con respecto a los hallazgos de la piel y pulmonares, la posibilidad de una infección causada por un parásito que penetre la piel en la región glútea y migre a los pulmones no debe pasarse por alto. La ausencia de eosinofilia no admite la posibilidad de este diagnóstico, pero los resultados de la biopsia de la piel pueden ser útiles. Otras posibilidades incluyen causas no infecciosas como la sarcoidosis y el linfoma, que puede causar fiebre, linfadenopatía hiliar, y rash. Una tomografía computarizada (TC) de tórax puede ser útil.


El paciente continuó teniendo una tos no productiva acompañada de malestar general y fiebre (temperatura de hasta 38,2 ° C). Se continuó el tratamiento con roxitromicina, y se inició tratamiento con pomada de propionato de clobetasol. Una tomografía computarizada de los pulmones mostraron infiltrados intersticiales bilaterales y leves, probablemente reactivos, linfadenopatía hiliar, en consonancia con la presencia de neumonía intersticial. Una prueba de anticuerpos del VIH y una prueba de la tuberculina con derivado proteico purificado fueron negativos. El nivel de la enzima convertidora de angiotensina en suero fue normal. Las pruebas de función pulmonar mostraron obstrucción leve  reversible con broncodilatadores, sin restricción ni alteraciones de la  difusión. La biopsia de piel reveló infiltrado linfocitario perivascular leve con algunos eosinófilos en la dermis sin parásitos ni huevos,  hallazgos consistentes con el diagnóstico de dermatitis de contacto. Los exámenes del suero eran fuertemente positivos para anticuerpos IgM contra Mycoplasma pneumoniae, según lo determinado por inmunoensayo ligado a enzimas, y fueron negativos para Chlamydia psittaci y C. pneumoniae. La prueba para crioaglutininas fue negativa.


El diagnóstico más lógico es neumonía por micoplasma. Febrícula, malestar general y tos seca combinada con los hallazgos físicos mínimos, pero numerosos hallazgos radiológicos son consistentes con la presencia de esta enfermedad. El compromiso pulmonar  intersticial con linfadenopatía hiliar también son característicos. La neumonía por micoplasma es más frecuente en niños y adultos jóvenes y representa el 15 a 20 por ciento de todos los casos de neumonía en este grupo de edad. Aunque tales enfermedades epidémicas tienen una mayor tendencia a ocurrir durante el otoño (aproximadamente el tiempo de la enfermedad de este paciente) y principios del invierno, pueden de hecho aparecer en cualquier momento. Los resultados fuertemente positivos serológicos IgM proporcionan apoyo a este diagnóstico, y la prueba por crioaglutininas negativa no lo descarta, porque la prueba es negativa hasta en un 20 por ciento de los pacientes afectados y los niveles  pico sólo se ven durante la segunda y tercera semanas de la enfermedad.
Todavía me pregunto, sin embargo, si la erupción está vinculada a la neumonía. Una variedad de condiciones dermatológicas transitorias han sido reportados en relación con la infección por M. pneumoniae. Una erupción maculopapular anodina e incluso a veces eritema multiforme y síndrome de Stevens-Johnson se han descrito hasta en un 7 por ciento de los pacientes afectados, (2) pero el curso de la enfermedad de este paciente y el tipo de erupción que tenía son evidencias en contra de esta relación. Aunque la neumonía por micoplasma es una enfermedad autolimitada, la terapia con antibióticos puede acortar considerablemente su duración. Me gustaría si se continuó terapia antibiótica.


La dosis diaria de roxitromicina se incrementó de 300 mg a 600 mg; Sin embargo, no hubo mejoría en la fiebre, malestar general, tos, y el rash. El cuarto día de hospitalización el recuento de glóbulos blancos del paciente fue de 14.400 por milímetro cúbico, con 68 por ciento segmentados, 11 por ciento linfocitos, monocitos 11 por ciento y 10 por ciento de eosinófilos. Durante los próximos días, el recuento de glóbulos blancos aumentó a 19.200 por milímetro cúbico, con 36 por ciento de eosinófilos (recuento total de eosinófilos, 6900 por milímetro cúbico). Una Rx  de tórax mostró un aumento de los infiltrados pulmonares.


La leucocitosis, especialmente el aumento en el recuento de eosinófilos, sería muy inusual en un paciente con neumonía por micoplasma. El diagnóstico diferencial de la eosinofilia incluye infecciones, alergias, inflamaciones, y endocrinológica y entidades neoplásicas; Sin embargo, al centrarse en los resultados en este paciente, puede ser reducido en gran medida. La causa más común de eosinofilia es una reacción alérgica a los fármacos. Aunque varios antibióticos, tales como penicilina, sulfonamidas y cefalosporinas, han sido implicados en la eosinofilia y neumonía eosinofílica, roxitromicina no ha sido descrita. El síndrome de Löeffler, la granulomatosis alérgica que caracteriza al síndrome de Churg-Strauss, la aspergilosis broncopulmonar alérgica y síndrome eosinofilia-mialgia pueden causar neumonía eosinofílica. Sin embargo, la combinación de la estancia del paciente en Tailandia, la aparición de la erupción papulopruriginosa, el hecho de que  su novia también tenía las mismas lesiones y el desarrollo de eosinofilia marcada sugiere una neumonía tropical aguda causada por una infección parasitaria. Filariasis, que afecta a unos 250 millones de personas en todo el mundo, sería la infección más probable, pero estas manifestaciones también puede ser causada por Ascaris, Ancylostoma, Toxocara y strongyloides. (3-5) Paragonimiasis, una enfermedad común en el Lejano Oriente y África, puede también causar infiltrados pulmonares y eosinofilia, pero no daría cuenta de la erupción en discussion. (6)
Dado que las opciones terapéuticas para estas posibilidades van desde fármacos antiparasitarios específicos a los glucocorticoides, en el caso del síndrome de Löffler u otros síndromes de hipersensibilidad, un diagnóstico definitivo es obligatorio. Nuevo examen del esputo, así como el examen de las heces en busca de parásitos es menos invasiva que la broncoscopia  y  vale la pena probar inicialmente. Puesto que tales infecciones parasitarias son muy poco comunes en Israel, me gustaría que profesionales  con experiencia en buscar parásitos en muestras de heces y esputo y  reexaminar las muestras de la biopsia de piel. Si estos resultados no son útiles, indicaría una broncoscopia.



Cuál es el diagnóstico?


El nivel de IgE en suero fue de más de 1.000 UI por mililitro. Un nuevo examen de la muestra de piel de la biopsia no reveló parásitos; tampoco el examen de heces. El examen del esputo en un laboratorio central reveló una larva (figura 3), identificado como un anquilostoma (Ancylostoma duodenale).





Figura 3.
Larvas de Ancylostoma duodenale en el esputo del paciente. ( x 88).



La anquilostomiasis parece ser el diagnóstico más probable. Alrededor del 25 por ciento de las personas en el mundo están infectados por el anquilostoma, aunque la mayoría de estas infecciones son asintomáticas. El ancilostoma adulto produce miles de huevos que se convierten en larvas en el suelo. Lo más probable, durante la estancia del paciente en Tailandia, donde la anquilostomiasis es común, contrajo la infección mientras está sentado en un lugar muy contaminado por las larvas, cuya penetración en la piel causó la erupción pruriginosa glútea. Después de penetrar la piel, las larvas migraron a través de vías hematógena y linfáticas a los pulmones, causando neumonía eosinofílica aproximadamente dos semanas más tarde. El resultado positivo de la prueba de anticuerpos IgM contra la neumonía por micoplasma probablemente fue un falso positivo. Dado que lleva por lo menos cinco o seis semanas para que el parásito de alcanzar el intestino delgado, no se encontraron  huevos  en las heces del paciente. 



Se administró tratamiento con 400 mg de albendazol  diariamente durante tres días. La fiebre y los síntomas respiratorios se resolvieron, y la erupción mejoró lentamente. Aproximadamente 10 días después, el recuento de glóbulos blancos era de 6000 por milímetro cúbico, con 14 por ciento de eosinófilos. Una Rx x de tórax mostró casi completa desaparición de los infiltrados pulmonares. La novia del paciente, que no tenía fiebre o síntomas respiratorios, fue tratada posteriormente de manera similar, con la consiguiente desaparición de su erupción.


COMENTARIO
El pensamiento clínico es un proceso de múltiples pasos. Las pruebas de laboratorio ayudan al clínico a seleccionar la causa más probable de diagnóstico  y preferentemente  el único. El diagnóstico puede considerarse definitivo sólo después que se produce la respuesta esperada al tratamiento. La clave para el buen pensamiento clínico es mantener una mente abierta, no comprometerse con un solo diagnóstico, y la elaboración de nuevas hipótesis con la información complementaria.
El valor de una detallada historia clínica es fundamental. A pesar de la posibilidad diagnóstica de neumonía intersticial en el paciente bajo discusión, la historia de dos semanas de rash pruriginoso después de una reciente estancia del paciente en Tailandia, y la aparición de una erupción similar en su novia alentaron las sospechas del médico que discutió el caso de que otro proceso infeccioso fuera el  realmente responsable .
El diagnóstico inicial de infección por M. pneumoniae parecía razonable debido a la alta prevalencia de esta enfermedad, los síntomas del paciente, y la prueba fuertemente positiva para anticuerpos IgM. Los niveles de anticuerpo específico IgM aumentan poco después de la aparición de la neumonía por micoplasma y disminuyen de forma relativamente rápida a partir de entonces. La sensibilidad de este ensayo es de 80 a 90 por ciento, y la especificidad es 87-94 ciento.(7) Aunque un alto nivel de anticuerpos indica la presencia de enfermedad activa, algunos factores tales como la reactividad cruzada antigénica y la medición de los niveles séricos demasiado pronto puede conducir a resultados positivos falsos y negativos falsos, respectivamente.
Aunque el paciente fue tratado por infección por M. pneumoniae, su condición empeoró y desarrolló eosinofilia. La posibilidad de que la eosinofilia fuera un efecto adverso del tratamiento antibiótico fue rechazada sobre la base de la falta de evidencia de tal asociación y la exacerbación de la enfermedad.
Los médicos a veces prefieren los procedimientos de diagnóstico sofisticados a los simples. La fibrobroncoscopia se utiliza habitualmente para evaluar los casos de neumonía complicada o progresiva. Tiene un alto rendimiento diagnóstico, pero es un procedimiento invasivo. Aunque el examen de una muestra de esputo para identificar parásitos es sólo de vez en cuando de diagnóstico, el médico que analizó el caso prefirió comenzar con esta prueba no invasiva. Los resultados del examen de esputo establecieron el diagnóstico probable. La respuesta del paciente al tratamiento antiparasitario (y la de su novia también) confirmó el diagnóstico.
La prevalencia de la anquilostomiasis es alto en Tailandia y muchos otros lugares en todo el mundo (3) la  mayoría de las infecciones son asintomáticas, aunque se han descrito tanto síntomas agudos (neumonía, tos leve y transitoria, y erupción) como síntomas crónicos (anemia y efectos gastrointestinales). Después de penetrar la piel, las larvas eventualmente llegan a los capilares pulmonares y sacos alveolares y luego migran a los bronquios y la tráquea; luego son tragadas y migran a  estómago e intestinos. Se adhieren a la mucosa intestinal y maduran sexualmente. La hembra comienza a depositar los huevos  algunas semanas después de la infección inicial. La actividad de las larvas en los pulmones por lo general no produce síntomas, pero varios síntomas respiratorios, como tos, disnea y hemoptisis,  pueden aparecer. No pocas veces, el diagnóstico definitivo puede ser difícil de establecer en la etapa temprana de la infección a menos que las larvas se identifiquen de manera fortuita en una muestra de esputo. Una vez que los ancilostomas maduran en el intestino delgado, los huevos se pueden encontrar en la materia fecal.(8)




CONCLUSIONES DEL CASO
Febrícula, malestar general y tos seca son síntomas inespecíficos ya que pueden ser expresión de un sinnúmero de causas desde un estado gripal en sus comienzos hasta un linfoma con afectación de ganglios mediastinales y compresión bronquial, pasando por un derrame pleural como expresión de una neoplasia de pulmón periférica. La presencia de una erupción, si es que uno decide que forma parte del cuadro (quizás este punto es el más difícil de establecer), acota enormemente la lista de diagnósticos diferenciales. Si a eso le sumamos la presencia de un infiltrado pulmonar intersticial y una eosinofilia creciente, el reconocimiento de un patrón como correspondiente a infiltrado pulmoar eosinofílico y más específicamente síndrome de Loeffler surgen espontáneamente sin demasiado esfuerzo.    Si bien es cierto que en la primera determinación de laboratorio la eosinofilia no fue muy importante (alrededor de 500 en cifras absolutas), la presencia de esos valores aleja francamente una causa bacteriana de fiebre o de tos y acerca mucho una causa parasitaria como finalmente tenía este paciente.  Tampoco la radiografía de tórax inicial fue orientadora ya que la imagen de adenomegalia hiliar bilateral leve es más característica de sarcoidosis que de cualquier enfermedad infecciosa. En la segunda y sobre todo en la tercera determinación la eosinofilia absoluta fue en franco aumento hasta alcanzar casi los 7000 eosinófilos/mm3 y a solicitar la investigación de larvas en esputo que fue lo que finalmente puso el sello diagnóstico definitivo de síndrome de Loeffler por ancylostomiasis. Se podría decir que la eosinofilia fue el dato fuerte y dominante en el cuadro de este paciente. Cuando el clínico se enfrenta a un caso de eosinofilia es bueno categorizarla en tres tipos: leve, entre 500 y 1500 eosinófilos/mm3, moderada, entre 1500 y 5000/mm3 y severa, más de 5000/mm3. Enfermedades pulmonares eosinofìlicas, es un término que se refiere a un grupo de entidades caracterizadas por tres elementos: 1) eosinofilias en sangre periférica con infiltrados pulmonares en las imágenes, 2) eosinofilia en el parénquima pulmonar demostrado por biopsia transbronquial o a cielo abierto, y 3) un recuento de eosinófilos mayor de 10% en el BAL. Sin embargo hay que hacer la salvedad que la eosinofilia periférica no está siempre presente, y los infiltrados pulmonares en las imágenes no siempre son visibles en la Rx de tórax.
Mencionaremos las causas más frecuentes de enfermedades pulmonares eosinofílicas de la práctica clínica diaria.

INFECCIONES POR HELMINTOS
Probablemente la MIGRACIÓN PULMONAR DE LAS LARVAS DE ALGUNOS HELMINTOS (áscaris, Ancylostoma duodenale, Necator americanus, y Strongyloides stercoralis), sea la causa más frecuente de infiltrados pulmonares con eosinofilia  y en tal caso se lo llama al cuadro síndrome de Löefler. Estos parásitos presentan en sus ciclos vitales una etapa en la que las larvas alcanzan los pulmones vía sanguínea, penetran en los alvéolos, maduran y ascienden por la vía aérea antes de descender hasta el intestino delgado. Los áscaris son los que más frecuentemente producen estos infiltrados. Los pacientes a menudo se quejan de tos seca y malestar quemante subesternal que se agrava con la tos o la respiración profunda. Puede haber disnea, sibilancias, fiebre y esputo con estrías de sangre que puede contener cristales de Charcot-Leyden derivados de los eosinófilos (Figura 1a).








Figura 1a Cristales de Charcot-Leyden en el esputo de un paciente con ascaridiasis. Estos cristales que son encontrados en todas las infecciones parasitarias eosinofílicas consisten en lisofosfolipasa, una enzima derivada de los eosinófilos.



La radiografía de tórax puede mostrar opacidades que van desde algunos milímetros hasta varios centímetros en ambos campos pulmonares, migratorias y pueden hacerse confluentes en áreas perihiliares. Figura 2.




 
Figura 2a


Figura 3a



Figura 4 a.



Figura 5a



Figura 2 a 3 a,4 a y 5 a. Síndrome de Löffler en un paciente coreano de 29 años que había emigrado a los EE UU. Tenía eosinofilia en el frotis de sangre periférica. Las radiografías seriadas (ordenadas de A a D), en un período de 12 días muestran un patrón bien definido, transitorio, asimétrico con áreas de infiltrado o consolidación con reacción pleural asociada. Nótese la fugacidad de los infiltrados que son característicos del síndrome de Löffler



 Curan espontáneamente en varias semanas Generalmente la eosinofilia supera el 10%. El diagnóstico definitivo de ascaridiasis requiere detección de larvas de áscaris en las secreciones respiratorias. El examen de materia fecal es generalmente negativo en el momento de los síntomas pulmonares y no es útil en el diagnóstico de síndrome de Löeffler.No se requiere tratamiento específico aunque por supuesto se deberá dar terapia antihelmíntica para la infección intestinal después de la resolución de los síntomas pulmonares

Otra forma de eosinofilia pulmonar relacionada a helmintos es la INVASIÓN PARENQUIMATOSA  PULMONAR. Existen helmintos que pueden invadir directamente el parénquima pulmonar y producir manifestaciones prolongadas en vez de las fugaces manifestaciones del síndrome de  Löeffler de los parásitos que pasan brevemente por los pulmones en su ruta hacia el intestino. Estos parásitos son las duelas pulmonares del Paragonimus (trematodos), y los cestodos Echinococcus, y Tenia solium.
Como ejemplo de este tipo de infección, Paragonimus puede invadir los pulmones y producir derrame pleural o infiltrados pulmonares ricos en eosinófilos. Pueden ocasionar hemoptisis recurrente o producción de esputo de color chocolate producto de la mezcla de sangre, células inflamatorias y huevos de Paragonimus. Hay importante eosinofilia periférica en los estadios iniciales de la infección pero se hace mínima con la enfermedad ya establecida. La investigación por ELISA o inmunoblot de anticuerpos contra Paragonimus es más útil cuanto más tardía en la enfermedad  es la solicitud de estos análisis. Las lesiones de Paragonimiasis son típicamente nodulares con áreas adyacentes de vidrio esmerilado (Figura 6a).







Fig 6a. Paragonimiasis
A y B Rx de tórax y TC al ingreso. A múltiples opacidades en pulmón derecho (flecha).
B Múltiples nódulos con áreas adyacentes de densidades en vidrio esmerilado sugestivos de causas hemorrágicas o metastásicas que se observan en ambos pulmones(flechas).
C. PET-FDG que muestra hipercaptación de FDG (Flechas).




Las lesiones son periféricas y más comunes en los campos pulmonares medios e inferiores, mientras que la tuberculosis que es un diagnóstico diferencial más probablemente causa cavitaciones apicales. El diagnóstico de paragonimiasis  es típicamente hecho por el hallazgo de huevos en el esputo o del lavado broncoalveolar (BAL) (Figura 7a), o por un ELISA positivo,





Figura 7 a. (A, B) Huevos de P. westermani en una muestra húmeda sin tinción.



La ruptura de un quiste hidatídico (equinococosis) o cisticercosis puede también causar eosinofilia pulmonar. Los anticuerpos contra equinococcus pueden ser detectados por ELISA, y para cisticercosis.

Otra forma en que los parásitos pueden afectar al pulmón en el contexto de eosinofilia es la SIEMBRA HEMATÓGENA MASIVA. La siembra hematógena masiva de larvas o huevos puede conducir a depósitos pulmonares de parásitos y a respuesta pulmonar eosinofílica. Este tipo de diseminación no es esencial para el ciclo de vida del parásito. Un tratamiento previo con corticosteroides puede ser un factor de riesgo. Los síntomas pulmonares que pueden ocasionar son: tos, sibilancias, y disnea asociado a eosinofilia. Este cuadro puede verse en áscaris, toxocara canis, toxocara catis, que típicamente causan larva migrans visceral y otros gusanos que causan larva cutánea migrans, pueden también diseminarse por vía hematógena a los pulmones cuando un gran número de huevos o larvas son liberados a la sangre. También pasa esto con Trichinella cuando sus larvas se diseminan a la sangre. La trichinelosis debe ser considerada en pacientes con edema periorbitario, miositis y eosinofilia. La esquistosomiasis  puede asociarse a eosinofilia pulmonar en dos contextos. Los esquistosomas adultos pueden diseminarse al pulmón vía vasos colaterales siguiendo a la terapia antihelmíntica particularmente en pacientes con hipertensión portal. Además, la neumonía eosinofílica puede ocurrir en la fase temprana, tres a seis semanas después de la infección por esquistosomas; los pacientes suelen experimentar tos y dificultad respiratoria, y la TC de tórax puede detectar múltiples pequeños nódulos y menos comúnmente opacidades en vidrio esmerilado. El síndrome de hiperinfección y diseminación de huevos y larvas de strongyloides pueden producir invasión de un número de órganos (incluyendo los pulmones), aparte de la migración transpulmonar requerido para el ciclo de todo helminto. La hiperinfección se asocia típicamente con inmunosupresión aunque puede ocurrir en ausencia de inmunosupresión demostrable. Típicamente los pacientes están disneicos, con sibilancias tos y fiebre. La radiografía de tórax usualmente muestra opacidades en vidrio esmerilado. El diagnóstico se hace por la demostración de huevos en el BAL, aunque los tests serológicos son también positivos (ELISA), y la materia fecal es negativa.

Finalmente la última forma de eosinofilia pulmonar relacionada con parásitos es la EOSINOFILIA TROPICAL, que es el resultado de una respuesta inmune diferenciada a los estadios vasculares de la filaria linfática Wuchereria bancrofti, y menos comúnmente Brugia malayi. . Los síntomas típicos son tos, disnea, sibilancias, fatiga y fiebre. Las pruebas funcionales respiratorias pueden mostrar trastornos mixtos obstructivos y restrictivos. La Rx de tórax generalmente muestra opacidades difusas (Figura 8 a), aunque el 20% tienen Rx de tórax normal.





Figura 8 a. Eosinofilia tropical.
(A) Rx de tórax de una joven de India que se presentó con síntomas sugestivos de asma.
(B) En el seguimiento en la Rx de tórax dos semanas después de una terapia con dietilcarbazina por eosinofilia pulmonar sospechada se muestra el mejoramiento de las sutiles imágenes.


La TC  es más sensible que la Rx de tórax y puede mostrar opacidades reticulares, y pequeños nódulos, bronquiectasias, atrapamiento de aire, calcificación y adenopatías mediastinales.
El diagnóstico se hace por los síntomas respiratorios y radiográficos típicos en un paciente con historia de residencia o viajes a regiones endémicas de filaria con eosinofilia periférica de más de 30000/mm3, IgE marcadamente elevados o más de 1000 unidades/ml, y serología marcadamente elevada y anticuerpos IgG antifilaria.


INFECCIONES NO HELMÍNTICAS
La infección por coccidioides puede causar neumonía eosinofílica. La diferenciación de la neumonía eosinofílica idiopática puede ser dificultosa. Si hay sospecha de coccidioidomicosis se pueden solicitar tests serológicos aunque estos pueden ser negativos al comienzo de la enfermedad; el ELISA para IgG e IgM son los tests más sensibles.
La tuberculosis pulmonar complicada puede ser causa de eosinofilia.

MEDICAMENTOS Y TOXINAS
Han sido reportadas eosinofilias pulmonares en la ingestión e inhalación de una variedad de medicamentos y toxinas. La presentación clínica puede ser diversa desde infiltrados pulmonares asintomáticos con eosinofilia, tos crónica y síntomas sistémicos como se ve en el DRESS
Los AINES y antimicrobianos (por ej nitrofurantoína, minociclina, sulfonamidas, ampicilina, daptomicina) son las clases de drogas más comunes asociadas a eosinofilias pulmonares pero existen otros como anticonvulsivantes, antidepresivos, inhibidores de la enzima convertidora, betabloqueantes, hidroclorotiazida, y otras sulfodrogas, medios de contraste radiológicos, L-triptófano, metotrexato, amiodarona, bleomicina.
Las exposiciones a toxinas como silicato de aluminio, sulfitos, picaduras de escorpiones, inhalación de heroína, cocaína, marihuana, manufactura del caucho, , inhalación de polvos,o humo, exposición a humos como bomberos, abuso de tricloroetano etc han sido descritos como causantes de eosinofilias pulmonares.


NEUMONÍA EOSINOFÍLICA AGUDA IDIOPÁTICA.
La neumonía eosinofílica aguda idiopática es un tipo de neumonía eosinofílica asociada con rápido desarrollo de fallo respiratorio agudo en un paciente previamente sano. La mayoría de los pacientes se presentan como una enfermedad febril aguda,  de menos de 7 días de duración caracterizada por tos no productiva, disnea, y una variedad de cambios radiográficos inespecíficos (Figura 9 a y 10 a)







Figura 9 a. Neumonía eosinofílica aguda idiopática. Se observa opacidades bilaterales mixtas alveolares y reticulares.








Figura 10 a. Neumonía eosinofílica aguda idiopática. TC que muestra opacidades bilaterales en vidrio esmerilado.




Al comienzo de la enfermedad la eosinofilia periférica es rara pero desarrolla en el curso de la enfermedad. La insuficiencia respiratoria hipoxémica es frecuentemente identificada desde la presentación del cuadro y a menudo requiere ventilación mecánica.
El diagnóstico se hace por la presentación clínica, las imágenes, , la broncoscopía flexible con lavado broncoalveolar que muestra más de 25 por ciento de eosinófilos y ausencia de infección u otra causa precipitante (Tabla). La biopsia de pulmón se reserva para situaciones de diagnóstico incierto. Los hallazgos histopatológicos incluyen daño alveolar difuso, membranas hialinas, y marcado número de eosinófilos alveolares.







Tabla. Causa de eosinofilias pulmonares.



NEUMONÍA EOSINOFÍLICA CRÓNICA.
La neumonía eosinofílica crónica es un trastorno idiopático  caracterizado por una anormal acumulación de eosinófilos en los pulmones. Ocurre predominantemente en mujeres y en no fumadores; se han reportado casos siguiendo a la radioterapia de mama. En general se presenta como cuadro subagudo con una constelación de síntomas que incluyen tos, fiebre, dificultad respiratoria progresiva, pérdida de peso, sibilancias, sudoración nocturna; el asma acompaña o precede a la enfermedad en 50% de los casos. La eosinofilia periférica es común pero hay un 10% a 20% de los pacientes que no tienen eosinofilia.
La Rx de tórax muestra infiltrados periféricos periféricos, de base pleural descriptos como imagen negativa del edema agudo de pulmón que son virtualmente patognomónicos de la enfermedad (Figura 9 a y 10 a), pero estos hallazgos sólo se ven en un tercio o menos de los casos.








Figura 9 a. Neumonía eosinofílica crónica.
Hallazgos clásicos de la neumonía eosinofílica crónica como se ve en una Rx de tórax. El hallazgo incluye compromiso bilateral, predominantemente de lóbulo superior, y opacidades de consolidación y de vidrio esmerilado. En la neumonía eosinofílica crónica el compromiso pulmonar es bilateral en el 75% de los casos y confinado al lóbulo superior en el 50% de los casos. Hay que tener en cuenta que si bien los hallazgos de esta Rx son “clásicos”, la mayoría de los casos no son clásicos y esto se ve sólo en un tercio de los casos.







Figura 10 a. Neumonía eosinofílica crónica.
TC axial (A), y coronal (B) de alta resolución de un paciente con neumonía eosinofílica crónica. Los hallazgos incluyen infiltrados de  aspecto de  consolidación junto a vidrio esmerilado bilaterales y predominantemente en lóbulos superiores en 50%.



Los derrames pleurales se han descripto en pocos casos y la cavitación es excepcional. En el BAL la eosinofilia mayor de 25% es sugestiva de neumonía eosinofílica crónica. Se han descripto lesiones mucosas necrotizantes asociadas a neumonía eosinofílica crónica. La histopatología de la biopsia pulmonar muestra eosinófilos e histiocitos intersticiales y alveolares incluyendo células gigantes multinucleadas (Figura 11 a)








Figura 11 a. Neumonía eosinofílica crónica.
Biopsia a mediano aumento que muestra la combinación de ocupación del espacio aéreo y engrosamiento intersticial, en una paciente con neumonía eosinofílica crónica. El infiltrado del espacio aéreo muestra una combinación de histiocitos y eosinófilos. Un infiltrado inflamatorio similar es responsable del engrosamiento alveolar y  septal asociado



La fibrosis es mínima y la neumonía organizativa (antes llamada BOOP) es un hallazgo comúnmente asociado.
El diagnóstico de neumonía eosinofílica crónica se basa en la combinación de presentación subaguda, hallazgos radiológicos característicos, eosinofilia periférica, eosinofilia en el BAL en ausencia de infección o drogas inductoras de eosinofilia. El diagnóstico diferencial incluye la neumonía organizativa criptogenética y la granulomatosis eosinofílica con poliangeítis (Churg-Strauss).

GRANULOMATOSIS EOSINOFÍLICA CON POLIANGEÍTIS.
La granulomatosis eosinofílica con poliangeítis (GEPA) o enfermedad de Churg-Strauss es un trastorno vasculítico a menudo caracterizado por sinusitis, asma y eosinofilia. Es la única forma de vasculitis que asocia eosinofilia con compromiso pulmonar. Además de los pulmones, la piel, el aparato cardiovascular, renal y neurológico pueden estar afectados.
La eosinofilia periférica de más de 1500 eosinófilos/dl, o más de 10% del recuento total de leucocitos son parte de los criterios diagnósticos de  la GEPA aunque son frecuentes valores de más de 5000 eosinófilos/dl. Los anticuerpos anti citoplasma de los neutrófilos (ANCA), están presentes en 40 a 60% de los pacientes y cuando son positivos el patrón es generalmente de patrón perinuclear por anti mieloperoxidasa.
La Rx de tórax de la GEPA es muy variable pero frecuentemente suele mostrar opacidades en parches sin distribución segmentaria ni lobar, es decir no respeta segmentos ni lóbulos (Figuras 12 a, 13 a, y 14 a.)





Figura 12 a. Granulomatosis Eosinofílica con Poliangeítis (Churg-Strauss)
Rx de tórax frente de un paciente con GEPA.






Figura 13 a. Granulomatosis Eosinofílica con Poliangeítis (Churg-Strauss). Rx de perfil.
Rx de tórax perfil en un paciente con GEPA  mostrando consolidaciones prominentes.









Figura 14 a. Granulomatosis Eosinofílica con Poliangeítis (Churg-Strauss)
TC de alta resolución de lóbulo inferior y medio derechos en un paciente con GEPA  que muestra engrosamiento de la cisura mayor y engrosamiento de los septos en el parénquima subpleural. Agrandamiento de las arterias pulmonares están presentes en esta área. Los bronquios adyacentes son de tamaño normal con algo de engrosamiento peribronquiolar. Pequeñas opacidades en parches están presentes en el parénquima pulmonar y se considera que se correlaciona con la neumonitis eosinofílica presente.



Los infiltrados patognomónicos en la biopsia pulmonar incluyen infiltrados eosinofílicos y vasculitis eosinofílica especialmente de pequeñas arterias y venas, granulomas necrotizantes perivasculares e intersticiales y áreas de necrosis (Figuras 15 a, 16 a y 17 a). Sin embargo, los tejidos de los pacientes que se presentan con GEPA de reciente comienzo pueden no exhibir los hallazgos clásicos anatomopatológicos sino más bien recordar la infiltración eosinofílica sin vasculitis típica de la neumonía eosinofílica crónica o del síndrome hipereosinofílico. En algunos pacientes la neumonía eosinofílica crónica precede al diagnóstico de GEPA.






Figura 15 a. Granuloma en una granulomatosis eosinofílica con poliangeítis (Churg-Strauss).
Micrografía a bajo aumento que muestra granulomas en palizada de un paciente con GEPA caracterizado por un área de necrobiosis (flecha) permeado por neutrófilos desintegrados y rodeados por infiltrado histiocitario.  Puede o no estar acompañado de vasculitis.







Figura 16 a. Histopatología de una granulomatosis eosinofílica con poliangeítis.
Pequeña arteria en un paciente con GEPA (Churg Strauss), que muestra necrosis fibrinoide de la íntima e infiltración mural por histiocitos consistentes con vasculitis granulomatosa necrotizante. Hay marcada eosinofilia extravascular.









Figura 17 a.
Micrografía a bajo aumento de una biopsia pulmonar de un paciente con GEPA que muestra una lesión arterial oclusiva necrotizante bien establecida con obliteración de la luz arterial. La dilatación de los canales linfáticos en la adventicia arterial contribuye significativamente a la marcada diferencia de tamaño entre la arteria y el bronquiolo adyacente. Otras regiones del pulmón revelan infiltración eosinofílica del parénquima.



El diagnóstico de GEPA es típicamente sospechado por los hallazgos clínicos, eosinofilia de más de 1500 eosinófilos por dl, asma, y enfermedad de senos paranasales. El hallazgo de ANCA p es un fuerte elemento a favor del diagnóstico. Pero la confirmación diagnóstica requiere típicamente biopsia tisular del sitio más accesible antes de iniciar terapia con corticosteroides

ASPERGILOSIS BRONCOPULMONAR ALÉRGICA (ABPA).
La ABPA es una reacción de hipersensibilidad compleja  que ocurre cuando la vía aérea se coloniza por Aspergillus. Repetidos episodios de obstrucción bronquial, inflamación e impactación de moco pueden conducir a bronquiectasias, fibrosis y compromiso respiratorio. La respuesta inmune disparada por Aspergillus fumigatus es la responsable de este síndrome.
El cuadro clínico del ABPA es dominado por episodios recurrentes de obstrucción bronquial, fiebre, malestar, expectoración de tapones mucosos amarronados, eosinofilia periférica y hemoptisis. Las sibilancias no son siempre evidentes y algunos pacientes se presentan con consolidaciones pulmonares asintomáticas. La TC de alta resolución (TACAR) de tórax puede mostrar amplias bronquiectasias cilíndricas proximales con predominancia por el lóbulo superior y engrosamiento de la pared bronquial. Mientras que las bronquiecatsias centrales con adelgazamiento bronquial a medida que se hacen periféricos es considerada la manifestación clásica de la ABPA, este dato no se considera ni sensible ni específico de este trastorno (Figura 18 a).






Figura 18 a. Bronquiectasias Centrales en Aspergilosis Broncopulmonar Alérgica.
Bronquiecatsias centrales en un paciente con aspergilosis broncopulmonar alérgica (ABPA). Múltiples bronquios de tercera y cuarta generación son visualizados. Los pequeños bronquios periféricos llenos de moco explican las opacidades lineales ramificadas en el parénquima pulmonar distal.



Los hallazgos histológicos en uun paciente con ABPA incluyen bronquiolitis asmática, neumonía eosinofílica, granulomatosis broncocéntrica e impactación mucoide bronquial. En ocasiones la granulomatosis broncocéntrica en ausencia de hongos endobronquiales  ocurre con eosinofilia pulmonar.

MISCELÁNEAS.
Otras entidades pueden dar eosinofilias pulmonares pero con menor frecuencia



SÍNDROME HIPEREOSINOFÍLICO
El síndrome hipereosinofílico (SHE), puede tener compromiso de diversos órganos tales como corazón, tracto gastrointestinal, pulmones, cerebro y riñones. Cuando compromete pulmón suele dar tos y dificultad respiratoria
Otras enfermedades pulmonares idiopáticas que pueden cursar con eosinofilia en el BAL  son la fibrosis pulmonar idiopática, sarcoidosis, neumonitis por hipersensibilidad, enfermedades reumáticas sistémicas, y menos frecuentemente en neumonía organizativa criptogenética, artritis reumatoidea,   síndrome de Sjögren, síndrome post radiación, y enfermedad de injerto versus huésped. Algunas neoplasias como carcinomas de pulmón, tumores cervicales metastásicos, carcinomas escamosos de vagina, pene, piel o nasofaringe, adenocarcinoma de estómago, colon o útero y carcinoma transicional de vejiga. También algunos linfomas, leucemia eosinofílica, síndrome de Sézary con compromiso pulmonar.

Finalmente digamos que cuando nos enfrentamos a un paciente con infiltrado pulmonar eosinofílico debemos comenzar nuestra aproximación de diagnóstico diferencial con un exhaustivo interrogatorio y examen físico. Esta sistemática debe considerar antecedentes de medicamentos que esté tomando, incluyendo aspirina, AINES, anticomiciales, antibióticos así como exposiciones ocupacionales, humo, polvo (bomberos, fumadores), o químicos. Viajes recientes o remotos, incluyendo residencia en zona endémica de coccidioidomicosis y una variedad de parásitos, ingesta de carne porcina mal cocida o jabalí u otras carnes animales sobre todo en quien se queja de dolores musculares, inflamción, hinchazón, y debilidad muscular. Antecedentes de asma, compromiso orgánico extrapulmonar.
Muchas veces estos procesos suelen confundirse con neumonías, sin embargo hay que recordar siempre que toda neumonía bacteriana induce respuestas eosinopénicas, y la presencia de eosinofilia en este contexto debe sugerir alguno de los trastornos citados arriba. Además hay que recordar que algunas de estas condiciones de eosinofilia pulmonar no tienen eosinofilia periférica tal como es el caso de la neumonía eosinofílica aguda y a veces la neumonía eosinofílica crónica.
Recordar siempre el aporte de las imágenes sobre todo de la TACAR que da imágenes clásicas en la neumonía eosinofílica crónica  aspergilosis broncopulmonar alérgica.
Completar con tests serológicos de acuerdo al caso como por ejemplo ELISA para Strongiloides, folarias, paragonimus, equinococcus, cisticercosis, coccidioidomicosis, ANCA, y dosaje de IgE total e IgG para Aspergillus.
A veces hay que recurrir a estudios invasivos como la fibrobroncoscopía con BAL en busca de larvas o huevos, o una biopsia pulmonar en casos de sospecha de Churg-Strauss.
Finalmente, estudios simples como la investigación de larvas en el esputo pueden dar el diagnóstico tal como sucedió en este caso.



Fuente de información
Desde el Departamento de Medicina Interna A, Rabin Medical Center, Petah Tiqva, y la Facultad de Medicina Sackler, Universidad de Tel Aviv, Tel Aviv (YB, IO); y el Laboratorio Central de Salud Pública, Ministerio de Salud, Jerusalem (ZG) - todos en Israel.
Solicitudes de reimpresión al Dr. Beigel en el Departamento de Medicina Interna A, Rabin Medical Center, Beilinson Campus, Petah Tiqva 49100, Israel, o al beigelr {at} post.tau.ac.il.
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RODETE MIOTÓNICO EN PACIENTE HIPOTIROIDEA.

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Rodete miotónico en paciente hipotiroidea. El rodete miotónico es una contracción transversal que aparece en el músculo especialmente en bíceps braquial cuando es explorado por estiramiento o percusión de sus fibras. Esta contracción es localizada y fácilmente palpable y tiene una duración de no más de 10 segundos generalmente. Se ve prevalentemente en hipotiroidismo aunque en estados de gran hipotonía como en algunos pacientes añosos también puede verse. A diferencia de lo que su nombre pareciera indicar, no tiene nada que ver con el fenómeno miotónico que es la incapacidad de relajar los músculos después de una contracción y que es indicativo de enfermedades miotónicas como la distrofia miotónica de Steinert o la miotonía congénita de Thompsen. El fenómeno, lo mismo que la relajación lenta del aquíleo tiene relación con la infiltración mixedematosa de los haces musculares.

RELAJACIÓN LENTA DEL REFLEJO AQUÍLEO EN UNA PACIENTE CON HIPOTIROIDISMO

MUJER DE 61 AÑOS CON SÍNDROME COLEDOCIANO LITIÁSICO E INCIDENTALOMA ADRENAL.

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Hospital "Dr Ángel Pintos" de Azul
Paciente femenina de 61 años:

MOTIVO DE INTERNACIÓN:
Ictericia.

ENFERMEDAD ACTUAL: 
Comienza hace diez días  con dolor epigástrico irradiado a hipocondrio derecho seguido de la emisión de orinas oscuras y cambio de coloración de piel y mucosas mientras estaba en Buenos Aires por lo que consulta al Hospital Santojani donde entre otros estudios le realizan una TAC de abdomen y un laboratorio. En la TAC se ve una víabiliar intra y extrahepáticas   dilatadas. Solicita traslado a Azul que es su lugar de origen.

ANTECEDENTES PATOLÓGICOS: 
Paciente colecistectomizada hace 5 años por litiasis. Desde entonces ha presentado episodios de dolor abdominal similares a los que motivaron su internación actual.
Tabaquismo de 25 cigarrillos por día desde hace más de 40 años. EPOC, broncoespasmo. Recibió cuatro impactosde bala en el pasado. Presenta un proyectil  alojado en seno maxilar izquierdo, otro en cuello  y otro en región paravertebral dorsal derecha.

EXAMEN FÍSICO:
Paciente en buen estado general, afebril, ictérica, TA 140/70mmHg, frecuencia cardíaca 90 por minuto, frecuencia respiratoria 22 por minuto. Saturación digital 91%.
Livedo reticularis a predominio de los cuatro miembros.
Livedo reticularis



Se observa ligero exoftalmos izquierdo y secuela de parálisis facial periférica izquierda que la paciente refiere que lo tiene desde que recibió el disparo de arma de fuego hace varios años.
Aparato cardiovascular: ruidos cardíacos presentes en los cuato focos no R3 ni R4. Pulsos periféricos presentes, pedios débiles.
Aparato respiratorio: hipoventilación en ambas bases, broncoespasmo generalizado.
Abdomen : blando, depresible doloroso a la palpación de epigastrio. Cicatriz de colecistectomía. RHA (+)

INFORME DE ECOGRAFÍA: hígado de tamaño y ecoestructura normal, con dilatación de la vía biliar intra y extrahepática. Paciente colecistectomizada. Vía biliar extrahepática de 2,4 cm con por lomenos dos imágenes litiásicas de 1,5 cm de diámetro cada una. Páncreas s/p.Bazo y riñones s/p

INFORME DE TAC:“hígado aumentado de tamaño en el eje céfalocaudal. No se delimitan imágenes focales antes ni después de administración de contraste EV. Dilatación de la vía biliar intra y extrahepática. Páncreas normal. Huellas quirúrgicas de colecistectomía. Bazo homogéneo. La glándula suprarrenal derecha se encuenta aumentada de tamaño; mide 3,2 x 1,5 cm  y su densidad es de 16 UH que se interpreta como adenoma. La suprarrenalizquierda mide 1,3 x 2,4 siendo su densidad de 12 UH compatible con adenoma. Ambos riñones son de forma y tamaño conservados. Imagen hipodensa en valva posterior de 8 mm compatible con quiste. Concentran y eliminan el material de contraste.  Se constató correcta progresión del contraste oral a través del tubo digestivo.  El retroperitoneo prevertebral no mostró adenomegalias.  Vejiga centrada distendida.  La aorta de calibre conservado. Imagen de densidad metálica paravertebral dorsal izquierda”













































LABORATORIO: 
GR 3740000 Hto 35%. Hb 11,7. GB 7700. Granulocitos 73% Linfocitos 17% Monocitos 10%. Plaquetas 316000. Glucemia 98 mg/dl. Urea 13 mg/dl. Creatinina 0,6 mg/dl. Na 142.K 3,67. Cl 99. TGO 28 UI/L TGP 18 UI/L. FAL 473 U/L. Bilirrubina total 3,18 mg/dl. Bilirrubina directa 1,93. Amilasa 20 U/L. VSG 105 mm/hora.
En un análisis anterior realizado en hospital Santojani 5 días antes presentaba un hepatograma con bilirrubina total de 10,10 y una BD de 6,6. Con una FAL de 297.  TSH 1,82.

Aldosterona:  41 pg/ml
ARP(actividad de renina plasmática): 2,14 ng/ml.
Cortisol plasmático: 2,95 ug/dl
ACTH 13,6 pg/ml.
Ácido vanilmandélico y metanefrinas urinarias normales.
CLU (cortisol libre urinario): 20 microgramos/24 horas  (rango normal es de 10 a 100 microgramos por 24 horas) (mcg/24 h).

Los dosajes hormonales fueron repetidos y no mostrando diferencias significativas

A la paciente se le realizó una CPRE que confirmó la prencia de colelitiasis. Durante el procedimiento se extrajeron varios litos de la vía biliar principal y se procedió a realizar papilotomía endoscópica. La paciente cursó el post procedimiento sin complicaciones.

CONCLUSIONES DEL CASO.
Esta paciente de 61 años que fue internada por síndrome coledociano litiásico por coledocolitiasis residual post colecistectomía presentó en las imágenes la presencia de incidentaloma adrenal bilateral.
Todo aumento de tamaño de la glándula suprarrenal por encima de 1 cm de diámetro es considerado anormal y cuando se trata de un hallazgo fortuito en un estudio imagenológico solicitado por otro motivo se lo denomina incidentaloma. El hallazgo de incidentalomas adrenales es un hecho frecuente en la práctica clínica debido a la mayor solicitud de imágenes por parte de los médicos y además por una notable mejora en la calidad y en la sensibilidad de detección de los nuevos equipos.  Una revisión de 61.054 pacientes entre 1985 y 1990 la prevalencia de incidentalomas fue 0,4% de todas las TC evaluadas, mientras que un estudio más reciente con equipos de mucha  mayor resolución en 2006 (Bovio S, Cataldi A, Reimondo G, et al. Prevalence of adrenal incidentaloma in a contemporary computerized tomography series. J Endocrinol Invest 2006; 29:298), mostró una prevalencia de 4,4%, y si se toma en cuenta sólo los pacientes añosos la prevalencia fue de 10% !!!
Siempre que nos enfrentamos a incidentalomas adrenales debemos contestarnos dos preguntas: 1) ¿es maligno? Y 2) ¿es funcionante?  En este caso llamó la atención la bilateralidad del crecimiento suprarrenal. En general  el crecimiento bilateral se suele ver en metástasis, linfomas,  hipercortisolismos hipofisarios por exceso de ACTH, hiperplasia adrenal congénita, hemorragias, infecciones (tuberculosis,histoplasmosis), feocromocitomas,amiloidosis, enfermedades infiltrativas y también adenomas. No había elementos clínicos ni  imagenológicos para pensar en malignidad adrenal, infecciones , enfermedades infiltrativas, hemorragias etc,  y el hipercortisolismo se descartó con un CLU repetido normal y una ACTH en niveles normales/ bajos (algunos utilizan como primera prueba para descartar hipercortisolismo una supresión con 1 mg d dexametasona nocturna y un dosaje de cortisol a las 8AM con un valor de corte de 5 ug/dl). Por lo tanto, dado el tamaño,la forma, y la densidad medida en UH concluimos que se trataban de adenomas bilaterales no funcionantes. Debido a algunos elementos clínicos y humorales como HTA, algún registro de hiperglucemia, hipopotasemia no justificada , inicialmente nos orientamos a hipercortisolismo o hiperaldosteronismo primario pero ambos procesos fueron adecuadamente descartados, el primero por la ausencia de hipercortisolismo (CLU/ACTH normales), y el segundo por ausencia de una relación aldosterona/actividad de renina plasmática compatibles.
Solucionado su síndrome coledociano a través de la instrumentación de su vía biliar a través de CPRE con extracción de litos y papilotomía. la conducta será el seguimiento clínico semestral, así como control  de las imágenes en cuanto a crecimiento o aparición de elementos que hagan cambiar la actual conducta  expectante.  

INCIDENTALOMA ADRENAL
 Un incidentaloma suprarrenal es una lesión de masa mayor de 1 cm de diámetro  descubiertos en forma casual en un  examen radiológico. El aumento de la incidencia de incidentalomas es el resultado de los avances tecnológicos en imágenes como  tomografía computarizada (TC) y  resonancia magnética (RMN), o aun la ultrasonografía.

Todos los pacientes con incidentalomas suprarrenales deben ser evaluados por la posibilidad de malignidad o  hiperfunción hormonal subclínica:
Frente a un incidentaloma adrenal hay que tener en cuenta algunos puntos que pueden ayudar al momento de la toma de decisiones:
  • Una masa homogénea suprarrenal  menor de 4 cm de diámetro, con un borde liso, y un valor de atenuación  menor a 10 unidades Hounsfield (UH) en la TC sin contraste, y un “lavado del contraste o washout” rápido (por ejemplo más del 50 por ciento a los 10 minutos) es muy probable que sea un adenoma cortical benigno.
  • Las características de imagen que sugieren carcinoma adrenal o metástasis incluyen: forma irregular, densidad no homogénea, valores de atenuación altos en la TC (más de 20 UH),  retraso medio del lavado del contraste  (por ejemplo menos de 50 por ciento a los 10 minutos),  un diámetro mayor de  4 cm, y calcificación tumoral.
  • El feocromocitoma debe excluirse en todos los pacientes mediante la medición de 24 horas metanefrinas y catecolaminas fraccionadas en orina. Si la masa suprarrenal es muy vascularizada, o hay otras características que sugieren  feocromocitoma, la prueba preferida es  metanefrinas plasmáticas fraccionadas.
  • El síndrome de Cushing subclínico debe descartarse mediante la realización de la prueba de supresión con dexametasona durante la noche 1 mg (DST). Para detectar autonomía secretoria clínicamente significativa el valor de corte del cortisol sérico a las 8 AM debe ser de más de 5 ug/dl (o sea más de 138 nmol/L).  Una prueba anormal de supresión con 1mg de dexametasona  es consistente con producción de cortisol independiente de ACTH, hallazgo que debe ser confirmado con un cortisol libre urinario de 24 hs (CLU), concentración sérica de ACTH y de sulfato de dihidroepiandrosterona (DHEA-S), y una supresión nocturna con dosis alta (8 mg) de dexametasona  durante la noche.
  •  Si el paciente con incidentaloma suprarrenal es hipertenso, una relación aldosterona plasmática/actividad de renina plasmática y el dosaje de la concentración de postasio sérico deben ser obtenidos para un screening primario básico de hiperaldosteronismo primario.
  • Se recomienda la cirugía para todos los pacientes con documentación bioquímica de feocromocitoma (Grado 1B).
  • Se sugiere resección quirúrgica para todo paciente joven con síndrome de Cushing subclínico y para todos  aquellos pacientes con patología atribuible al exceso de corticosteroides (reciente inicio de HTA,diabetes, obesidad, y baja masa ósea)
  • Se sugiere resección quirúrgica para pacientes con masa adrenal mayor de 4 cm de diámetro. Sin embargo, el contexto clínico, las caracerísticas de la imagen, la edad del paciente guían las decisiones diagnósticas en pacientes con incidentalomas de 4 cm.
  • En pacientes con cáncer conocido en otro órgano en el que aparece una masa adrenal que tiene aspecto de metástasis puede estar indicada la punción aspiración con aguja fina (PAAF), pero sólo después de haber descartado feocromocitoma desde el punto de vista bioquímico por la posibilidad del peligro de punzar un feocromocitoma con una crisis catecolaminérgica. Si el paciente tiene cáncer diseminado no se justifica la punción adrenal.
  • Se recomienda la extirpación de cualquier tumoración fenotípicamente maligna.
  • Toda masa de más de 10 cm debe ser extirpada aun con aspecto fenotípico de benignidad. Se recomienda adrenalectomía abierta más que un procedimiento laparoscópico.
  • En incidentalomas de apariencia benigna se sugiere repetir imágenes a los 6 a 12 meses
  • Cualquier tumor que crece más de 1 cm en ese período debe ser resecado.
  • La prueba de supresión nocturna con dexametasona debe ser repetida anualmente durante  cuatro años

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